Conflicto en Medio Oriente: EE.UU. volvió a incluir a los hutíes en la lista de organizaciones terroristas
La decisión fue anunciada por la Casa Blanca para elevar la presión sobre el grupo rebelde de Yemen
CORRESPONSAL EN EE.UU.
WASHINGTON.- Estados Unidos anunció que volverá a incluir a los hutíes, el grupo rebelde Yemen respaldado por Irán, en la lista de organizaciones terroristas, una movida que eleva la presión financiera y diplomática sobre el grupo que ha trastornado la economía global con sus ataques a barcos comerciales en el mar Rojo en represalia por la guerra en la Franja de Gaza.
El gobierno de Joe Biden, que había quitado a los hutíes de la lista a principios de 2021, dijo que la medida entrará en vigor recién en 30 días para permitir facilitar la continuidad en la asistencia humanitaria a Yemen, uno de los países más pobres del mundo y jaqueado por una guerra civil entre los hutíes y el gobierno, respaldado por Arabia Saudita y Occidente. El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, dijo además en un comunicado que, si los hutíes cesan sus ataques en el Mar Rojo y el Golfo de Aden, Estados Unidos “inmediatamente reevaluará” la medida.
“Estos ataques son la definición de libro de terrorismo. Han puesto en peligro a personal norteamericano, a los marineros civiles y a nuestros socios, han puesto en peligro el comercio mundial y amenazado la libertad de navegación”, dijo Sullivan en un comunicado difundido por la Casa Blanca. “Esta designación es una herramienta importante para impedir el financiamiento terrorista de los hutíes, restringir aún más su acceso a los mercados financieros y hacerlos responsables de sus acciones. Si los hutíes cesan sus ataques en el Mar Rojo y el Golfo de Adén, Estados Unidos reevaluará inmediatamente esta designación”, agregó el comunicado.
Altos funcionarios norteamericanos indicaron en una llamada con periodistas que la decisión se tomó a partir de los continuos ataques de los hutíes respaldados por Irán en el Mar Rojo y el Golfo de Adén, a los que llamaron “un claro ejemplo de terrorismo y una violación del derecho internacional y una gran amenaza para las vidas y el comercio mundial”, que además ponían en peligro la entrega de ayuda humanitaria.
Los hutíes dijeron luego del anuncio que consideraban un “honor” ser señalados por Estados Unidos como terroristas. El grupo ha lanzado decenas de ataques contra buques en una de las rutas marítimas más transitadas del planeta en represalia por la ofensiva de Israel en la Franja de Gaza en respuesta por el ataque terrorista de Hamas del pasado 7 de octubre.
La nueva movida de la Casa Blanca intensifica la escalada y el mayor involucramiento de Washington en el conflicto en Medio Oriente. La semana anterior, y en respuesta a los ataques de los hutíes a los buques comerciales, Estados Unidos y el Reino Unido lanzaron amplios bombardeos contra el grupo rebelde en Yemen. El ataque contó con el apoyo de Australia, Bahréin, Canadá y Holanda. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, dijo que Francia se mantuvo al margen de la operación militar por considerarla una escalada en la región.
“Nos aseguraremos de responder a los hutíes si continúan con este comportamiento escandaloso”, dijo Biden luego del ataque, y añadió que el grupo debería ser considerado como una organización terrorista. “Creo que lo es”, respondió ante una pregunta.
Los ataques de los hutíes a los buques comerciales y las represalias de Estados Unidos contra el grupo continuaron luego de ese primer cruce, una clara indicación de la continua escalada en la violencia en Medio Oriente, una región convulsionada y plagada de conflictos. Al ataque de Hamas a Israel y la respuesta israelí en la Franja de Gaza ya se sumaron ataques de la milicia libanesa Hezbollah –también respaldada por Irán– en el norte de Israel, y ataques norteamericanos en Irak y Siria.
Estados Unidos designó previamente a los hutíes como “organización terrorista extranjera” durante la presidencia de Donald Trump, a pesar de las fuertes objeciones de grupos de derechos humanos y de ayuda humanitaria por el impacto que la movida tendría sobre el resto de la población de Yemen. A principios de 2021, ya bajo el actual gobierno de Biden, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, sacó a los hutíes de la lista de organizaciones terroristas para facilitar la llegada de ayuda humanitaria a Yemen. Ahora los funcionarios norteamericanos dijeron que trabajarían en un esquema que permita diseñar las sanciones financieras para minimizar el daño a los 32 millones de habitantes de Yemen.
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