Cinco curiosidades sobre Griselda Blanco para entender el éxito de la serie: Medellín, el nombre de su hijo y el peor final
La historia de la narcotraficante conocida como “La madrina de la cocaína” da mucho de que hablar, a raíz de la producción que se estrenó en Netflix con Sofía Vergara como protagonista
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La vida de la temida narcotraficante, Griselda Blanco, da mucho de que hablar. Quizás muchos sabían de su existencia, pero varios otros acaban de enterarse de que existió una mujer a la que el propio Pablo Escobar le tuvo miedo. “La Madrina de la cocaína” fue la fundadora del Cartel de Medellín y según se estima, habría cargado con más de 250 homicidios en la espalda.
La semana pasada, Netflix sumó a su catálogo Griselda, una serie de seis capítulos de alrededor de 50 minutos de duración cada uno, que aborda la vida de la mujer conocida como “La viuda negra”. Si bien es un contenido nuevo, sus creadores, Chris Brancato, Eric Newman, Carlo Bernard tenían experiencia con producciones de violencia, drogas y narcotráfico, puesto que fueron los artífices de la exitosa, Narcos, sobre Pablo Escobar, la DEA y el Cartel de Medellín.
Para la nueva producción de Netflix, Sofía Vergara se sometió a una impresionante transformación física para darle vida a Blanco. Lo cierto es que su trabajo y la propuesta de la serie, hicieron que los fans del streaming comenzaran a indagar un poco más en quién fue esa temible mujer que aterrorizó a todos los involucrados en el narcotráfico en Miami y Colombia entre la década del 70 y el 80. Una mujer de armas tomar que asesinó a sus maridos, que le puso a uno de sus hijos el nombre de un mafioso y cuya vida terminó por un presunto ajuste de cuentas.
Griselda Blanco y su relación con Medellín
Según los registros, nació en Cartagena de Indias, Colombia, el 14 de febrero de 1943. Al poco tiempo, se fue junto a su madre a Medellín, donde vivió gran parte de su vida. A los 14 años huyó de su casa para escapar de los abusos y la violencia a los que era sometida por su padrastro. Años más tarde emigró a los Estados Unidos donde se convirtió en “La madrina de la cocaína”.
Fue una de las fundadoras del Cartel de Medellín. El 17 de febrero de 1985, mientras vivía en California, fue detenida por las autoridades y condenada a 15 años de cárcel por fabricar, importar y distribuir cocaína. La declararon culpable de al menos tres cargos por asesinato y fue sentenciada a 20 años de cárcel, en 1998.
Por sus problemas de salud, fue liberada en 2004 y se trasladó de vuelta a Medellín, ciudad en la que residió hasta su asesinato, el 3 de septiembre de 2012.
La muerte de Griselda Blanco: el sicario que la mató
El Departamento Antidrogas de Estados Unidos (DEA) le atribuyó a Blanco más de 250 homicidios. La mujer terminó con la vida de todo aquel que se interpuso en su camino. Incluso en la serie se pudo ver cómo las personas que trabajaban con ella, asesinaban en su nombre. Pero, así como ella tenía sicarios, su propia vida terminó a manos de uno.
El 3 de septiembre de 2012, cuatro años después de haber sido liberada, Blanco fue al mercado de Colombia a comprar un pedazo de carne, pero nunca regresó a su casa. Desde una moto, un sicario ejecutó dos disparos en la cabeza, los cuales terminaron con su vida. Tenía 69 años. Según se presume, habría sido por un ajuste de cuentas de la época en la que ella aún vivía en Colombia, previo a emigrar a los Estados UNIDOS.
“La viuda negra”
Uno de los apodos que adquirió la colombiana fue el de “La viuda negra”. ¿El motivo? Se casó tres veces y los tres hombres terminaron muertos. Su primer esposo, Carlos Trujillo, padre de sus hijos mayores, Dixón, Uber y Osvaldo ‘Ozzy’, murió presuntamente por una cirrosis, no obstante, esto nunca fue del todo confirmado. La hipótesis central es que Blanco pudo haberlo asesinado.
Griselda se casó en segundas nupcias con Alberto Bravo, el hombre que la introdujo al mundo del narcotráfico. Pero, para ella, la traición se pagaba con sangre. Al parecer, descubrió que él actuaba a sus espaldas no solo en el “trabajo” sino también en la intimidad. Según las versiones, lo encontró en un bar con otra mujer y le disparó en la cabeza y el estómago. Así lo mató.
Darío Sepúlveda fue su último marido. Trabajaban juntos, pero un día él se hartó de las presiones, tomó al hijo de ambos y se fue de la casa. Esto a Griselda Blanco no le gustó nada. ¿Qué hizo? Contrató a un grupo de sicarios quienes, disfrazados de policías, lo asesinaron. Según las versiones, ella estuvo involucrada en la muerte de sus tres maridos y por eso se le adjudicó el apodo de “La viuda negra”.
Michael Corleone, un nombre conocido
“La patrona”, como también la llamaban, tuvo cuatro hijos. Junto a su primer marido se convirtió en madre de Dixón, Uber y Osvaldo ‘Ozzy’. Años más tarde, y ya en los Estados Unidos, nació su cuarto hijo, fruto de la relación que tuvo con su tercer esposo, Darío Sepúlveda. ¿Cómo lo llamó? Michael Corleone Sepúlveda Blanco. Sí, el mismo nombre que tuvo el personaje de Al Pacino en la trilogía de El Padrino, que, justamente, interpretaba a un mafioso.
Las confusas muertes de sus tres hijos mayores
Las vidas de los tres hijos mayores de la narcotraficante terminaron de la peor manera. Dixon, su primogénito, fue capturado al mismo tiempo que ella y lo asesinaron en 1992, poco después de que recuperara su libertad. No hay claras certezas de los motivos de su ejecución.
Uber también habría muerto por un ajuste de cuentas, al igual que su hermano menor, Osvaldo. Si bien, los contextos en los que se dieron los crímenes nunca quedaron del todo claros, lo que sí se estima es que los tres hijos mayores de la narcotraficante fallecieron mientras ella aún estaba tras las rejas.
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