Brasil: un recorrido por las instalaciones del Palacio de Planalto luego de la destrucción de los bolsonaristas

Luego de los destrozos producidos por los seguidores de Jair Bolsonaro en las inmediaciones del Congreso, la Corte Suprema y el Palacio de Planalto, el secretario de comunicación, Paulo Pimenta, mostró a través de sus redes sociales cómo quedaron las instalaciones. Allí, se destrozaron obras de arte de gran valor histórico, saquearon el depósito de armas y destruyeron distintos despachos como el de la primera dama y esposa de Lula Da Silva, Janja da Silva.

El ataque comenzó alrededor de las 15.30 en la Explanada, o Plaza de los Tres Poderes, el centro de la ciudad capital de Brasil, Brasilia. Allí cientos de manifestantes bolsonaristas se abroquelaron e irrumpieron en el Congreso, hasta llegar a la sala de senadores federales. Más tarde hicieron lo propio con los otros dos edificios, el STF de la Corte y la Casa de Gobierno.

En esta última, reside el Poder Ejecutivo. Tanto el presidente Lula da Silva, como su esposa y los ministros tienen sus despachos de trabajo. “La horda que invadió la sede del poder en Brasilia hizo exactamente lo que se planteó durante los últimos cuatro años: ¡disturbios y destrucción!”, dijo Pimenta mientras mostraba los daños ocasionados.

En el primero de los videos, el secretario muestra cómo quedaron los despachos. Los televisores destruidos al igual que las computadoras, las impresoras y otros dispositivos digitales. Tanto los escritorios, como importantes documentos y las sillas fueron dañadas hasta el punto de ser inutilizables. Los pasillos y las plantas cubiertos de tierras, hojas y suciedad.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva ha visitado el Palacio del Planalto, sede del Gobierno Federal, así como el Tribunal Supremo, donde se ha reunido con la presidenta del mismo, Rosa Weber, y varios ministros. La visita del mandatario ha servido para analizar la destrucción de las oficinas de los poderes, ya que los simpatizantes del exdirigente habrían roto parte del patrimonio.

Siguiendo con su recorrido por el Palacio de Planato, se puede observar la sala de conferencias y actos destruida. Las sillas partidas, las cortinas cortadas, al igual que pizarrones y escenarios de madera. De fondo también se aprecian los destrozos en los ventanales, vidrios y espejos de la sede de Gobierno de Brasil.

Mediante algunas fotografías, también se hizo eco de las consecuencias de la usurpación. Tierra y lo que parece ser pólvora derramada en el suelo afectó las alfombras del piso, los sillones y butacas en el Palacio. Además, las estatuas y bustos que se encuentran distribuidos en la zona de igual forma se vieron afectadas. Entre los escombros, resalta un escudo de la Policía.

Por último, en algunos sitios del edificio se cortó la luz por daños reportados en los interruptores y en la energía eléctrica. Una de las cocinas tiene daños en los microondas y heladeras. Mientras que cientos de cristales yacen en el suelo a la espera de ser recogidos. Las puertas en su mayoría fueron forzadas y las cerraduras destruidas.

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