Brasil, al límite: Río de Janeiro reimpone un toque de queda para “evitar un genocidio”
El alcalde de la ciudad advirtió sobre al avance del coronavirus; el país registra casi dos mil muertes diarias
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RÍO DE JANEIRO.- El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, decretó este jueves un toque de queda parcial para evitar un “genocidio” causado por la pandemia del coronavirus, que está fuera de control en varios estados, incluso los de la zona sur, región con altos ingresos per cápita.
Brasil registra poco más de mil muertos por día en promedio día desde hace más de un mes, cifra que subió este miércoles a 1910 y puede subir a 3 mil según un conocido especialista. El refuerzo del aislamiento “tiene como objetivo principal evitar que se repita en 2021 el genocidio de 2020 en la ciudad de Río de Janeiro”, declaró el alcalde carioca Paes.
”En las unidades [de Salud] comenzamos a tener más personas con síntomas de Covid (...), este es el dato que más influyó para tomar esta decisión”, señaló el jefe del gobierno municipal. De este modo Río de Janeiro se suma a la intensificación del aislamiento que ya rige en San Pablo, Brasilia, Fortaleza y otras capitales.
El Diario Oficial de la alcaldía informó este jueves que las medidas entrarán en vigor a partir del viernes y continuarán hasta el 11 de marzo. No se podrá permanecer en las calles desde las 23 a las 5 horas, los bares y restaurantes están autorizados a funcionar de las 6 a las 17 horas, y se prohíbe la actividad de vendedores ambulantes en las playas así como los espectáculos con público y el funcionamiento de discotecas.
Con este plan de aislamiento Paes pretende evitar que se sature la capacidad de atención de la red pública de hospitales, cuyas salas de terapia intensiva están ocupadas en un 88%.
Según un informe del canal CNN Brasil una decena de capitales están al borde del “colapso” de sus sistemas de salud. Las regiones norte y nordeste, las más humildes del país, presentan cuadros críticos desde hace meses, pero desde el mes pasado se agravó el cuadro en la región sur, una zona donde hay estados que se encuentran entre los de más altos ingresos per cápita. En Rio Grande do Sul, el más importante del sur brasileño, la situación está fuera de control. La capital de esta importante provincia, Porto Alegre, se encuentra con un 100 % de las salas de terapia intensiva ocupadas tanto en la red pública como en la privada, según CNN.
El hospital Moinos de Vento, uno de los más importante de la red privada portoalegrense, instaló esta semana un contenedor refrigerado para depositar cadáveres de víctimas del coronavirus debido a la saturación de su morgue. En el estado de Santa Catarina, también sureño y donde se encuentra una de las capitales turísticas del país, Florianópolis, comenzaron a trasladar infectados con el Covid-19 a otras provincias por falta de salas y de personal para cuidar a los pacientes graves.
Miguel Nicolelis, doctor por la Universidad de San Pablo, uno de los especialistas en coronavirus más respetados del país, declaró que “podemos estar ante la más grande catástrofe humanitaria del siglo 21”.Brasil registró este miércoles una media móvil de 1332 muertos, que indica el promedio de víctimas fatales de los últimos días. El país lleva 42 días consecutivos en los que la media móvil de fallecimientos está por encima de los mil casos. Hasta este miércoles Brasil sumaba un total de 259.402 muertos, ubicándose en el segundo lugar del mundo detrás de Estados Unidos. ”La posibilidad de pasar la línea de 3000 muertos por día es algo real, estamos hablando de entre 180 mil a 270 mil personas muertas en los próximos tres meses”, planteó Nicolelis.
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