Bolsonaro advierte que las protestas del martes serán un “ultimátum” para los jueces de la Corte
En un clima de fuerte tensión política, habló sobre las protestas y marchas convocadas para el Día de la Independencia
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BRASILIA.– El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, afirmó hoy que las protestas convocadas para el próximo martes, cuando se celebra el Día de la Independencia del país, serán un “ultimátum” para jueces del Supremo Tribunal Federal (STF), cuyo palacio será rodeado por un cordón de seguridad ante el riesgo de que sea invadido por los manifestantes.
“El recado que den ustedes, pueblo brasileño, en las calles el próximo martes 7 de septiembre, será un ultimátum para esas dos personas”, dijo el presidente durante un acto realizado hoy en Tanhacu, ciudad del interior estado de Bahía, en el nordeste del país.
“Nosotros no criticamos a instituciones ni a los poderes, pero no podemos admitir que una o dos personas usen el poder para dar un nuevo rumbo a nuestro país”, continuó.
“Esas dos personas tienen que entender, este recado es para ustedes”, acotó Bolsonaro.
Pese a que el mandatario no los citó por sus nombres probablemente se refería a los jueces Alexandre de Moraes y Roberto Barroso, ambos del STF, a quienes ha criticado e incluso insultado a lo largo de las últimas semanas. Moraes está a cargo de investigaciones sobre Bolsonaro ante la sospecha de que estaría vinculado a una “organización delictiva” que produce y divulga fake news desde el así conocido como “Gabinete del Odio”, el cual funcionaría en el Palacio del Planalto.
El clima de tensión política crece conforme se aproxima el 7 de septiembre, Día de la Independencia, cuando Bolsonaro hablará en dos actos: el primero por la mañana en Brasilia y otro por la tarde en la avenida Paulista, la más importante de San Pablo. “Tengan la certeza, como militar juré dar mi vida por mi patria, así como todos ustedes juraron, en su subconsciente, dar la vida por su libertad”, puntualizó ayer el excapitán del Ejército.
Activistas de extrema derecha convocaron a los actos en los que proponen concurrir armados, invadir los palacios del STF y el Congreso y reivindicar la implantación de un gobierno militar con Bolsonaro a la cabeza.
Anteanoche, el presidente defendió la libertad de expresión y vinculó el respeto de la misma a la presencia de policías en las manifestaciones.
El Ministerio Público del Distrito Federal divulgó esta semana una nota que recuerda que la “Constitución veda la participación de policías activos, con uniforme o no, en actos políticos”.
Paralelamente el Ministerio Público de San Pablo solicitó a la Procuraduría de la Policía Militar que adopte medidas punitivas contra los agentes que tomen parte de las manifestaciones.
“Nosotros no precisamos salir de las cuatro líneas de la Constitución, pero si alguien quiere jugar por fuera de las cuatro líneas nosotros demostraremos que podemos hacer valer la voluntad y la fuerza del pueblo”, dijo ayer Bolsonaro.
El mandatario se encontraba junto al pastor evangélico Silas Malafaia, conocido por sus posiciones de extrema derecha, como defender el golpe de Estado y predicar contra el aislamiento social y el cierre de los templos debido a la pandemia del coronavirus.
Ante el cuadro de situación el titular del STF, Luiz Fux, afirmó anteayer que “en un ambiente democrático las manifestaciones públicas son pacíficas” al mismo tiempo que “la libertad de expresión no es compatible con la violencia y las amenazas”. Por otra parte, el presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, se reunió el jueves con gobernadores para evaluar el clima de inestabilidad política e institucional.
Agencia ANSA
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