Arrestaron al exdirector de Abercrombie & Fitch por cargos de tráfico sexual
Michael Jeffries, su pareja y un supuesto intermediario afrontan múltiples acusaciones, entre ellas, por prostitución interestatal
- 5 minutos de lectura'
NUEVA YORK.- El exdirector general de Abercrombie & Fitch, Michael Jeffries, su pareja y otro hombre fueron arrestados por cargos de tráfico sexual y prostitución interestatal, según confirmó este martes un vocero de la fiscalía federal.
La detención se produjo tras años de acusaciones de conducta sexual inapropiada, presentadas en demandas civiles y en los medios de comunicación por parte de jóvenes que afirman que Jeffries los atrajo con promesas de empleos como modelos y después los presionó para realizar actos sexuales.
Brian Bieber, abogado de Jeffries, dijo en un correo electrónico que “respondería con detalles a los alegatos una vez que se retire el sello de la acusación y cuando resulte apropiado, pero aseguró planea hacerlo en el tribunal y no a los medios”.
Jeffries y su pareja, Matthew Smith, fueron arrestados en Florida y se tenía prevista su comparecencia ante un tribunal este martes por la tarde en West Palm Beach. Además, otro de los acusados, James Jacobson, presunto intermediario de la pareja, fue detenido en el estado de Wisconsin.
El fiscal federal con sede en Brooklyn, Breon Peace, y agentes del FBI y de la policía darán una conferencia de prensa esta tarde con más detalles del caso. “Las detenciones de hoy son monumentales para los aspirantes a modelos masculinos que fueron víctimas de estos individuos”, dijo Brittany Henderson, abogada del bufete Edwards Henderson, que representa a las víctimas de los presuntos delitos. ”Su lucha por la justicia no termina aquí. Esperamos poder exigir responsabilidades a Abercrombie & Fitch por facilitar esta terrible conducta y asegurarnos de que esto no pueda volver a ocurrir”, añadió en en comunicado enviado a AFP.
Según la ley estadounidense, el tráfico sexual incluye hacer que un adulto viaje a otro estado o país para tener relaciones sexuales a cambio de dinero mediante el uso de la fuerza, el fraude o la coerción.
Jeffries dejó la empresa Abercrombie & Fitch, con sede en New Albany, Ohio, en 2014 tras recibir 25 millones de dólares de indemnización, según los archivos corporativos.
En una demanda civil presentada el año pasado en Nueva York se acusó a Abercrombie de permitir que el exdirector dirigiera una organización de tráfico sexual durante los 22 años en los que ejerció su función. También la denuncia afirma que Jeffries tenía cazatalentos que exploraban el Internet en busca de víctimas, y que algunos posibles modelos se convirtieron en víctimas de tráfico sexual.
En el documental “The Abercrombie Guys: The Dark Side of Cool”, varios hombres hablaron sobre acuerdos de confidencialidad por eventos sexuales supuestamente dirigidos por Jeffries, frecuentemente en su casa de Nueva York y en hoteles de Londres, París y otras partes.
Cuando se presentó la demanda civil en Nueva York, el abogado de Jeffries declinó hacer comentarios sobre las acusaciones, mientras que la marca dijo que estaba “horrorizada y asqueada” por las acusaciones sobre el comportamiento de Jeffries y que tiene “tolerancia cero con el abuso, el acoso o la discriminación de cualquier tipo”. Después de que la BBC difundiera un informe con acusaciones similares, Abercrombie aseguró haber contratado un estudio de abogados externo para que hacer una investigación independiente.
El escándalo
La investigación de la BBC habla de una red altamente organizada para encontrar hombres jóvenes para los eventos de Jeffries y Smith.
Ocho hombres le dijeron a la BBC que asistieron a estos eventos, algunos de los cuales aseguraron que fueron explotados o abusados. La mitad de los hombres que contaron al medio británico sobre su reclutamiento aseguraron que inicialmente los habían engañado sobre la naturaleza de los eventos o no les habían dicho que involucraban sexo. Otros dijeron que entendían que los eventos serían sexuales, pero no exactamente lo que se esperaba de ellos. Todos recibieron pagos.
Varios declararon a la BBC que el intermediario u otros reclutadores les plantearon la posibilidad de trabajar como modelos para A&F.
La investigación también reveló detalles de la “maquinaria bien engrasada” que, según expresó el medio, organizaba eventos sexuales para Jeffries, en los que:
- Los “reclutadores” encontraban hombres para asistir a sus eventos y recibían entre US$500 y US$1000 de Jacobson por cada recomendación.
- Jacobson, descrito por los hombres como el “intermediario” o “agente de casting”, reclutaba a los hombres para los eventos sexuales. A la BBC le dijeron que Jacobson enviaba fotos de ellos a Jeffries y Smith.
- La mayoría de los hombres alegan que Jacobson les hizo proposiciones o los “audicionó” sexualmente, solicitando u ofreciendo practicar sexo oral antes de presentarles a Jeffries y Smith.
- Había un “barbero” contratado para afeitar el vello corporal íntimo de algunos de los hombres que asistieron a los eventos, una experiencia que algunos describieron como “deshumanizante”.
- Todos los hombres dijeron que se les exigió firmar acuerdos de confidencialidad. Alegaron que tuvieron poco tiempo para leerlos y no se les permitió conservar copias, pero entendieron que serían demandados si hablaban.
- Un pequeño grupo de los empleados de Jeffries, que vestían uniformes de A&F, supervisó a los hombres, incluso durante los actos sexuales, y les entregó dinero.
- Se alega que Jeffries supuestamente financió toda la operación, incluidos los pagos por recomendaciones, mientras que Smith organizó los pagos en efectivo.
Con información de AFP
Más leídas de El Mundo
Nueva fase. El juego político en las potencias mundiales que explica la última escalada en la guerra de Ucrania
Tensión en Ucrania. EE.UU. y países europeos cierran sus embajadas en Kiev ante el riesgo de un “ataque aéreo significativo” de Rusia
Giro en la guerra. El mapa que muestra hasta dónde pueden llegar los misiles de largo alcance lanzados desde Ucrania hacia Rusia
Desregulación y ajuste. El abrupto giro a la derecha de Nueva Zelanda tras tener uno de los gobiernos más progresistas del mundo