A 20 años, el horror no cede en Bhopal
Protestas y reclamos de los sobrevivientes
BHOPAL.- La muerte de miles de personas debido a una fuga de gas tóxico en la fábrica de pesticidas Union Carbide hace 20 años fue conmemorada ayer en Bhopal (centro de India) con procesiones fúnebres, y se espera para hoy una serie de protestas por lo que se considera la peor catástrofe industrial de la historia, más grave aún que el desastre nuclear de Chernobyl.
Víctimas, familiares de víctimas, militantes de India y del extranjero participaron de las conmemoraciones de la tragedia, ocurrida el 3 de diciembre de 1984, entre la 0 y la 0.30, cuando unas 40 toneladas de gas tóxico escaparon de la fábrica y se diseminaron en un radio de 20 kilómetros cuadrados. Cientos de miles de personas despertaron enceguecidas y con problemas para respirar. Por lo menos 3500 personas murieron en los primeros días. En total, 15.000 fallecieron después por haber inhalado el gas. Hasta 800.000 se vieron afectadas, según cifras oficiales, y muchos de los sobrevivientes aún padecen problemas respiratorios, cardíacos, de fatiga y hasta tuberculosis. Amnistía Internacional, por su parte, denunció entre 22.000 y 25.000 muertos.
Si bien hasta ahora nadie ha asumido la responsabilidad, el gobierno indio acordó en 1989 con Union Carbide y sin que mediasen los afectados, una suma de 470 millones de dólares estadounidenses como indemnización. Organizaciones de ayuda y sobrevivientes de la catástrofe critican que la suma fue muy baja. Warren Anderson, por aquel entonces jefe del consorcio químico norteamericano Union Carbide (comprada luego del accidente por Dow Chemical) y principal acusado en India por homicidio, jamás compareció ante la justicia local, a pesar de una orden de arresto lanzada en 1992. Ayer, los manifestantes en Bhopal exigieron la extradición de Anderson, quien se halla en los Estados Unidos.
Las autoridades regionales anunciaron ayer una primera medida destinada a limpiar el lugar de la fábrica donde sigue abandonada una masa de desechos, aproximadamente 25.000 toneladas de material sólido contaminado, según la organización ecologista Greenpeace. El gobierno pidió a una compañía pública, Engineers India Limited, que determine cuántos desechos tóxicos están abandonados en el lugar y cómo desembarazarse de ellos. Las autoridades reconocieron que el agua que las bombas manuales proporcionan a las villas miseria cercanas a la fábrica está contaminada, y las asociaciones que representan a las víctimas pidieron que además de pagar por la limpieza del lugar, Dow Chemical cubriera los gastos médicos de cientos de miles de víctimas que siguen sufriendo.
Por su parte, Greenpeace informó que hoy habrá actos de protesta en Bélgica, Francia, Australia, India, Eslovaquia y China.