Un amigo anónimo
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Una de las consecuencias de la pandemia ha sido la de modificar forzadamente nuestras redes afectivas de contención. Sin abrazos y con menos posibilidades de juntarnos, muchos sufren largamente el impacto de una soledad no elegida o de una convivencia impuesta.
Los amigos son hermanos que se eligen se suele decir. S.O.S. Un Amigo Anónimo es una institución que, desde 1972, brinda desinteresadamente asistencia ante ese vacío existencial que adquiere hoy tan diversas formas. Angustia, depresión, dependencia por adicción son solo algunas de las dolorosas situaciones, entre muchas otras, que llegan anónimamente a la línea de Skype “sosunamigoanonimo”. El servicio escucha y acompaña en la búsqueda de posibles caminos de salida. En 48 años llevan atendidos de forma gratuita y anónima más de 350.000 llamados.
Los voluntarios reciben un curso inicial y una capacitación continua y supervisada por profesionales para asegurar la mayor calidad de atención. Precisamente en esta época, en el sitio web se abren las inscripciones, con vacantes limitadas, para evaluar postulantes de entre 28 y 65 años.
Tenemos dos orejas, pero no siempre estamos dispuestos a poner nuestra escucha al servicio de la necesidad del otro. Las dificultades que la realidad nos plantea demandan creatividad y nuevos apoyos. Iniciativas como esta que comentamos deben ser celebradas.
LA NACION