Pedagogía en la era digital
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Una encuesta del Observatorio Hacer Educación (UBA) hizo foco en la población en general y en la comunidad educativa, a través de 405 docentes, para conocer sus percepciones en la era digital. Entre otras cuestiones, ambos expresaron su convicción sobre la necesidad de que la tecnología adquiera mayor protagonismo, pero señalaron que son contrarios a los celulares en las aulas y al aprendizaje por medio de redes sociales.
Con aplicaciones diseñadas precisamente para capturar nuestro interés, al punto de generar comportamientos adictivos, una sola notificación recibida implica que el alumno se desconcentre y lo obliga luego a retomar la atención. Involucrar a los jóvenes en propuestas estimulantes parece ser el desafío, enseñándoles también a reconocer los riesgos que conllevan las pantallas, pero contribuyendo a que construyan inteligentemente también su ciudadanía digital.
A partir de trabajos científicos internacionales que consideraron resultados de las pruebas PISA, la Unesco presentó en Montevideo, ante 18 ministros de Educación del mundo, un informe titulado “La tecnología en la educación: ¿una herramienta según los términos de quién?”. A pesar de que las evidencias y los datos son claros y confirman que los celulares reducen los resultados escolares positivos, destacaron que menos de una cuarta parte de los países ha prohibido su uso, tal como se recomienda cuando interfieren con los aprendizajes y no contribuyen a un objetivo educativo específico.
El informe realiza asimismo un “llamamiento urgente” para que se haga un uso adecuado de la Inteligencia Artificial (IA). Unos pocos países han desarrollado ya currículas sobre esta delicada materia. Promueven desarrollar habilidades críticas para que los jóvenes aprendan a discernir entre información real y falsa, alertando también sobre la privacidad de los datos, el ciberacoso y el impacto emocional del uso prolongado de dispositivos.
El desafío es equilibrar la utilización de tecnología y libros en las escuelas, alejándose de decisiones de corte político para resolver según cánones pedagógicos. No es cuestión de soportes, sino de propuestas didácticas. Estamos ante un escenario complejo con muchos vectores al que debemos dedicarle máxima atención. No hay futuro sin educación.