El próximo capítulo
Otras opiniones. El Nacional/Venezuela
CARACAS.- "Intimidar a la población con secuestros, asesinatos, sicariatos, sabotajes a empresas estratégicas, acciones de carácter terrorista que permitirían pasar a una fase insurgente con operaciones en el oriente, centro, occidente y en la franja fronteriza del país". Esos eran los objetivos de la Operación Boicot que supuestamente se planeó en Colombia con la participación de Leopoldo López. O al menos así reseña Telesur las palabras de la ministra de Interior del régimen.
Si se lee detenidamente, pareciera que se estuvieran acusando ellos mismos, porque todos saben que son los autores por omisión de todo lo que aterroriza al venezolano desde hace años. Por eso es que la denuncia de la ministra más bien pasa a formar parte de los capítulos noveleros que escriben los guionistas cubanos o hasta los rusos, que le ganan a cualquier teleculebra.
Un país que arde por los cuatro costados, en el que la gente sale diariamente a reclamar luz, gas, agua o comida no es estable. Venezuela no puede estar en paz cuando va a la deriva en todos los aspectos. La tranquilidad que ellos quieren preservar es la propia, la que les permite vivir como si fueran jeques en una nación que se cae a pedazos.