Crisis en Ecuador
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En una escalada de la pelea con el mandatario Daniel Noboa, la vicepresidenta de Ecuador, Verónica Abad, fue suspendida del cargo por 150 días. Está acusada por la Cancillería ante el Ministerio de Trabajo de no haber cumplido la orden de trasladarse el 1° de septiembre pasado desde Israel –donde se desempeñaba como embajadora designada por el presidente– hacia Turquía, debido al conflicto bélico en Oriente Medio. Abad llegó a Ankara ocho días más tarde.
Por su parte, la funcionaria sancionada acusó a Noboa de acoso político y hostigamiento para forzarla a dimitir y evitar así delegarle temporalmente las funciones presidenciales que la Constitución ecuatoriana contempla para cuando el presidente deba obligatoriamente pedir licencia para la campaña electoral, 45 días antes de los comicios. Para las elecciones del 9 de febrero próximo, Noboa inscribió su candidatura con otra compañera de fórmula, María José Pinto, titular de la Secretaría Técnica Ecuador Crece Sin Desnutrición Infantil.
Tras la suspensión, el presidente nombró a Sariha Moya, secretaria de Planificación, como vicepresidenta encargada. Aun cuando la Constitución de Ecuador menciona que debe haber solo una, se da la paradoja de que haya dos: una vicepresidenta encargada y una vicepresidenta elegida en las urnas suspendida.
Abad calificó como “electoralista” la medida y afirmó que el proceso administrativo en su contra “no es aplicable a funcionarios elegidos en las urnas” por lo que pidió la intervención de las autoridades de control del país andino.
Paralelamente, el Tribunal Contencioso Electoral (TCE) inhabilitó el pasado 10 de noviembre la candidatura presidencial de Jan Topic, basándose en una dudosa interpretación del Código de la Democracia. La resolución aprobada por cuatro de cinco jueces electorales señaló que la candidatura del economista de 41 años no puede ser aceptada por no haberse desvinculado adecuadamente de empresas que mantienen contratos con el Estado y en las que seguiría siendo beneficiario.
Tapic, empresario de Guayaquil, cuarto en la contienda pasada y quien cuestionó la gestión de Noboa al considerar que incurrió en una prohibición constitucional y legal, negó cualquier vínculo contractual con instituciones públicas. Las reacciones internacionales no se hicieron esperar. El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, expresó que la inhabilitación de la candidatura de Topic constituiría un fuerte golpe a la integridad del presente proceso electoral y un serio revés a la democracia ecuatoriana.
Un total de 16 candidatos podrían buscar la presidencia de Ecuador en 2025. Las encuestas apuntan a que se repetirá el balotaje de 2023, cuando el actual mandatario disputó la presidencia con la candidata Luisa González, de la Revolución Ciudadana (RC), partido que lidera el expresidente y prófugo de la Justicia ecuatoriana, Rafael Correa.
La utilización de las instituciones para fines personales y la ruptura del orden constitucional son viles prácticas que deben combatirse. La suspensión de la vicepresidenta Abad a través de un sumario administrativo, dejando de lado los mecanismos previstos en la Constitución, y la dudosa descalificación de la candidatura de Topic constituyen actos que podrían debilitar la integridad democrática del Ecuador. El respeto a la Constitución debe guiar cualquier proceso; está visto ya el enorme peligro que encierra apartarse de ella.
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