Abandono escolar: crear conciencia
Evitar una pandemia educativa y revincular a niños y adolescentes con la escuela es el objetivo de una nueva red de organizaciones de la sociedad civil
Sostener la escolaridad en tiempos de pandemia presenta un desafío absolutamente insuperable para muchos. Las nuevas condiciones se suman a problemas estructurales y conducen por sí al abandono escolar. Más de 10 millones de niños y jóvenes dejaron de asistir a clases presenciales en la Argentina según reportes de las Naciones Unidas, que estiman que el 18% de los adolescentes de entre 13 y 17 años carecen de internet hogareña y el 37% no tienen los indispensables dispositivos que sostienen la enseñanza virtual. El 18,5% de la población rural nunca asistió a una escuela y menos del 50% de los alumnos de esos ámbitos terminan el secundario. Los indicadores empeorarán en el escenario poscuarentena, al tiempo que, según Unicef, 6 de cada 10 niños y adolescentes serán pobres para entonces.
Un informe difundido por la Fundación Voz estimó que el abandono escolar poscuarentena se ubicará entre el 25% y el 45%.
Desde la Asociación Civil Crecer en Red (CER), se advierte que 9 de cada 10 chicos necesitan del acompañamiento de un adulto para realizar sus actividades escolares, situación que se complejiza en contextos en los que existen exceso de tareas o trabajo por parte de los adultos y muchas veces no se cuenta con los conocimientos o las habilidades para transmitirlos.
"La decisión de dejar la escuela no es de los chicos", advierte un colectivo impulsado desde CER, que nuclea a más de 50 instituciones que se han propuesto compartir y visibilizar experiencias ligadas a la realidad educativa, generando estrategias de acompañamiento a los estudiantes. Cimientos, Reciduca , Asociación Conciencia, Fundación Grano de Mostaza, Fundación Varkey, Uniendo Caminos, Puentes, Fundación TEA, Minkai, Fundación Germinare, Universidad de San Andrés, Foro Diplomático en Mendoza, Mujeres 2000, Una sola Familia, Argentina Cibersegura, Fundación River Plate, Fundación Franciscana, ACDI, Fundación Ruta 40, Fundación FEPAIS, FONBEC, RACI, Primero educación ,GDFE, Luz Libre, Argentinos por la Educación, Colegio Madre Teresa, Educere, Liga Solidaria, Monte Adentro, Fundación Nordelta, Fundación Noble, Bis Blick, Fundación León, Fundación Carlos Diaz Vélez, Brazos Abiertos, Fundación Créscere, América Solidaria, Fundación Evolución, Unesco, la Ciencia y la Cultura, Fundación Misión Marianista, Zero Fronteras, Junior Achievement, Enseñá por Argentina, Fundación Integrar ,Educar y Crecer, Cefil, Fundación Pescar, Comisión Pastoral Social de la Diócesis de San Rafael, Fundación El Potrero, Anpuy y Fundación La Nación hacen así un dramático llamado a toda la sociedad ante lo que definen como una "emergencia impostergable" y convocan a la ciudadanía a sumarse como voluntarios o aportando recursos.
La situación general se asimilará a la de una posguerra en opinión de muchos. Mariano Narodowski habla de la "pedagogía del contraaislamiento". Habrá que salir a buscar a todos los alumnos que se desconectaron por pandemia y retomar con ellos la importancia de lo presencial. Asistiremos a un momento bisagra, con aulas que propondrán "un lugar de encuentro" en el que los vínculos confirmarán ser tanto o más importantes que la misma transmisión de saberes. El desafío de reducir los índices de deserción conduce a lograr que asistir a una escuela tenga sentido. Está claro para todos que los fracasos escolares no son de los chicos y las chicas, sino del sistema que los excluye de la posibilidad de que sostengan sus trayectorias educativas.
"No podemos perder miles de jóvenes y sufrir una ‘ pandemia educativa’ despiadada", advierte Alberto Croce, director de la Fundación Voz, consciente de las enormes brechas educacionales que afectan a los más vulnerables.
Además de un ámbito de aprendizajes, la escuela es un espacio de sociabilización, contención, acompañamiento, creación de vínculos y de construcción de habilidades para la vida. Por eso es necesario actuar con rapidez. Las organizaciones que forman parte de Crecer en Red y muchísimas otras a lo largo y ancho de Argentina se encuentran acompañando a miles de jóvenes para que el sistema educativo no los abandone, por eso están compartiendo experiencias y recopilando buenas prácticas para ponerlas a disposición de quien las necesite para actuar. Este momento nos llama a ser empáticos, a tender redes, a construir a partir de las diferencias, con creatividad en la búsqueda de soluciones colaborativas y plurales, porque lo que está en juego es el presente y el futuro de los chicos y de nuestro país.
Los efectos de esta otra amenaza pueden ser devastadores. De todos los problemas que hemos de enfrentar, no hay duda de que educar a nuestros jóvenes continúa siendo uno de los nudos gordianos que demandan tejer acuerdos y establecer consensos políticos y sociales fuertes, dados sus efectos en el mediano y largo plazo. Celebramos todo lo que pueda sumar en esa dirección.