Wall Street ve un "pecado original" en el cambio de metas
WASHINGTON.- Wall Street leyó los últimos movimientos del Banco Central para atar el tipo de cambio como una consecuencia -inevitable y a la vez riesgosa- de lo que aquí llaman "el pecado original" de Federico Sturzenegger : el cambio de metas de inflación del 28 de diciembre pasado.
"Las metas no se cambian", solía decir el presidente del Banco Central . Fue un mensaje que Sturzenegger brindó varias veces durante el año anterior. Pero luego, en diciembre, se sumó al anuncio de la suba de la meta del 10 al 15% para este año. Ese giro, sumado a la rigidez para elevar la tasa de interés -que impone la Casa Rosada, interpretan algunos aquí-, terminó por llevar a otro cambio en la política monetaria: el Central empezó a jugar fuerte en el mercado cambiario, un plan alternativo para contener la inflación, alejado de la ortodoxia original.
Eso terminó en una venta récord de reservas en los últimos dos días, provocada por una "tormenta perfecta" creada entre el contexto internacional, que jugó en contra, y la implementación del impuesto a los extranjeros por tenencia de Lebac, que los llevó a desarmar posiciones en pesos.
Así y todo, la lectura aquí es unívoca: el pecado original fue el cambio de metas. "El mercado se siente defraudado y desconcertado y es una combinación terrible", dijo una fuente de un fondo de inversión. "El Central perdió la manija y la credibilidad cuando cambiaron las metas. Las metas no se cambian, por más que no se cumplan", agregó el ejecutivo.
Otra fuente de un banco de inversión también coincidió en que el giro golpeó la credibilidad de la autoridad monetaria, a lo que luego se sumaron el recorte en la tasa de interés y las intervenciones para controlar las expectativas de inflación.
"El pecado original es el 28 de diciembre", resumió la fuente. "Aumentó la incertidumbre respecto de qué es lo que está haciendo el Central. Está mucho menos claro. Antes eran mucho más consistentes; y eso se cayó, y empezaron a hacer cosas que decían que no iban a hacer nunca", agregó.
El cambio de escenario dejó, ahora, dos dudas. Una es qué grado de autonomía real tiene Sturzenegger para fijar la política monetaria y cuál es el margen de maniobra, por ejemplo, para volver a subir la tasa de interés en las próximas semanas o meses.
La segunda incógnita es que nadie sabe a ciencia cierta qué hará el Central de ahora en más. El "poder de fuego" para anclar el dólar con las reservas es limitado, un cepo que le pone un límite a la estrategia de contener las expectativas a través del tipo de cambio. Ante esa realidad, el BCRA puede subir la tasa de interés o dejar que el dólar "se vaya", tal como hizo ayer. El riesgo, advierten los analistas, es que se vaya demasiado.
Otras noticias de Federico Sturzenegger
- 1
Giorgia Meloni, el Papa Francisco, un gobernador peronista y un “ídolo” libertario: el podio de quienes le hicieron regalos a Javier Milei
- 2
El Gobierno oficializó la poda a la obra pública y el Tesoro le pidió a la Secretaría que devuelva 1 billón de pesos
- 3
Se vende: un fiscal detectó irregularidades en la inminente subasta de un edificio del INTA y pide evitar “posibles hechos de corrupción administrativa”
- 4
Por qué el Gobierno no salió aún del cepo y la “prueba de fuego” que deberá afrontar en 2025, según Martín Redrado