Volkswagen amplía su ventaja en Europa
El tabacalero italiano Giuseppe Surce tomó una decisión arriesgada hace unos meses que muchos europeos están postergando: la compra de un auto nuevo.
En busca de un vehículo pequeño que ahorrara combustible, Surce evaluó modelos como el Fiat 500. Al final, optó por un Volkswagen.
¿El motivo? La tasa de interés de 6% que ofrecía Fiat SpA era inalcanzable para su presupuesto. VW, por otro lado, le otorgó un préstamo sin intereses por un modelo Up de precio comparable y con más funciones, como un navegador con GPS. "Me gustó la financiación del Up, así que lo compré", cuenta Surce, que vive cerca de Florencia. "El 500 costaba más y valía menos."
Mientras el derrumbe de las ventas de autos en Europa causa estragos en fabricantes como Fiat, Opel, la filial europea de General Motors Co., y PSA Peugeot Citröen SA, VW está aprovechando la crisis económica de la región para ganar participación de mercado. Su arma inesperada son los préstamos baratos, alimentados por el abismo que separa a una economía alemana que sigue siendo robusta y financieramente sólida y sus atribulados vecinos del sur de Europa.
La financiación barata de la compra de autos, que ha ayudado a aumentar la cuota de mercado de VW en Europa Occidental desde 20% cuando irrumpió la crisis de la deuda hace tres años a casi 25%, demuestra cómo la crisis está reconfigurando el mapa de negocios del continente. Los costos de financiación de VW se han reducido a un tercio de los de rivales como Fiat y Peugeot en las ventas de bonos más recientes.
La brecha ilustra cómo el sistema financiero de la zona euro se está fragmentando por líneas nacionales: lo opuesto de lo que la moneda única debía lograr. Eso dificulta aún más que las economías del sur de Europa se recuperen e impulsen su competitividad frente a las del norte.
VW le debe su buen momento en parte a una acumulación de efectivo de 9.200 millones de euros (US$12.000 millones) y ventas sólidas en mercados de exportación dinámicos como China. Pero una de sus mayores ventajas es su domicilio: Alemania.
Los costos de financiación de las empresas alemanas de primera línea están en concordancia con las tasas que paga el gobierno, que han disminuido ya que los inversionistas se refugian en la deuda del país, que consideran segura. "Volkswagen se ha convertido en un refugio", reconoce su director de finanzas, Hans Dieter Pötsch.
No es un caso aislado. Siemens AG, con sede en Múnich, se endeudó en agosto a la tasa de interés más baja en el mercado de bonos europeo, incluso por debajo del nivel al que se cotizaban en ese momento los bonos del gobierno francés, con calificación AAA.
En promedio, empresas alemanas como BASF AG, Linde AG y MAN SE, la filial de camiones de Volkswagen, han pagado tasas de alrededor de 1,9 puntos por encima de la tasa de referencia basada en los intereses del Banco Central Europeo, según la investigadora de datos Dealogic. Las compañías italianas tuvieron que pagar 4,2 puntos y las españolas 4,65 puntos por encima de la tasa de referencia.
Un reciente informe del BCE sugirió que la predisposición del banco central a comprar los bonos de países con problemas aún no repercute en la fragmentación de los mercados financieros de la zona euro. El documento mostró que las empresas españolas e italianas siguen pagando tasas mucho más altas por préstamos que sus pares alemanas.
En pocas industrias es tan grande la brecha como en la automotriz, donde los fabricantes se endeudan tanto para financiar sus inversiones (y refinanciar deuda) como para prestarles a sus clientes.
Uno de los damnificados es Peugeot, la segunda automotriz europea detrás de VW. Cuando sus ventas fueron afectadas por el derrumbe de mercados como Francia, España e Italia, Peugeot sufrió una serie de rebajas de crédito. La más reciente, por parte de Moody’s Investors Service en octubre, dejó la calificación de Peugeot seis escalones por debajo de la de VW y amenazó con llevar la unidad bancaria de la compañía a territorio "chatarra". Eso obligó al gobierno francés a lanzarle un salvavidas de 7.000 millones de euros en garantías de préstamos a Banque PSA Finance.
VW, cuyas marcas van desde Audi a Skoda y Porsche, no ha sido inmune al bajón europeo. La empresa anunció el martes una caída de 6% en las ventas de los autos con la marca Volkswagen en Europa Occidental, excluyendo Alemania, entre enero y octubre. De todos modos, con la ayuda de los créditos baratos, la automotriz está cortejando a muchos compradores de sus competidores, que en la mayoría de los casos sufrieron caídas de dos dígitos en sus ventas en Europa este año.
Un rápido viaje por París en busca de un auto económico sirve de ilustración. VW ofrecía una tasa de 1,9% para financiar la compra de sus modelos Up y Polo. Las ofertas de Renault SA, Ford Motor Co. y Fiat oscilaban entre 5,9% y 6,7% por modelos similares. La tasa de Peugeot era de 11,6%.
"¿Nuestros servicios financieros son una ventaja? Sí, y la estamos usando", afirmó el jefe de ventas de VW, Christian Klingler.