Usarán parte de los encajes para fomentar nuevas líneas de crédito
Lo sugirió Marcó del Pont al explicar la reforma a la Carta Orgánica del BCRA ante Adeba
El Banco Central (BCRA) planea usar parte de los 20.000 millones de pesos que la reciente reforma a su Carta Orgánica le habilita a recibir de los bancos -en concepto de reservas (encajes) por los depósitos que reciben del público- para generar una nueva oferta de crédito blando para la inversión al estilo de la aún vigente "Línea del Bicentenario" pero especialmente dirigida a pequeñas o medianas empresas (pymes).
A esa conclusión llegaron, según pudo reconstruir La Nacion tras múltiples consultas, varios de los participantes del almuerzo que ayer sostuvieron la presidenta de esa entidad, Mercedes Marcó del Pont, con los banqueros privados de capital nacional agrupados en Adeba y comandados por el presidente y dueño del Banco Macro, Jorge Brito.
En el encuentro, planeado para que la funcionaria evacue dudas sobre los alcances de la reforma y explique cómo funcionarán los nuevos mecanismos de "redireccionamiento del crédito" (y que se repetirá en pocos días con otras asociaciones) Marcó del Pont no planteó el surgimiento de la nueva línea como algo definido.
Pero se mantuvo inflexible en que buena parte del dinero que hoy los bancos tienen en caja o en tránsito (y están facultados para computar como encajes gracias a una reciente prórroga normativa dispuesta por la circular "A" 5299) deberá ser transferido a las respectivas cuentas que cada uno de ellos mantiene en el BCRA. Y luego sugirió que, en todo caso, los bancos podrán volver disponer de ese dinero si se avienen a prestarlo en los términos y a los sectores que desde el BCRA se definan como "elegibles".
Esa definición surgió luego de un cruce de opiniones sobre la asistencia crediticia de los bancos a las pymes y luego de que los banqueros le advirtieran que si se aplica el artículo 13 de la ley 26.739 de reforma a la carta orgánica (que modifica el artículo 28 de la anterior) muchas entidades enfrentarán dificultades operativas para atender al público o pagos a jubilados y deberán trasladar el golpe a su disponibilidad de liquidez al costo del dinero (tasas). "La integración de los requisitos de reservas no podrá constituirse sino en depósitos a la vista en el BCRA, en moneda nacional o en cuenta de divisas, según se trate de pasivos de las entidades denominados en moneda nacional o extranjera", establece el artículo en cuestión. "Es una medida que no nos ayudaría a financiar más a las pymes como nos piden", apuntó uno de los anfitriones.
Fue entonces cuando Marcó del Pont adelantó que las nuevas normas de encajes contemplarán la situación de los bancos sucursaleros o especializados en pagos de jubilaciones o planes sociales mediante la puesta en marcha de encajes diferenciales cuya aplicación se hará de manera progresiva, para evitar sobresaltos.
Agregó además que tendrán en cuenta criterios regionales siendo más laxas para las sucursales bancarias más alejadas de los tesoros centrales o regionales de cada entidad. Y sugirió que ese dinero no quedaría necesariamente inmovilizado.
El mecanismo sugerido está en línea con el declamado objetivo oficial de reorientar la oferta de crédito hacia la producción. Pero anoche, desde el BCRA, relativizaban la definición aunque no la desmentían.
"Fue una reunión de trabajo en la que no hubo precisiones al respecto", se limitaron a explicar.
Los dólares, otro tema
Los banqueros consultaron además por los encajes aplicados a los depósitos en dólares dado que el artículo de la reforma ya rige para estas colocaciones y le restó al sistema el manejo de unos US$ 700 millones desde comienzos de mes que pasaron a engrosar las reservas del BCRA.
La preocupación que mostraron al respecto tiene motivos: en el último mes el sistema perdió otros US$ 100 millones de depósitos privados. Pero Marcó del Pont buscó tranquilizarlos: "Los números de abril al respecto son buenos", dijo lacónicamente.
En el comunicado mediante el que Adeba y el BCRA dieron cuenta del encuentro se destacó la conformación de tres grupos de trabajo conjunto para intercambiar ideas sobre cómo impulsar el crédito a pymes, aspectos regulatorios y mecanismos que estimulen la bancarización.
MASIVAS COMPRAS OFICIALES DE DÓLARES
El BCRA compró ayer, por segundo día consecutivo, una suma cercana a los US$ 200 millones en el mercado de cambios para apuntalar sus reservas, en momentos en que debe definir el nivel óptimo de esa tenencia para liberar los dólares que el Gobierno necesita para cumplir con los pagos de la deuda. La masiva intervención, que impulsó al alza al tipo de cambio (llegó a $ 4,39 el mayorista y a $ 4,41 el minorista) llega en momentos en que la oferta de divisas se incrementó por las liquidaciones sojeras y la demanda privada se mantiene reprimida por las restricciones oficiales que impiden el acceso al mercado cambiario a miles de particulares y empresas.