Uno de los motores de Wall Street pierde fuerza
¿Se acabó la época dorada del corretaje de valores que impulsó las ganancias del sector?
El auge del corretaje de valores que transformó a los bancos de inversión globales en los últimos 10 años se está desvaneciendo, lo que genera temores sobre el futuro de uno de los principales motores de ganancias de Wall Street.
Los propios bancos de inversión han señalado que sus negocios de renta fija, materias primas y corretaje de divisas podrían sufrir declives en el cuarto trimestre frente al mismo período de 2012. Se trataría de la cuarta caída consecutiva y la decimoprimera de los últimos 16 trimestres. Las firmas de valores empezarán a divulgar sus resultados del último trimestre de 2013 la próxima semana.
Muy pocos rincones de las operaciones de corretaje de valores de los bancos han eludido el bajón. Un auge de 10 años en los precios de los commodities ha perdido fuerza, mientras que las negociaciones de divisas extranjeras han descendido pronunciadamente desde su máximo en 2008. Desde la crisis, los inversionistas se han alejado de los instrumentos de renta fija más exóticos y han optado por la seguridad que ofrecen los bonos soberanos, que son menos rentables para los bancos. Los volúmenes de transacciones también han bajado.
No es lo único. Una serie de nuevas regulaciones han hecho que las firmas de Wall Street se retiren de segmentos que alguna vez les fueron muy lucrativos, como el corretaje de energía y el almacenamiento y transporte de materias primas. La caída se ha prolongado por tanto tiempo que algunos se preguntan si se trata de un descenso normal en el ciclo de negocios o de un cambio permanente.
"Creo que es preocupante", señala Chris Kotowski, analista de Oppenheimer, quien preveía que para estas fechas los volúmenes de transacciones ya hubiesen tocado fondo y se hubiesen estabilizado. "No se puede revertir una tendencia fundamental (...) si de eso estamos hablando".
En el caso de Goldman Sachs Group Inc., las negociaciones de renta fija, divisas y bienes básicos han sido tradicionalmente uno de los grandes motores de sus utilidades. Aun así, el analista de Citigroup Inc. Keith Horowitz prevé que el banco de inversión de Nueva York anuncie una caída interanual de 21% en sus ingresos por el corretaje de estas tres clases de activos en el cuarto trimestre. Goldman Sachs se encamina a registrar su peor año en las transacciones de estos valores desde la crisis.
Mientras tanto, se espera que Morgan Stanley divulgue un alza interanual de 8% en el corretaje de renta fija, divisas y commodities en el cuarto trimestre, según cálculos de Horowitz. La firma, sin embargo, ha reducido estas operaciones de forma considerable desde la crisis financiera y en la actualidad su negocio es más pequeño que el de Goldman.
Grandes bancos comerciales como J.P. Morgan Chase & Co. y Citigroup también tienen esta clase de operaciones, aunque representan una parte más reducida de sus ingresos totales.
En general, se prevé que los ingresos por corretaje de bonos, divisas y commodities caigan a un promedio de aproximadamente 11% en Goldman Sachs, J.P. Morgan y Bank of America Corp., según las previsiones de Horowitz.
Las caídas causaron olas de despidos y partidas. En el primer semestre de 2013, había 19.554 corredores de renta fija, divisas y materias primas en los 10 mayores bancos de inversión globales, frente a 25.257 en el mismo lapso de 2008, según la firma de datos londinense Coalition, cuya casa matriz pertenece mayoritariamente a McGraw Hill Financial Inc.
Deutsche Bank AG indicó el mes pasado que vendería o cerraría casi todos sus negocios globales de commodities, lo que provocaría unos 200 despidos. UBS AG despidió algunos corredores durante el último año, como parte de lo que el banco llama un cambio hacia un mayor enfoque en la gestión de patrimonio de sus clientes.
Algunos de los operadores que permanecen en el sector se preparan para reducciones en su remuneración de fin de año, incluidas bonificaciones.
El auge del corretaje se inició a comienzos de los años 80, cuando los bonos, tras una década de debilidad, se embarcaron en una racha alcista que duró más de 30 años. El surgimiento de los derivados —instrumentos ligados al valor de bonos, monedas, bienes básicos, acciones y otros activos— ayudó a impulsar más la actividad. A principios de la década de 2000, las bajas tasas de interés y la sólida demanda de valores hipotecarios propulsaron el auge, y Wall Street reorientó sus operaciones para sacar provecho.
Aunque la crisis financiera frenó temporalmente el corretaje en 2008, la actividad resurgió con fuerza al año siguiente. Desde 2009, sin embargo, el corretaje comenzó a declinar lentamente, y los banqueros se preguntan si la época dorada se acabó para siempre.
Sin dudas, la caída podría revertirse. No se prevé que los descensos en los ingresos sean tan marcados en el cuarto trimestre como lo fueron en el tercero, cuando Goldman reportó una caída interanual de 44% en ingresos de renta fija, monedas y materias primas, y Morgan Stanley registró un descenso de 43%, excluyendo ajustes contables relacionados a los precios de su deuda. Citigroup y J.P. Morgan divulgaron caídas de 26% y 8%, respectivamente. Horowitz prevé que J.P. Morgan reporte una caída de 8% y Bank of America de 3%.
Analistas señalan que podría haber mejoras a corto plazo, conforme la Reserva Federal de Estados Unidos comienza a desactivar sus políticas de estímulo. No obstante, una recuperación sólida parece aún lejana.
"En general, diríamos que (la situación) luce ligeramente más débil y más estancada de lo que hubiéramos pensando hace un par de meses. Pero, por otro lado, está estable, y la estabilidad tiene mucho peso en un grupo que hizo añicos la confianza de los inversionistas con sorpresas negativas", afirma Kotowski, de Oppenheimer.
—Justin Baer, Ira Iosebashvili, Christian Berthelsen y Katy Burne contribuyeron a este artículo.
The Wall Street Journal