Un bache en el recorrido alcista de los commodities
Al comenzar 2010, los inversionistas anticipaban un recorrido ascendente despejado en los precios de muchas materias primas. En su lugar, se toparon con un bache en el camino.
La sorpresa es que los factores que en los cálculos de los inversionistas, iban a impulsar a los mercados los han frenado. China y otros mercados emergentes han crecido a un ritmo acelerado y ahora están pisando el freno. Y aunque el dinero ha seguido entrando, últimamente ha sido veleidoso.
El giro inesperado ha desconcertado a los operadores. El Índice Dow Jones-UBS de Materias Primas ha caído 6,6% en 2010. El petróleo ha descendido 7,2% este año y el cobre 7,1% . El maíz, por su parte, ha retrocedido casi 13% tras sufrir un fuerte revés cuando el gobierno estadounidense informó que los agricultores habían producido cientos de millones de bushels más de los previstos por los analistas.
"Ha tomado a mucha gente por sorpresa", afirma Matthew Maloney, operador de maíz de R.J. O´Brien & Associates, quien calificó a la reacción del mercado al informe sobre las cosechas de "uno de los cambios de fortuna más drásticos" que ha visto en sus 19 años en el piso de negociaciones.
La reciente caída no significa que los precios de las materias primas no seguirán subiendo en los próximos años. Los crecientes estándares de vida en China, India y otros países irán probablemente acompañados de una mayor demanda de viviendas, automóviles, productos electrónicos y otros bienes que usan energía y otros commodities, dicen los analistas.
Los precios del crudo, el cobre y el aluminio aún están muy por debajo de sus máximos previos a la crisis, aunque generalmente se encuentran por encima de los niveles de hace cinco años, gracias en parte al crecimiento en los países emergentes.
Bob Takai, director general de servicios financieros de Sumitomo Corp., recalca que la cantidad de dinero invertido en commodities ha aumentado considerablemente en la última década y probablemente seguirá subiendo.
Pero a medida que los inversionistas, en lugar de los productores y usuarios de materias primas, pasan a ser una parte cada vez más importante del mercado, también se convierten en una nueva fuente de volatilidad, afirman operadores. Ahora, los operadores tienen que estimar cuál será el impacto de los inversionistas en el mercado, algo difícil de evaluar.
Un signo de un giro en el mercado es que el número de los llamados contratos abiertos para comprar cobre ha declinado mas de 7% desde finales del año pasado, según la Comisión de Negociación de Futuros (FTC).
Un motivo que explica el reciente descenso en los precios es que fue tanto lo que subieron que los productores invirtieron para expandir el suministro.
Barclays estima que 387 firmas de energía gastaron unos US$395.000 millones en exploración y producción en 2009, frente a US$167.000 millones de 327 compañías en 2004. Estas inversiones podrían comenzar a mostrar resultados en los próximos años en forma de un mayor suministro, algo en lo que están comenzado a fijarse los inversionistas.
El reemplazo de las reservas existentes, sin embargo, no es tarea fácil y la oferta de materias primas como el cobre o el zinc parece limitada. "Hay muy pocos proyectos importantes", señala Bart Melek, estratega de commodities de BMO Capital Markets.
Pero incluso en el caso del crudo, que a menudo lleva a los escépticos a poner en duda la capacidad de las empresas perforadoras de hacer frente a la demanda, en los últimos años ha habido importantes descubrimientos, incluyendo en el Golfo de México y mar adentro en Brasil. Y el 22 de enero, el Servicio Geológico de Estados Unidos dijo que la Faja del Orinoco en Venezuela cuenta con mayores reservas de petróleo de las esperadas.
Mientras tanto, en los últimos años, varios países de la ex Unión Soviética han aumentado su producción de trigo, afirma Daniel Basse, presidente de AgResource Co. Basse añade que hay decenas de millones de hectáreas en la región que podrían volver a usarse. "Los altos precios de hace un año todavía están surtiendo efecto", dice. "El mercado hace su trabajo".
Algunos inversionistas señalan que, al igual que la demanda de varias materias primas debería crecer a medida que las economías emergentes se expanden en los próximos años, también podría ocurrir lo mismo con la oferta.