Templeton, uno de los fondos de inversión más grandes de Wall Street, desembarca en la Argentina
Uno de los fondos de inversión más importantes de Wall Street, Franklin Templeton, comenzará a operar desde hoy en la Argentina con fondos en moneda local y en dólares.
Se trata del primer fondo internacional que concreta su llegada para operar en el país desde la salida del default, en 2016, aunque otras grandes firmas europeas y norteamericanas han declarado que pretenden seguir el mismo camino.
Templeton, que administra activos por US$ 770.000 millones, se asoció con la casa de inversión local SBS para lanzar tres fondos: uno de deuda argentina en moneda local, otro de deuda en dólares y otro de deuda latinoamericana.
El director y socio de SBS, Gustavo Cañonero, dijo que el objetivo preliminar es que los tres fondos que manejarán en conjunto lleguen a administrar unos US$ 1000 millones. Por ahora, se focalizarán en el negocio de los bonos, ya que no ven "profundidad" en el mercado accionario argentino.
El año pasado, Hasenstab dijo que “el futuro de la Argentina luce brillante, aunque llegar a este camino requirió un largo y doloroso costo socioeconómico”. Incluso indicó que “Estados Unidos puede elegir seguir el camino de fallido populismo de la Argentina del pasado o se puede utilizar su experiencia como una bola de cristal y evitar las consecuencias negativas de políticas económicas populistas”.
En tanto, Cañonero dijo que, aunque las tasas de interés internacional empiecen a subir, la Argentina ofrece “buenas oportunidades de inversión”. Y expresó: “Por más ruidos que haya, hay que reconocer que en los últimos dos años el Gobierno avanzó para normalizar la economía. Es un camino gradual y lento, pero eventualmente podrá ofrecer mejores posibilidades de inversión”.
En particular, dijo que resulta interesante apostar a los bonos en pesos “en un contexto en el que las tasas de interés seguirán siendo altas mientras se lucha con la inflación”.
Sin embargo, Cañonero dijo que existe cierta preocupación por el aumento de la deuda argentina. “La preocupación está, porque el gradualismo es un foco de fragilidad y expone al Gobierno a una alta dependencia del mercado internacional. Pero si sigue consiguiendo bajar el déficit fiscal, esa vulnerabilidad irá disminuyendo”, concluyó.