Se agranda la orquesta del Corcho
Intimidades de la economía y los negocios
Puede que el ministro de Economía, Axel Kicillof, tenga fama de niño rebelde. Pero desde el Gobierno no parecerían dispuestos a habilitarle que se aleje demasiado del libreto. De hecho, el jueves pasado, en su primera conferencia de prensa, llamó la atención que fuera el vocero presidencial, Alfredo "Corcho" Scoccimarro, el encargado de seguir de cerca todo su intercambio con los periodistas. Incluso fue el responsable de dar por finalizada la conferencia, justo cuando el irascible ministro comenzaba a reaccionar ante las insistentes interpelaciones de los presentes.
Una interna que ya tiene ganador
Previo a los cambios en el gabinete, la mesa de dinero del Banco Central (BCRA) estaba fuertemente dividida entre los operadores que respondían al renunciado secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, y los que seguían a la entonces presidenta de la entidad, Mercedes Marcó del Pont. En el primer grupo estaba Juan Basco, el histórico subgerente general de Operaciones, y en el segundo, el ascendente gerente principal de Operaciones de Mercado, Agustín Torcasso. Entre ellos, según relatan en la City porteña, se libraba una fuerte batalla de poder que hacía, por ejemplo, que mientras uno aprobaba una multimillonaria compra de divisas para un banco, a los minutos el segundo se la negara. Todo dependía de quién atendiera el teléfono en cada momento. El martes, sin embargo, tras conocerse la salida de Marcó del Pont del banco y la renuncia de Guillermo Moreno, todo cambió. "Basco dice...", fueron las palabras con las que Torcassi comenzó una conversación ese día con un sorprendido operador cambiario.
La inflación oficial, sin grandes cambios
Gran expectativa genera entre los economistas el nuevo índice de precios al consumidor que promete develar el Gobierno en febrero. Lejos, sin embargo, estaría de convalidar una inflación del orden de 20 o 25% anual, como reflejan las estadísticas que manejan economistas privados. Al menos, la versión que manejan quienes conocen el tema es que podría el Gobierno mostrar una variación de precios más cercana al 15%. "Es porque usan la lista de precios controlados de los supermercados", advirtieron. Claro que para febrero todavía falta. Y habrá que ver si, cuando llegue el momento de presentar el índice, el Gobierno sincera las tarifas.
Una amistad muy disputada
La figura del jefe de la AFIP, Ricardo Echegaray, genera resistencias en el nuevo gabinete; en el entorno del ministro Kicillof algunos lo señalan como uno de los pocos responsables de las restricciones cambiarias que quedaron en funciones, tras la salida de Marcó del Pont, Moreno y Lorenzino. Echegaray, en tanto, se siente tranquilo porque el ex director de seguridad social de la AFIP Carlos Sánchez es el segundo de Jorge Capitanich. "Es uno de los nuestros", contó orgulloso. En Casa de Gobierno lo cruzaron: "Sánchez siempre fue amigo personal del Coqui". Los contrapuntos prometen continuar.
Especulación sobre un regreso
Los cambios en el Gabinete que se formalizaron la semana pasada sembraron un reguero de rumores en diversos ministerios públicos. En Planificación, los empleados más memoriosos y longevos en la gestión pusieron el acento sobre una relación de amistad: la de Cristian Folgar, subsecretario de Combustibles durante la presidencia de Néstor Kirchner, con el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich. El "petiso", como le dicen a Folgar en Planificación, es economista, especialidad que comparte con el recientemente ungido jefe de Gabinete de Cristina Kirchner, y lo ayudó en la redacción de la ley de hidrocarburos de la provincia norteña. Todo eso alcanzó en el ministerio para especular con un posible regreso del "petiso".
Empresarios, de festejo
Era la noche del martes. El director de una consultora económica exponía frente a un grupo de empresarios. De repente, entre la audiencia empezó a circular un rumor que hizo que el expositor interrumpiera su ponencia para preguntar qué pasó. Uno de los asistentes lanzó la primicia: Guillermo Moreno, el temido secretario de Comercio Interior con el que muchos hombres de negocios tuvieron que lidiar en los últimos años, había renunciado. La noticia sorprendió a todos, pero la reacción no fue homogénea. Algunos se limitaron a comentar el suceso, otros no se preocuparon por ocultar su "algarabía".