Reunión: el Gobierno advirtió al sector turístico que no revisará el cepo a los pasajes

La primera reunión entre el Banco Central, el Ministerio de Turismo y las empresas vinculadas al sector dio por tierra con la esperanza de los privados de que se revisara la prohibición que rige sobre la compra de pasajes, alojamientos o servicios en el exterior en cuotas con tarjeta de crédito.

Según asistentes al encuentro, los representantes del Gobierno establecieron que no se va a dar marcha atrás con la medida, aunque se armará una mesa de trabajo en la que podrían estudiarse caminos alternativos.

Hoy a la noche, el Foro Argentino de Consultores y Empresas de Viaje (Facve) emitió un comunicado para expresar su “malestar y preocupación”, dado que, según la entidad, de parte del Gobierno “no hubo registro del estado crítico del sector, respuestas ni certezas sobre la duración de la medida”.

Básicamente, en la reunión el sector turístico propuso sumar a los bancos para que ellos aporten alternativas para poder tener cuotas. Además, en la mesa de trabajo se tratarían temas como las diferencias tributarias con aplicaciones prestadoras de servicios, las dificultades con los procesadores de pagos y las formas de equilibrar la balanza de pagos de servicios turísticos.

“La reunión no fue un fracaso ni un éxito. Me parece que fue una primera aproximación para entender la problemática”, dijo el secretario de la Federación Argentina de Asociaciones de Empresas de Viajes y Turismo (Faevyt), Walter Rodríguez.

Sin embargo, una fuente del sector fue más severa y dijo que fue todo “sarasa” y que el Gobierno tampoco estudiaría la posibilidad de una financiación con interés. Por la industria también participaron representantes de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) y la Cámara de Compañías Aéreas en Argentina (Jurca).

En tanto, por el BCRA estuvo el vicepresidente de la entidad Sergio Woyecheszen, y la jefa de gabinete de la cartera de Turismo, Geraldine Oniszczuk.

Según un estudio que presentó Faevyt en la reunión, la decisión del Central tendrá severas implicancias económicas para el sector turístico argentino. Asimismo, puede afectar a la macroeconomía en general, ya que podrán cancelarse rutas aéreas ya confirmadas por las diferentes compañías, al no encontrar atractivo comercial para vender a la Argentina, al reducirse la demanda de asientos al exterior.

Además, dijeron que “es difícil pensar que pueda haber un efecto reemplazo entre turistas que vacacionaban en el exterior y ahora pasen a hacerlo localmente” y lo más probable es que el aumento de precios en los servicios dentro de la Argentina (transporte aéreo, terrestre, hoteles, etc.) por mayor demanda también termine desalentando el turismo interno.

“En la etapa previa a la pandemia el déficit de dólares por turismo ya se venía reduciendo, con una caída del 28,6% en 2019. Esto se explica por el efecto ingreso y el efecto precio de la divisa (tipo de cambio) que encareció de manera sustantiva el turismo al exterior para buena parte de la clase media y media-baja. Por esto también, una medida como la que se implementó en éstos días, afectará principalmente al segmento de clase media que aún demanda viajes al exterior, sin mayor impacto sobre los estratos altos, que efectuarán la compra al contado sin modificar su decisión de viaje. Por ende, la medida es regresiva al interior del conjunto de personas que viajan al exterior”, cerraron.

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