¿Qué pasó con la ley de alquileres?
El Gobierno acordó dar de baja la norma; si bien aún no se brindaron detalles de cómo sería el nuevo esquema, en caso de avanzar, sería por DNU
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Este martes, se conoció que el Gobierno busca dar de baja la ley de alquileres, normativa que cambió las reglas al fijar tres años de contrato y un ajuste anual por inflación y variación salarial. Si bien la legislación tenía como objetivo “ordenar” la situación habitacional en el contexto económico de la Argentina, generó grandes quejas tanto de los inquilinos como de los propietarios.
La decisión fue tomada durante un almuerzo que mantuvieron el presidente, Alberto Fernández, y el ministro de Economía, Sergio Massa, en la Casa Rosada. “La ley de alquileres no va más”, afirmaron a LA NACION fuentes muy cercanas al titular de la cartera de Hacienda.
La intención sería modificar, por medio de un decreto de necesidad y urgencia (DNU), la legislación actual, que fue aprobada por Diputados a fines de 2019, bajo la presidencia de Maurici Macri, y sancionada en el Senado durante la gestión de Alberto Fernández.
La decisión se da un contexto complicado para el sector, dado que hay poca oferta y tanto los precios como la demanda crecen. Si bien aún no se brindaron detalles de cómo sería el nuevo esquema, en el caso concretarse, el Gobierno suspendería la ley por 180 días con un DNU que restablezca la legislación anterior. Además, se estima que se sumarían algunos beneficios impositivos para los propietarios que decidan destinar sus inmuebles al mercado de los alquileres. En este sentido, con el objetivo de aumentar la oferta (que en la actualidad está en el mínimo histórico), la renta del negocio no pagaría Ganancias y la propiedad estará exenta de Bienes Personales.
¿Qué es la ley de alquileres?
La ley de alquileres 27.551 entró en vigencia el 1º de julio de 2020 y, desde su implementación, provocó incertidumbre e inseguridad jurídica en el mercado, lo que se trasladó al precio de la renta.
Los principales cambios de la norma, respecto a cómo se daban los convenios previamente, son la ampliación del plazo de los contratos —que se extendieron de dos a tres años— y la actualización anual del monto a pagar. Con la ley, el importe del arrendamiento se realiza mediante una cuenta en base a un índice que establece en Banco Central (BCRA), que cruza salarios e inflación. Antes, se acordaba entre el inquilino y el propietario, y solía ajustarse dos veces al año.
¿Cómo impactó la ley de alquileres en los precios y la oferta?
Como consecuencia de su implementación, el costo del alquiler en la Argentina subió un 245 por ciento. Asimismo, desde julio de 2020 hasta marzo de 2023, el índice de alquileres computa un total de 32 meses consecutivos de crecimiento, según un análisis del Centro de Estudios de la Nueva Economía de la Universidad de Belgrano sobre los datos del BCRA.
En este contexto, los contratos que se renovaron en marzo tuvieron subas de un 89,9 por ciento. En tanto, se estima que quienes lo hagan durante este mes verán un aumento de entre 92,59 y 93,75 por ciento, según las estimaciones del Instituto de la Vivienda de la Ciudad.
Al brutal incremento que se realiza a las actualizaciones se agrega que las nuevas ofertas de alquiler, tanto de casas como de departamentos, superaron esos porcentajes. En febrero, las unidades publicadas en el mercado habían aumentado un 111,9 por ciento en el último año.
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