Precios alterados: qué efectos tiene la política de subsidios estatales
1. Cada cosa en su lugar. No hacer política social con distorsión de precios. Los precios en una economía sirven para que las personas puedan decidir cuanto están dispuestas a gastar y ahorrar, dado que cada uno valora las cosas de una forma diferente. Por su parte, las políticas redistributivas sirven para que la sociedad sea más equitativa y para que el punto de partida sea lo más parejo posible. Por eso, existen a nivel global los impuestos a la herencia o a las ganancias individuales, en los que paga más el que más gana, o bien, por el lado del gasto, se realizan transferencias a los más vulnerables. Pero, pretender lograr una política redistributiva alterando los precios de los bienes y servicios no parece ser una buena idea.
2. El rol de los precios. Supongamos que la población necesita movilidad para ir hacia el trabajo. Probablemente, la mejor idea en términos de costos y de factores ambientales sería desarrollar una mejor infraestructura para el transporte público. Pero una solución de corto plazo puede ser subsidiar a las motos, bajo la premisa de que esto le permite acceder a personas de menores recursos a un transporte rápido. Probablemente esto sea así, pero, ¿sería algo bueno? Subsidiar el precio de las motos posiblemente lleve a una sobredemanda, que hará que la producción aumente, sin necesidad de que la empresa proveedora mejore su producto. Así, crecerá la cantidad de autopartes importadas, aumentando la salida de dólares. La moto pasará a ser uno de los vehículos más usados, cumpliendo el objetivo principal de que la población de menores ingresos se traslade, a costa de una sobredemanda de importaciones, una mayor contaminación ambiental y sonora y mucho más tráfico. Y, aun así, quienes no accedieron a una moto financiaron a los que sí, porque aportaron al subsidio. ¿Sirvió?
3. Atraso tarifario. Si hay un “atrasazo”, llegará un “tarifazo”. Mencionar ese término sin revisar qué pasó antes y sin tener en cuenta que en los períodos de no actualización de las tarifas el subsidio es cada vez mayor, es intelectualmente deshonesto. La suba del subsidio energético tiene un fin noble, que es que toda la población tenga acceso a la energía, ¿eso quiere decir el subsidio pleno es la mejor forma de hacerlo? Probablemente no. El atraso tarifario hace perder la noción de los costos del servicio. La demanda sube por sobre lo que subiría si el precio fuera significativo en la canasta de consumo; terminamos consumiendo más de lo que necesitamos. Eso lleva a que aumenten las importaciones de energía sin tener en cuenta el precio internacional: hay más salida de dólares y más gasto del Estado. Además, se afecta al ambiente y hay ciudadanos de ingresos altos pagando poco, otros de clase muy baja sin subsidio y una sobredemanda sin noción del ahorro energético. ¿Sirvió?
4. Atraso cambiario. La otra herramienta elegida para hacer política (¿social?) es el tipo de cambio. La devaluación se vuelve inevitable si la práctica de los años previos fue la del atraso cambiario permanente. Sostener el tipo de cambio es una política usada por los gobiernos, que intenta frenar la escalada de precios de bienes importados a costa de generar otros desequilibrios. Cuando no hay más dólares a cierto precio, quedan dos opciones: cepo cambiario o brusca devaluación.
5. Opción. Hay muchos instrumentos de política social con los que puede armarse una red de contención para los más vulnerables, sin romper el sistema de precios.
Otras noticias de Comunidad de Negocios
- 1
PAMI: 10 preguntas y respuestas sobre el cambio en la cobertura de medicamentos
- 2
Giorgia Meloni, el Papa Francisco, un gobernador peronista y un “ídolo” libertario: el podio de quienes le hicieron regalos a Javier Milei
- 3
Real hoy: a cuánto cotiza la moneda brasilera oficial y blue este viernes 20 de diciembre
- 4
Opinión. Zonas de exclusión: no es el glifosato sino el asfalto el que mata la vida biológica de los suelos