Dólar. Por razones impositivas, y tras otro mal año, rebotan los depósitos
Los depósitos privados bancarios en dólares cerrarán el año con una caída cercana al 20%, tras haber mostrado bajas, algunas importantes (de US$1473 millones en octubre, por ejemplo), durante dos tercios del año. Pero a la vez se encaminan a cerrar el mes con un incremento del 4 al 5 por ciento.
En diciembre crecen más de US$520 millones, lo que volvió a colocar el stock por encima de los US$15.200 millones luego de dos meses y tras haber ensayado un piso de 14.611 millones el 11 de noviembre. Este es un factor que, por vía de los encajes, ayuda a la recuperación de casi US$600 millones que ensayan las reservas contables totales del Banco Central (BCRA), además del raid de compras que viene realizando la entidad y que acumula ya 13 ruedas.
¿Hay que pensar un una súbita recuperación de la confianza? Los especialistas aclaran que no. Nada que ver.
Recuerdan que ese cambio de tendencia (en este caso) o el fortalecimiento en la tasa de crecimiento se suele verificar en diciembre con causas estacionales relacionadas con la cuestión impositiva.
Es que tanto estas colocaciones como los bonos en dólares están exentos, según lo dispuso la AFIP, de Bienes Personales ,un impuesto que debe pagarse en base a las tenencias que cada contribuyente registre al 31 de diciembre. El proyecto de ley para fomentar el ahorro y la inversión en pesos enviado hace dos meses por el Gobierno al Congreso pretende revisar este criterio, pero aún rige el vigente hasta ahora.
De hecho, en diciembre del año anterior los depósitos en dólares habían trepado en US$1007 millones durante ese mes, lo que no ocultó que se hundieron en más de US$9500 millones en todo ese año.
"Con el afán de no quedar expuestos en títulos gravados por Bienes Personales en la foto de fin de año, muchos inversores decidieron rotar parte de su cartera hacia bonos soberanos, generando un incremento en la cotización", explicó recientemente en un informe la consultora Delphos Investment.
Según lo dispuesto por la ley 27.541 de emergencia económica, votada en diciembre de 2019, el impuesto a los Bienes Personales alcanza a quienes tienen bienes gravados por un valor de al menos $2 millones, un monto que aún no se ha actualizado y cuya adecuación puede demorarse o, incluso, no suceder.
De allí que resulten cada vez más relevantes para muchos contribuyentes las exenciones a este gravamen que la ley contempla para muchas tenencias financieras, dado que, "con una simple conversión de cartera un inversor puede lograr un ahorro sustancial" en el pago del impuesto, explican asesores tributarios.
En este sentido, vale recordar que están fuera del alcance de esa imposición los depósitos a plazo fijo o en cajas de ahorro en pesos o en moneda extranjera en cajas de ahorro, tenencias de acciones locales con cotización pública (e incluso ADR) y en bonos de la deuda pública. Pero no así la tenencia de Fondos Comunes de Inversión, lo que genera todo tipo de arbitrajes por estos días
Los contadores recuerdan que para que la AFIP no objete esos movimientos, como supuestas maniobras de elusión del impuesto, todas estas inversiones deberían mantenerse en su nuevo destino por un plazo prudencial.
El error más común lo cometen "quienes retiraron dólares del banco por el temor que les genera la corrida o el miedo a un nuevo corralito, y ahora los volvieron a depositar para usufructuar la exención del impuesto si aparecen en la foto de fin de año. Esos son los primeros a los que van a buscar", aclaran los expertos.
Temas
Otras noticias de Banco Central
- 1
Giorgia Meloni, el Papa Francisco, un gobernador peronista y un “ídolo” libertario: el podio de quienes le hicieron regalos a Javier Milei
- 2
El Gobierno oficializó la poda a la obra pública y el Tesoro le pidió a la Secretaría que devuelva 1 billón de pesos
- 3
Se vende: un fiscal detectó irregularidades en la inminente subasta de un edificio del INTA y pide evitar “posibles hechos de corrupción administrativa”
- 4
Por qué el Gobierno no salió aún del cepo y la “prueba de fuego” que deberá afrontar en 2025, según Martín Redrado