Por el tarifazo, los mayores consumos pagarán el gas más caro en dólares que en 2001
Una factura de 4000 m3 anuales, propia de una casa de dos plantas con buena calefacción, tendrá un encarecimiento de hasta 50%
Hechas las cuentas finas, los aumentos en el gas que comenzó a aplicar el Gobierno a partir de este mes bajo la consigna de la reducción de subsidios adquieren un significado muy distinto al anunciado originalmente , ya que implicarán una recomposición de tarifas para las empresas -algo que no fue formalmente difundido desde el principio-, le ahorrarán muy poco dinero al Estado y provocarán aumentos en las boletas que superarán en algunos casos los valores en dólares que se pagaban en 2001 para los mismos consumos.
Así surge de un informe elaborado por el consultor Cristian Folgar, ex subsecretario de Combustibles del gobierno de Néstor Kirchner. Según sus números, la mayor erogación en dólares se notará en los usuarios de mayor consumo, segmento que, si no ahorra, al igual que el resto de la demanda, sufrirá aumentos escalonados en abril, junio y agosto.
Natalia R. vive en Vicente López con su marido y sus dos hijos. Recibe el servicio de Gas Natural Fenosa (ex Gas Ban). Tiene una casa de dos plantas, con calefón, termotanque y tres estufas de tiro balanceado. Mujer de carácter fuerte, suele manejar la economía del hogar y está al tanto de todas las facturas que llegan a su domicilio. Casi de memoria, dice su número de consumo anual de gas: 1800 metros cúbicos (m3). "Lo tengo medido. Hace dos años que estoy en ese nivel", explica.
Si no reduce al menos 5% de su consumo, deberá pagar a partir de agosto 316,98 dólares por año (si se toma un tipo de cambio de $ 8), sin contar impuestos, el adicional que se cobra para cubrir la importación de gas y los cargos para financiar obras. Es un 1,4% más que lo que debía pagar un usuario con el mismo consumo en octubre de 2001, cuando se concretó el último aumento de tarifas de la convertibilidad.
Dentro de la categoría de consumidores altos, Natalia es una usuaria austera. Por ejemplo, un vecino de la zona sur de la ciudad de Buenos Aires que prefirió no identificarse, dueño de una casa de dos plantas de más de 200 metros cuadrados, con un termotanque y doble calefacción central gasta más de 4000 m3 anuales. En dólares, deberá pagar, siempre que no ahorre, US$ 983,43, un 50% más que los US$ 657,02 que desembolsaba en octubre de 2001. Su consumo anual, en pesos, será de $ 7867, más de siete veces más que lo que desembolsaba hasta marzo, antes de los aumentos.
Medidos en pesos, los clientes R-3 4, segmento que más consume, del conurbano bonaerense pagaban hasta ahora $ 0,307 por m3. Si no ahorran, deberán desembolsar por el mismo volumen de gas $ 1,824 a partir de agosto, es decir, un 494% más.
En la ciudad de Buenos Aires ocurrirá algo similar. Quienes gasten hasta 1800 m3 anuales pagarán US$ 352,27, un 12% más que el valor en dólares de la convertibilidad. Mientras que un usuario residencial de muy alto consumo, en torno de los 4000 m3 al año, pagará 973,88, casi el doble, expresado en la moneda norteamericana, que en octubre de 2001.
Escaso ahorro fiscal
El mayor esfuerzo de los usuarios de gas a la hora de pagar sus boletas no repercutirá, sin embargo, en un ahorro significativo del Estado en subsidios, como se planteó inicialmente.
De acuerdo con el informe de Folgar, "las medidas tomadas se tratan más de una suba de tarifas que va a incrementar el flujo de caja de productores, transportistas y distribuidores de gas natural que una eventual reducción de aportes del Tesoro nacional al sector".
El trabajo también recuerda que muchas de las empresas que ahora recibieron una mejora en sus ingresos "no recibieron incrementos de precios o tarifas en más de 10 años". Salvo Gas Natural Fenosa, que recibió una mejora moderada en 2007, el resto mantuvo sus tarifas congeladas durante años. Eso, sumado a los aumentos en sus costos como consecuencia de la inflación, ocasionó un fuerte y crónico quebranto en los balances de las compañías durante los últimos años. Por ese motivo, muchas de ellas sostienen que la mejora en sus ingresos no alcanzará para darles la estabilidad que requieren sus negocios.
Según Folgar, "si se diera un ahorro de subsidios, será por el menor consumo producto de la elasticidad precio de la demanda ante los incrementos de las facturas, o por el efecto de la elasticidad ingreso, o producto de la demanda ante la caída del nivel de actividad económica, o del menor ingreso disponible de la sociedad".
Peso a los aumentos, las tarifas de gas en la Argentina continuarán por debajo de sus referencias en la región debido a que el precio del servicio estaba muy retrasado en el país. De acuerdo con un informe elaborado por Montamat & Asociados, a fines del año pasado la tarifa que pagaba un usuario de la categoría R-2 en la ciudad de Buenos Aires era de $ 0,51 por m3. El mismo servicio, en Brasil, costaba $ 12,09; es decir, 23 veces más, mientras que en Chile costaba 13 veces más.
lanacionarDel editor: qué significa. Los primeros análisis de la quita de subsidios indican que el Gobierno no sólo ahorrará poco dinero, sino que subestimó el impacto de la medida.