Piden previsibilidad para la inversión
Afirman que hay optimismo sobre el país, pero que se necesita capital en infraestructura y capacitación
Con algunas definiciones críticas, aunque destacando la buena relación con la Argentina, la vicepresidenta del Banco Mundial para América latina, Pamela Cox, afirmó ayer que las estadísticas oficiales deben ser confiables y que el Gobierno debe brindar previsibilidad para atraer más inversiones, sobre todo en el sector de infraestructura.
En una visita de cuatro días que inició anteanoche a la Argentina, Cox destacó la fuerte recuperación lograda desde 2003, aunque aclaró que, como parte de una región históricamente volátil, el país debe tomar suficientes recaudos para mantener en alto el nivel de actividad.
Las claves para atraer al capital privado al sector real, precisó, pasan por tener "regulaciones estables, instituciones fuertes y predecibles, sobre todo en términos impositivos".
Antes de iniciar una serie de reuniones con los ministros de Economía, Felisa Miceli; Trabajo, Carlos Tomada; Planificación, Julio De Vido; y Salud, Ginés González García, Cox brindó una conferencia de prensa en la que trató de evitar cualquier cuestionamiento fuerte al Gobierno. Fuentes de la entidad destacaron que hay "una buena relación bilateral y se está trabajando muy bien en la ejecución de los créditos del banco, por lo que es bueno destacar las cosas positivas". Se produjo así un giro respecto de otros momentos de enfrentamiento entre ambas partes.
Este año, el Banco Mundial otorgará US$ 700 millones al país -que incluyen 125,7 millones aprobados ayer para la ruta nacional 19 en Santa Fe- y recibirá 1000 millones del Gobierno, que a fines de 2006 mantenía una deuda de 6400 millones con la entidad multilateral.
Cox estuvo con el jefe y el oficial principal de la oficina del BM para el Cono Sur, Axel van Trotsenburg y Felipe Saez, respectivamente. Van Trotsenburg tomó la palabra en varias ocasiones para brindar precisiones y opinar sobre cuestiones que Cox no quiso abordar. La ejecutiva comenzó la ronda de preguntas con una diplomática respuesta sobre la fuerte polémica que existe por la manipulación en el índice de precios minoristas de enero, del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). "Es importante que la población y el sector privado confíen en las estadísticas oficiales, pero no sé qué pasó con el Indec", indicó esta economista norteamericana especializada en desarrollo.
Respecto de las perspectivas locales, afirmó que la recuperación registrada desde 2003 "es muy importante para reducir la pobreza, que es muy alta para un país de ingresos medios como la Argentina". Además, afirmó que en el exterior los inversores "están muy optimistas sobre el país, pero como en América latina el crecimiento no es estable, lo importante es tener un rumbo predecible".
A modo de respuesta, Miceli indicó tras su reunión con Cox que la "previsibilidad de la economía argentina está dada, ya que hace 4 años crece ininterrumpidamente a tasas que rondan el 9%", con superávit gemelos y en "un camino de crecimiento productivo con inclusión social".
Van Trotsenburg coincidió con la ministra al destacar la reducción "de las vulnerabilidades del país por el superávit fiscal del 4% y el aumento de las reservas internacionales"; respecto de la extensa duración de la ley de emergencia pública, el funcionario también eligió una respuesta amigable, al afirmar que es parte "de una transición de una situación de crisis a la normalización" del país.
Por su parte, la ejecutiva del BM precisó que hay "algunas necesidades de inversiones, claramente en infraestructura". En un almuerzo con De Vido, ayer se acordó continuar este año con el programa Crema para las rutas y apuntalar obras públicas en la provincia de Buenos Aires.
"Ese es un cuello de botella importante, pero también es muy importante invertir en capital humano, sobre todo en educación secundaria y formación de trabajadores para aumentar la competitividad", señaló. De hecho, con Tomada dialogó sobre un crédito de US$ 200 millones para la formación continua de trabajadores y la transición del Jefes y Jefas al seguro de desempleo.
Cox, que visitará proyectos del banco en Mendoza, tampoco quiso dar una predicción sobre las posibles usinas de una nueva crisis. "Espero que no haya crisis; si América latina crece tanto ahora es porque ya tuvo muchas crisis", concluyó, sin abandonar su sonrisa anglosajona.