Peligra la fusión de American y US Airways
El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó una demanda para bloquear la fusión de AMR Corp., la matriz de American Airlines, y US Airways Group Inc., indicando que la unión perjudicaría la competencia tras una ola de consolidaciones de aerolíneas en años recientes en el país.
Los consumidores terminarían pagando el precio de la transacción "en pasajes más caros, mayores cobros y menos opciones", dijo el fiscal general, Eric Holder.
En la última década, Washington ha puesto poca resistencia a las fusiones de aerolíneas, pero la demanda del Departamento de Justicia alega que la combinación de American y US Airways iría demasiado lejos y dejaría más de 80% del mercado de aviación comercial de EE.UU. a cuatro aerolíneas.
American y US Airways compiten directamente en más de 1.000 rutas en las que una o las dos ofrecen conexiones, dijo el gobierno.
Las acciones de US Airways cerraron 13,07% a la baja a US$16,36, lo que elevó la perspectiva de que la planeada fusión se derrumbaría. El acuerdo en acciones fue valorado en US$11.000 millones cuando fue anunciado en febrero.
American y US Airways aseguran que su fusión beneficiaría a los consumidores al crear otra aerolínea grande que competiría con mayor fuerza con dos gigantescas combinaciones: Delta Air Lines Inc. y United Continental Holdings Inc. La fusión crearía un mercado estadounidense dominado por American, Delta, United y Southwest Airlines Co.
"Creemos que la evaluación del Departamento de Justicia está equivocada", dijeron AMR y US Airways en un comunicado conjunto. "Armaremos una defensa enérgica y usaremos todas las opciones legales para concretar esta fusión".
Los presidentes ejecutivos de ambas empresas dijeron que se mantenían optimistas de poder cerrar el acuerdo este año.
El presidente ejecutivo de US Airways, Doug Parker, dijo en un mensaje a los empleados que "otras empresas se han hallado en circunstancias similares y han logrado concretar con éxito sus fusiones". Parker no explicó cómo su empresa y American responderían a las inquietudes expresadas por las autoridades de competencia.
En una carta a empleados, el presidente ejecutivo de AMR, Tom Horton, dijo que las aerolíneas han estado trabajando con el Departamento de Justicia por meses para obtener su visto bueno, pero ya que el gobierno ha decidido en contra del acuerdo, el tema "será ahora resuelto por los tribunales".
Mientras dure el proceso judicial, que tardaría unos cuantos meses, las aerolíneas seguirán operando como empresas inde-pendientes, afirmó Horton.
Dennis Tajer, vocero del sindicato que representa a más de 8.000 pilotos de American, dijo que el Departamento de Justicia estaba siendo hipócrita porque ha aprobado otras fusiones del sector.
La corte de bancarrotas que supervisa la reestructuración de AMR había planeado una audiencia para el jueves para confirmar el plan de reorganización de la empresa, que consistía básicamente en su fusión con US Airways. Pero ahora no estaba claro si la audiencia al final se realizaría.
El Departamento de Justicia dijo que estaba dispuesto a escuchar a las partes para intentar llegar a un acuerdo, pero que creía que lo indicado en este caso era bloquear la fusión.
American y US Airways han sostenido que la combinación de sus redes otorgaría a los pasajeros acceso a rutas que solo una o la otra realizaban previamente. Asimismo, rechazan las predicciones de los críticos de que la empresa fusionada reduciría el servicio.
El último acuerdo grande entre aerolíneas que Washington rechazó fue en julio de 2001, cuando dijo que presentaría una demanda para bloquear la combinación de United y US Airways. El acuerdo al final se deshizo.
Desde entonces, la consolidación de la fragmentada industria avanzó rápidamente, generando esperanzas de que al fin entraría una era de rentabilidad estable.
El Departamento de Justicia no se opuso a la combinación en 2005 de US Airways y American West Airlines, la adquisición en 2008 de Northwest Airlines por parte de Delta, la fusión en 2010 de United y Continental Airlines, o la compra en 2011 de AirTran Airways por Southwest Airlines.
La Comisión Europea aprobó la fusión de American y US Airways este mes, con la única condición de que las aerolíneas se desprendan de algunos espacios de despegues y aterrizajes en el aeropuerto de Heathrow, en Londres.
La oposición del Departamento de Justicia sugiere que tras aprobar las fusiones anteriores, las autoridades creen que la con-solidación finalmente amenaza los intereses del consumidor.
El gobierno también rechazó la idea de que la fusión es necesaria para la supervivencia de las aerolíneas, destacando que American acaba de reestructurar sus costos y que hace poco ha registrado resultados financieros prometedores tras años de enormes pérdidas. US Airways, por su parte, ha sido una de las aerolíneas más competitivas de EE.UU. en los últimos años.