
Pedro Pou: un economista de pura cepa liberal
El economista y ex presidente del Banco Central Pedro Pou murió anteayer en Buenos Aires como consecuencia de una leucemia que arrastraba desde hacía más de diez años. Pou nació el 21 de diciembre de 1943 en la ciudad de Mendoza y con sólo 35 años fue uno de los fundadores y el primer director académico del Centro de Estudios Macroeconómicos (CEMA), el think tank del ultraliberalismo en el que se formó Amado Boudou.
Antes de ser convocado para el Banco Central, su debut en la función pública fue como ministro de Economía bonaerense, durante la última dictadura militar. En los 90 asumió como vicepresidente del Banco Central y cuando, en agosto de 1996, se concretó la salida de Domingo Cavallo del Ministerio de Economía, fue el propio Pou el que le sugirió a su primo Eduardo Bauzá el nombre de Roque Fernández para asumir en el Palacio de Hacienda. La movida le permitió a Pou sustituir a Roque al frente del BCRA.
Sus últimos meses al frente del banco fueron sumamente traumáticos e incluyeron un pedido público de renuncia por parte de Cavallo, no bien asumió como ministro de Economía de la Alianza. Cavallo defendía a capa y espada el 1 a 1, mientras que Pou era partidario de una dolarización de la economía. El presidente del Banco Central aguantó la embestida durante casi un mes, aunque finalmente, el 25 de abril de 2001, De la Rúa emitió el decreto que lo removía del cargo con la acusación de "mala conducta e incumplimiento de los deberes de funcionario público".
Tras su salida, Pou se dedicó a dos grandes tareas. La primera fue su defensa en las múltiples causas que le iniciaron por la falta de controles de la banca privada durante su gestión en el BCRA. La segunda fue la expansión de sus negocios. Dueño de un campo de más de 30.000 hectáreas en el sur de Entre Ríos, Pou se convirtió en uno de los principales productores ganaderos de la provincia.
Gran lector y fanático de Jorge Luis Borges, Pou nunca abandonó la actividad académica y aun en el momento más álgido de su paso por la función pública se hacía el tiempo para cursar la carrera de Filosofía en forma simultánea en la UBA y en la Universidad Católica Argentina (UCA).
"Decía que las cursaba en paralelo porque en las dos universidades le mentían en algo y quería escuchar todas las campanas", explicó un colaborador de aquellos años.