Las tecnologías crecen a un ritmo mayor al que podemos asimilar y expertos en el área explicaron cómo se conjuga con la sociedad y las empresas
- 6 minutos de lectura'
En la apertura del evento “Inteligencia Artificial: la era de la reinvención”, organizado por LA NACION, especialistas del mundo tecnológico sobrevolaron los últimas tendencias que atravesaron a la sociedad e intentaron predecir cuál es el porvenir de esta tecnología.
La premisa sobre la que se para la realidad tecnológica hoy es la atropellante rapidez con la que avanza. “Son viejos los matices de inteligencia artificial que veíamos antes y ya son un mandato. Se asume que ya estás explorando lo que antes era la llamada tercera ola y ahora se espera para el próximo semestre”, dijo Nicolás Kaplun, Chief Business Officer para Latinoamérica de Globant, quien más adelante definió que “lo que aumenta es la velocidad y nos obsoletizamos como intelecto”.
“La inteligencia artificial es una tecnología que atraviesa toda la oferta necesaria para una competitividad vigente. En su momento era eficiencia y excelencia operativa, luego fue brindarle a los consumidores lo que ellos querían en tiempo y espacio las promociones acertadas y asertivas. Hoy, la inteligencia artificial se conecta con nuevas tecnologías que te permiten recibir ese mismo contenido de una manera adaptada a lo que está vigente, como Metaverse y economía descentralizada, el contenido que tiene que ver con la dinámica que la gente usa para entretenerse y vivir”, comentó sobre las etapas transitadas por el sistema.
Kaplun mencionó cómo ya “hay cadenas de comida y ropa deportiva que tienen su oferta de valor para distintos metaversos”, como signo de que el futuro ya llegó, y llamó a ““invertir el presupuesto de lo tradicional a la innovación aplicada y a escala, porque si no nos tapa la ola”.
En cuanto al mindset ideal para posicionarse en este tema, opinó que “exitoso no es el que consiguió estar competitivo, sino el adicto al gimnasio digital, que está todo el tiempo observando qué viene”.
Otra innovación disruptiva abordada por el ejecutivo en este ámbito son los token no fungibles (NFT), que “son activos digitales que uno puede adquirir y que puede no tener el activo físico para poder tener algo que en el mundo virtual es valorado como un skin, una apariencia premium en un juego que uno adquiere y hasta lo revende en el entorno de NFT; es un plano destino”, dijo el ejecutivo, quien aclaró también que “hay gente que hoy participa en esa economía como modo de vida”.
Para él, “la tendencia es lo vigente que está, lo accesible que es y lo entrelazadas que son (estas tecnologías)” y lo demostró al citar un estudio que indica que en el próximo año la economía va a invertir 50% más en lo relacionado a descentralización tecnología. Teniendo en cuenta el cambio de paradigma en términos digitales que impuso la pandemia, Kaplun consideró que “hay que seguir observando qué oportunidades produce ese cambio, qué amenazas genera, qué cambios produce”.
El futuro de la inteligencia artificial
Predecir el futuro de una innovación es una tarea difícil de resolver. Para abordar las últimas novedades en inteligencia Artificial, asistió al evento como expositor Fredi Vivas, CEO de RockingData, una startup pionera y referente en Latinoamérica en el uso de machine learning, inteligencia artificial y big data para potenciar la toma de decisiones en distintas organizaciones. Tiene como clientes a Mercado Libre, YPF, AstraZeneca y AB InBev, entre otros.
El especialista diferenció tres tendencias que aparecieron en los últimos dos años. En primer lugar, destacó el crecimiento exponencial de la tecnología, cuyo ritmo va más rápido de lo que podemos ver. “Una tendencia que se vio este año es la creación de contenido de forma automática y sintética, como utilicé en la creación del prólogo de mi libro Cómo piensan las maquinas. Esta tecnología GPT-3 es capaz de generar texto de forma automática y es revolucionario porque puede cambiar la forma de hacer las cosas, no solo a nivel texto sino a nivel creación de imágenes, video, audio, quizás hasta en arte”, compartió.
“Los humanos estamos preparados para ver un desarrollo más bien lineal y local de la tecnología y no tanto global y exponencial. La solución es trabajar fuertemente en la educación”, estableció al presentar la segunda tendencia.
Vivas observó este año más demanda de alfabetización de datos. Ejemplificó la tendencia educativa con el creciente interés por aprender Python, uno de los lenguajes más usados del mundo de código abierto. “Las grandes empresas del mundo empiezan a adoptar este tipo de lenguajes que antes no pasaba”, según el expositor.
Otra innovación en este área fue liderada por la Universidad de San Andrés, que se convirtió en la primera entidad educativa en dar origen a una carrera de Ingeniería en Inteligencia Artificial, que para él es “un hito porque ven cómo cada vez más necesitamos formar ese tipo de profesionales”.
“Otra tendencia en mundo de la educación es el data minsdset, de pensar en datos. No solo saber codificar, sino también incorporar habilidades que muchas veces suelen ser blandas como liderazgo, armar equipos, de entender cómo se combinan esos, de analizar con pensamiento crítico y cómo hacer buenas preguntas a los datos”, señaló el especialista en big data.
En tercer lugar, vislumbró la responsabilidad que conlleva la inteligencia artificial: “Cuanto más uso hay, más conocimiento de riesgos hay de lo que implica la inteligencia artificial, y hay una tendencia positiva para su desarrollo sostenible y saludable”.
Agregó que hay una iniciativa de la UNESCO que une a 193 países para lograr este objetivo. En este sentido, también observó que los usuarios son cada vez más consientes de su consumo y van a estar cada vez más interesados en conocer el trasfondo de los productos y procesos, por ejemplo, “cómo fue realizado este algoritmo, si mis datos están siendo usados solo para lo que me dicen”, ilustró.
Al pensar en futuro, al experto se le vienen tres puntos a la cabeza. El primero es el 5G, que tiene hasta “100 veces más velocidad que el 4G y alcance y (por ende) más consumo de datos”. El segundo es el concepto de huge data, que reemplazaría al big data ya que este “se va a quedar corto”. En cuanto al volumen de datos, “está comprobado que cuanta más velocidad tenemos en la conectividad vamos a descargar más cosas, utilizar más datos, animarnos a comprar cosas y meternos en universos paralelos como el metaverso; generar más capacidades para que empresas entiendan mejor los datos, no solo como hoy con sus principales usos más comerciales de vender más o fidelizar; sino que creo que va a haber una tendencia de industrias no tan comunes o nativas de datos como el agro o salud”, se explayó. En tercer lugar, propuso el “edge computing, que es la cercanía con la que vamos a procesar los datos, más cerca del lugar donde estemos”.
“Estos habilitadores generan mayores capacidades para las organizaciones. No solo para empresas desde el punto de vista de generar más entendimiento de usuarios o consumidores sino más entendimiento de sanatorio médico y sus paciente, universidad y sus alumnos, gobierno y ciudadanos. Es entender relaciones, encontrar patrones ocultos dentro de millones de datos que podemos analizar. Es una herramienta que creo que va a cambiar la historia de la humanidad”, finalizó Vivas.