Nuevas proyecciones: a cuánto llegarán la inflación y el dólar en 2024 según las principales consultoras

En un comienzo de año que tuvo un fuerte arrastre de la devaluación de diciembre y la liberalización de precios, sumado a la caída del consumo y el retroceso en la actividad en enero, más de 50 consultoras y bancos, locales y del exterior, actualizaron sus pronósticos sobre la inflación, el tipo de cambio oficial y el Producto Bruto Interno (PBI) para este año, y fueron publicados en el informe mensual LatinFocus Consensus Forecast.

Un punto clave es la proyección de una economía en caída para 2024: “La actividad se contraerá a un ritmo más rápido este año que el pasado, golpeado por un ajuste fiscal sostenido y una inflación vertiginosa, en medio de la devaluación del peso y la eliminación de controles de precios. Sin embargo, el crecimiento debería regresar en 2025, a medida que la reforma del presidente [Javier] Milei dé resultados. La oposición parlamentaria y popular a esas reformas es un riesgo”, sintetiza el documento, publicado hoy.

Luego de que este miércoles se conociera el dato oficial de la inflación de enero, que alcanzó el 20,6% y llevó la medición interanual a 254,2%, nuevamente la más alta del mundo, LatinFocus estima un escenario todavía complicado para el resto del año. Se prevé que la inflación se incremente “con creces en comparación a 2023 debido a la eliminación de los controles de precios y a la reducción de la brecha entre los tipos de cambio oficial y paralelo. Ajuste fiscal, crecimiento de la oferta monetaria y modificaciones en el régimen cambiario son los factores a tener en cuenta”, detalla el informe.

Sobre esta base, los panelistas de FocusEconomics consideran que la inflación anual rondará el 226,8% a fines de este año. A pesar de que todavía sería un valor alto, el estudio estima una baja en el ritmo para 2025, y plantea que el próximo año el IPC cerraría en 54,6%, también en términos anuales.

Sin embargo, los especialistas consideran que esto es relativamente optimista. “Detrás de este número tiene que haber implícita una baja más fuerte en los registros mensuales. Si bien seguramente caiga con respecto a lo que vimos estos meses, no va a ser tan fácil el descenso, porque la inflación tiene inercia, y es difícil romperla”, afirmó Alejandro Giacoia, de Econviews.

Melisa Sala, de LCG, concordó con esta posición, y dijo que, desde su consultora, no ven posible una rápida desaceleración en los precios. “Esperamos registros todavía elevados (en torno al 20%) también para febrero y marzo, principalmente por el ajuste de los regulados sobre una inercia que corre rápido”, sostuvo la economista.

Respecto del mercado de cambios, la previsión del informe marca que este año el dólar oficial cerrará a $1805 —hoy su valor es de $853—, mientras que el mes pasado los cálculos arrojaban un valor final para este año de $1700. Al respecto, el informe considera que el Banco Central seguirá con su esquema de ‘crawling peg’ con una devaluación del 2% mensual. Además, para fines de 2025 el valor del tipo de cambio oficial podría llegar a $2488, según estima el consenso de consultoras entrevistadas.

En el caso de la cotización paralela del dólar, los economistas proyectan que podría llegar a $2380 a fines de este año. A su vez, la depreciación de la moneda seguirá en 2025, en línea con la inflación. A fines del año próximo, el dólar paralelo llegaría a $3425.

“En el marco del crawling peg del tipo de cambio oficial al 2%, la ganancia de competitividad-precio por la devaluación de diciembre, se habrá erosionado. Estimamos que el tipo de cambio real retrocedería a niveles semejantes a los de septiembre. Así, es esperable una nueva corrección del dólar oficial”, dijo Sala. “No está claro que sea una aceleración del crawling, un salto discreto o una modificación en el esquema del dólar exportador. Si bien puede tener un nuevo impacto en precios, lo estimamos menor a los anteriores, pero no habilita una desaceleración”, completó.

La especialista también sostuvo que resta ver si con la entrada de dólares provenientes de la cosecha, la corrección de los precios relativos y la cuestión fiscal, el Gobierno planteará un plan de estabilización tradicional. “La dolarización no termina de ser descartada, pero asumiendo que se posterga en pos de una unificación cambiaria, podrá esperarse una nueva corrección del dólar oficial ante la liberación de las restricciones. No esperamos una suba hasta los niveles de los paralelos, pero sí a niveles que permitan mantener un saldo positivo en la cuenta corriente”, contó.

La inflación, entonces, podría converger a valores de un dígito hacia fin de año, consideró Sala, pero aclaró que el primer semestre dejará un elevado número anual que, en sus observaciones, estaría más cerca del 400%. En esa dinámica, la economista proyecta un dólar oficial que se aproximaría a $3600, el doble de lo que plantea LatinFocus.

Respecto del PBI, hay varios factores que se suman para las proyecciones del informe: la depreciación del peso y la caída del consumo, que impactan en el retroceso de la actividad, el superávit fiscal de enero, y la acumulación de dólares por parte del Banco Central para fortalecer las reservas. Teniendo esto en cuenta, se observa una posible contracción del 2,4% en el PBI de 2024, frente a la proyección del mes pasado, que estimaba un número apenas menor, del 2%.

“Me parece que puede darse tranquilamente ese pronóstico. Incluso la caída puede ser unas décimas mayores”, opinó Giacoia. A esto agregó que la cosecha de este año puede impactar positivamente, sobre todo en comparación con la sequía de 2023. “Sacando este sector, la contracción sería de cinco puntos”, aclaró.

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