Nuevas críticas a la idea de cancelar la deuda con el FMI
Los economistas Claudio Loser y Osvaldo Ferreres coincidieron en desaprobar la medida que el Gobierno tendría en estudio; Alberto Fernández volvió a defenderla
El ex funcionario del Fondo Monetario Internacional (FMI) Claudio Loser sostuvo hoy que cancelar anticipadamente toda la deuda que la Argentina tiene con ese organismo internacional por 15 mil millones de dólares es "gastar municiones innecesariamente", y consideró que tal decisión representa para el país "un sacrificio importante".
"Creo que la Argentina hizo bien en ir pagando hasta ahora en forma y religiosamente sus obligaciones, y podría seguir haciéndolo. El problema es que son fondos que para la Argentina implican un sacrificio importante. Si se quiere pagar de una vez es realmente gastar municiones innecesariamente", afirmó Loser.
Al respecto, el economista Orlando Ferreres hoy coincidió en que "es una jugada muy arriesgada, que no estamos en condiciones de poder hacer".
Según Ferreres, "si la hiciéramos, el resultado podría ser peor que mantenernos en la situación actual".
"No es financieramente viable"
Al ser consultado por radio Mitre, el ex funcionario del Palacio de Hacienda consideró que "es mejor arreglar ahora" con el FMI, ya que la otra opción, dijo, la de pagar toda la deuda, "financieramente no" es viable, "ni aún en cuotas".
El economista evaluó que aún con la propuesta de quita, "hay que pagar bastante todos los años".
Según dijo Ferreres, aunque el Fondo renueve los vencimientos y solo haya que pagar intereses, "esto requiere alrededor del 3,7 por ciento de superávit primario, en algunos años 4 y, aun así, en algunos años faltan 1500 millones de dólares, por ejemplo en 2005".
Sostuvo que recurrir al superávit, además de las reservas, para pagar la deuda "tiene su lógica", pero insistió en preguntarse "si va a alcanzar".
Dijo que "este año, como no pagamos nada a los bonistas, hay unos 3500 millones de dólares que quedaron disponibles, pero también estamos aumentando los gastos -advirtió-, así que ese superávit primario se va a ir achicando un poco".
Por su parte, el economista de Ecolatina Ricardo Delgado sostuvo que el Gobierno no cancelará la deuda con el FMI a través de un pago único, sino que estimó que "recortará vencimientos" para achicar el pasivo a un plazo menor.
Delgado aclaró que hasta no conocerse la "letra chica" es imposible determinar si tiene chances de prosperar.
Si bien no se atrevió a considerar que sería prudente irse del Fondo, el economista aclaró que tampoco comparte "las visiones apocalípticas de algunos economistas, que plantean el regreso a situaciones desgraciadas de la Argentina como la hiperinflación", en caso de que se echara mano de reservas para afrontar los vencimientos con el organismo multilateral.
Nueva defensa
A pesar de las críticas que cosechó el proyecto de cancelar la totalidad de la deuda con el FMI, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández volvió a defender la iniciativa del Gobierno.
"No es algo nuevo lo que estamos planteando sino que es lo que hemos venido haciendo", explicó Fernández en declaraciones formuladas desde Madrid a la radio La Red.
Fernández reiteró que "ha habido una decisión muy clara de ir bajando nuestra deuda con los organismos internacionales y no hacerlo de modo irresponsable".
"Lo hicimos con toda la responsabilidad que nos permite contar con una reserva", explicó el jefe de Gabinete, al detallar que "las reservas se incrementaron en más de un 100 por ciento".
Fernández defendió la idea de "desendeudamiento" que estudia el gobierno al señalar que "la condición de deudor condiciona mucho nuestros proyectos porque las auditorías del Fondo se convierten muchas veces en verdaderas intervenciones en la economía".
"Si queremos desembarazarnos de eso, lo tenemos que hacer cumpliendo con nuestras obligaciones tan pronto podamos", enfatizó el jefe de Gabinete.
En este sentido, Fernández indicó que en los dos últimos años la Argentina "ha reducido su exposición ante los organismos en 9.000 millones de dólares" y esto "se ha hecho con un esfuerzo fiscal importante, pero con mucha seriedad".
Fuente: DyN y Télam