Vibrantes y competitivos: el auge de los negocios de internet en los mercados emergentes
En Asia y América Latina compañías locales y regionales dominan el comercio electrónico
- 5 minutos de lectura'
Hace una década la expansión sostenida de los gigantes de internet estadounidenses prometía el dominio mundial. Con su vasto mercado local aportándoles economías de escala, empresas como Amazon, PayPal y Uber parecían destinadas a monopolizar las pantallas de todos, desde la gente encantadora de California hasta los granjeros del Kalahary. Hoy Estados Unidos aún domina la industria tecnológica global, definida en sentido general, representando un 71% del valor de mercado de las firmas que cotizan en Bolsa. Aún así ha emergido un patrón diferente en la parte de la industria tecnológica que se concentra en proveer servicios de Internet a consumidores. Aquí la actividad es más dispersa y menos estadounidense. La tendencia se ha visto destacada este año por una sucesión de salidas a la Bolsa de firmas de Internet de mercados emergentes.
En vez de unos pocos monolitos se han formado tres categorías diferentes de negocios. Usando una taxonomía definida inicialmente por Asia Partners, una compañía de inversiones, se puede definir al primer grupo como las plataformas globales. Éstas siguen dominando en servicios donde se requiere una presencia física mínima, en particular en las búsquedas, las redes sociales y la computación en la nube. Gigantes como Alphabet y Facebook (ahora Meta) generan poco más de la mitad de sus ventas fuera de Estados Unidos y se cuentan entre los negocios tecnológicos más internacionales.
Una segunda categoría se ha vuelto importante en algunos lugares: el campeón nacional protegido. Lo gigantes tecnológicos chinos están ansiosos por expandirse al extranjero, pero sus mercados locales rentables en gran medida están cerrados a la competencia internacional y sujetos a una guía de mano cada vez más dura por parte de su propio gobierno. Este modelo protegido de tecnología se está volviendo popular en otros países autoritarios. Rusia ha promovido grupos locales en comercio electrónico y fintech y en el último año ha reprimido la actividad de firmas de Silicon Valley.
El tercer tipo digital -los héroes locales- prevalece en gran parte del resto del mundo. En Asia y América Latina compañías locales y regionales en muchos casos dominan el comercio electrónico, los juegos, los pagos digitales, los viajes compartidos, la entrega de alimentos y otros servicios basados en aplicaciones. Entre los ejemplos del sudeste asiático se incluyen Sea, Grab y GoTo; Corea del Sur tiene Kakao y Coupang; y la Argentina tiene Mercado Libre. En la india entre los gigantes se incluyen Reliance y Tat que buscan promover súper aplicaciones que proveen una variedad de servicios al mismo tiempo que crecen grupos especialistas, tales como Zomato, una firma de delivery.
Típicamente estas firmas operan en mercados donde es útil estar en tierra o donde los gustos locales son lo que importa. En el sudeste asiático las cadenas de provisión son altamente descentralizadas premiando el conocimiento local. En fintech las diferencias regulatorias hacen más difícil prosperar para grupos internacionales. La actividad está en auge. La Interface de Pagos Unificadas de la India, un sistema que conecta bancos y firmas no bancarias para hacer pagos baratos e inmediatos, registró transacciones por valor de alrededor de US$100.000 millones en octubre, más de cuatro veces el monto en el mismo mes hace dos años. Mynt, una startup que provee pagos y créditos móviles, acaba de convertirse en el primer unicornio filipino, lo que significa que está valuado por encima de US$ 1000 millones.
A estos negocios los ha ayudado la gran disponibilidad de capital, especialmente al buscar los inversores globales alternativas a China, donde la represión a las empresas tecnológicas de Xi Jinping significará menores ganancias. De los US$342.000 millones gastados en la compra de firmas tecnológicas de mercados emergentes en lo que va del año, 71% provino de economías fuera de China, lo que es el porcentaje más elevado en 11 años. Compañías tecnológicas de mercados emergente fuera de China emitieron US$53.000 millones en mercados de bonos en lo que va de 2021, más del doble del récord anterior. Grupos de capital de riesgo que en un tiempo se concentraban en Estados Unidos y posiblemente China recorren el planeta en busca de startups.
El éxito del tercer tipo de firmas de Internet es alentador. Aumentan la competencia e innovan para resolver problemas locales, tales como hacer el mapa de ciudades sin propiedades registradas. En contraste con las firmas estadounidenses y chinas no cargan con antecedentes geopolíticos y están creando centros de desarrollo de software e inversores experimentados en todo el mundo que pueden llegar a crear una nueva generación de startups. Los fondos de jubilación locales ya no tienen que invertir en Wall Street para obtener exposición a la economía digital.
Inevitablemente hay riesgos. Algunos países pueden sentirse tentados de proteger a sus héroes locales de la competencia o limitar cuánto pueden afectar los intereses establecidos locales gente de afuera. El conocimiento experto local puede no funcionar bien fuera de su ámbito. Los mercados de capitales pueden ser duros -los precios de las acciones de Paytm de la India, una firma de pagos, cayeron luego del fracaso de un intento de lanzamiento en la bolsa el mes pasado- y las tasas de interés en alza harán más caro el capital. Cuando la oferta de capital se seque los grupos que aún tienen dificultades para obtener ganancias pueden encontrarse en problemas.
Aún así se han reducido las probabilidades de un ejército global de usuarios de celulares que usen un conjunto de apps idénticas en sus pantallas. En cambio debiera florecer la variedad y eso es bienvenido.
Traducción de Gabriel Zadunaisky