Recursos Humanos: recalcular el presente para planear el futuro del empleo

En la Argentina, el término "recursos humanos" está atravesado por dos líneas bien marcadas: una coyuntura caliente, a veces con conflictividad , y un largo plazo en el que será obligatorio adaptarse a los cambios tecnológicos para sobrevivir. En un evento organizado por LA NACION , representantes de los sectores privado y público debatieron sobre los cambios en el trabajo y sobre el rol de los líderes y la dirigencia en el contexto actual y en el futuro.

El evento, moderado por los periodistas José Del Rio y Carla Quiroga, comenzó con una charla de Daniel Cerezo, fundador de la fundación Creer Hacer y exgerente de Felicidad de la marca de alpargatas Páez. Explicó por qué el término "recursos humanos" no es el correcto para hablar del área que debería encargarse del bienestar de las personas: "Los hombres y las mujeres no son recursos, son seres", dijo. En todo caso, propuso, un nombre más apropiado para el sector sería "Humanidades". Advirtió que, a nivel global, el 85% de las personas no se siente comprometida con su ámbito laboral.

Romina Cavanna, vicepresidente de Recursos Humanos de Pan American Energy , contó sobre el programa de bienestar que lleva adelante en su compañía: a través de diferentes propuestas -algunas en horario laboral y otras por fuera- los empleados de la organización pueden explorar pasiones como la música y la fotografía. "Uno de los temas clave de nuestra área es la integración y lograr volver a un rasgo cultural único para cada compañía", destacó.

¿Qué define que una empresa sea un buen lugar para trabajar? Esa fue la pregunta que respondió Andrea Avila, CEO de Randstad. Señaló que, si bien el sueldo es el primer incentivo a la hora de elegir el lugar donde trabajar, no es el factor que retiene, sino el que expulsa a los empleados de una organización. "Una vez dentro, empiezan a jugar otro tipo de factores que tienen que ver con el ambiente de trabajo, el desarrollo de la carrera profesional y un buen paquete de beneficios, no es solamente el dinero lo que nos mueve", dijo.

Siguió un panel de referentes del área de Recursos Humanos de tres empresas. Los invitados fueron Gonzalo Bergé (Despegar); Claudio Pasqualini (Banco Provincia) y Mariana Talarico (Natura). Pasqualini se refirió al cambio en una industria tradicional como la financiera: "Históricamente, en nuestro sector hay estructuras muy verticales, pero vamos hacia metodologías de trabajo colaborativas, ágiles y donde se busca empoderar a personas que no tienen un rol de liderazgo jerárquico", apuntó.

Por su parte, Bergé habló desde el punto de vista de una organización "joven" e hija de la tecnología. "Mantenernos ágiles es crítico para adaptarnos a las necesidades de los consumidores que vienen", resaltó, y añadió que, dentro de la compañía, es muy útil tener presente el propósito, que definió como "crear experiencias de viajes que enriquecen la vida de las personas". Talarico, en tanto, aseveró que Natura no le presta demasiada atención al título de las personas porque, en su afán de construir diversidad, prefiere ponderar más las habilidades blandas y el liderazgo.

Federico Barni, director ejecutivo de Navent -la compañía dueña del portal de búsqueda online ZonaJobs- fue quien cerró el primer bloque del evento. Resaltó cuáles son los perfiles más demandados en las búsquedas laborales: los comerciales y los relacionados con la tecnología. También habló sobre el contexto actual: "En las semanas de esta 'mini crisis' tuvimos cierto nivel de incertidumbre: nuestros clientes se mostraban dubitativos a la hora de seguir contratando, pero ahora ya tenemos un nivel de publicaciones similar", señaló.

Luego de un descanso, el salón del hotel Four Seasons recibió nuevamente a los invitados, pero esta vez en el escenario había prototipos de robots. Marcela Riccillo, doctora en Ciencias de la computación de la Universidad de Buenos Aires y especialista en Robótica e Inteligencia Artificial (IA), echó luz sobre temas de innovación. Dijo que el avance en IA no es tan grande como el que se comenta y dejó un mensaje optimista: "Esto es una inteligencia diferente, pero no supera a la humana, porque la persona tiene creatividad, sentido común y siente amor, y eso la máquina no lo puede hacer".

Más adelante llegó otra sorpresa: con la música de Bella Ciao, el canto partisano que se popularizó en el último tiempo con la serie española La casa de papel , el experto en management y profesor de la UTDT, Andrés Hatum, analizó los personajes del "robo del siglo" como si fueran empleados de una organización. Aprobó al Profesor -dijo que es el CEO ideal-; a Nairobi, por ser una gran jugadora en equipo, y a Tokio y a Rio, aunque con reservas por su inestabilidad emocional. Les bajó el pulgar a Arturo, por su intento de ser líder a pesar de su ineptitud; a Berlín por su megalomanía, y a Denver, por sus pocas luces.

Otro panel de líderes del área de Recursos Humanos tuvo como protagonistas a Florencia Díaz (Coca-Cola), Rafael Bergés (Banco Galicia) y Diego Crespo (Red Hat). Díaz habló de las nuevas oficinas de la compañía y explicó cómo con un simple cambio -uno de los más altos cargos se sienta en una mesa del espacio abierto- ya modificó el modo en el que se relacionan los empleados con la jerarquía, ya que esa disposición invita a que quien quiera se siente con el ejecutivo y a que haya diálogos más abiertos.

Bergés dio consejos para "ser más empleable": destacó la capacidad de trabajar de manera colaborativa y de animarse, y eligió su término preferido, "coraje". En tanto, Crespo señaló que hay empleados dentro de la organización en la que trabaja que tienen tatuado el logo de la empresa. "Hay una necesidad de trasladar el poder de decisión a aquellos empleados que están más cerca del cliente para poder responder con agilidad y claridad", resaltó.

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