McKinsey compró una agencia de marketing digital y expande sus servicios
La compañía de consultoría estratégica sumó a su staff al equipo digital de la firma local Lobo, especializada en campañas online y e-commerce; la demanda de servicios profesionales viene en alza
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Ajeno a la crisis y la falta de inversiones que atraviesan otros rubros, el sector de servicios profesionales sigue consolidándose y registra operaciones de compra de empresas. La compañía de consultoría estratégica McKinsey anunció la adquisición de la agencia local de marketing digital Lobo, una transacción que se enmarca en la estrategia global de la firma de sumar nuevos servicios profesionales a su oferta.
“La transformación digital está impulsando la demanda de consultoría en la región, en un contexto de crecimiento de las start-ups y los unicornios”, señaló a LA NACION Francisco Ortega, managing partner de McKinsey para la región hispana de América Latina (que incluye las operaciones de la firma en la Argentina, Uruguay, Chile, Colombia, Perú, Ecuador y otros países de Centroamérica). “El comercio electrónico sigue creciendo en forma acelerada y representa una gran oportunidad a futuro”, justificó.
Lobo es una agencia boutique de marketing digital fundada por Facundo Bonfigli y Lucas Chimmalez (exintegrantes de Restorando, Mercado Libre y Garbarino), con la que McKinsey ya venía trabajando desde 2018 en proyectos digitales para clientes locales y regionales de los sectores de la banca, seguros, e-commerce y retail. “La compra forma parte de nuestra estrategia global de continuar sumando capacidades y habilidades que permitan acompañar a los clientes en sus procesos de transformación”, señaló Ortega. El staff de 30 personas de la agencia pasará a integrar las filas de la oficina de Buenos Aires y trabajará dentro del hub de marketing digital regional que tiene montado la firma. El monto de la operación fue mantenido en reserva.
La pandemia del Covid-19 aceleró la demanda de servicios profesionales en 2020 y 2021 no solo en la región sino también en la Argentina, por los cambios en los patrones de conducta de los consumidores que se volcaron al mundo digital, destacó el ejecutivo. “La transformación es un proceso que lleva años y requiere cada vez mayores capacidades, en un contexto donde la demanda de talento es cada vez más difícil de construir internamente. En ventas digitales, esto toma mayor valor”, resaltó.
Para el universo de las consultoras, la oportunidad de crecer en servicios profesionales va más allá del contexto macroeconómico de cada país en la región. “Una institución financiera está enfrentando hoy el mismo desafío estructural esté en la Argentina, Colombia o Chile. La ventana de tiempo para transformarse y actuar no es tan distinta, más allá de que el contexto de cada país sea diferente”, señaló.
Ante la consulta de LA NACION sobre el escenario de negocios que observa para el mercado local este año, Ortega indicó que “el contexto de la Argentina es desafiante, pero dicho eso hay un panorama de transformación digital y de sustentabilidad que de alguna manera excede la situación particular. La disrupción tecnológica está ocurriendo y va a ocurrir en la Argentina. Podremos llegar un poco después, pero está pasando”.
Tras la compra del equipo de Lobo, en McKinsey no descartan adquirir otras firmas en la región. “Estamos impulsando la transformación digital de nuestros clientes y seguramente seguiremos sumando gente talentosa al equipo”, respondió el managing partner. Respecto del entorno competitivo en el sector de consultoría y servicios -donde las principales firmas también entraron en la carrera de expandir su campo de acción-, indicó que “lo más importante hoy es la capacidad de atraer, desarrollar y retener talento distintivo. Ahí está la competencia central”.
La oficina local de McKinsey opera en el país hace 30 años y emplea a más de 100 personas. Su trabajo principal hoy en consultoría pasa por procesos de transformación del modelo de negocios y adquisición de habilidades digitales para grandes empresas.