La generación Z y el ahorro: Dueños de su futuro (y de su dinero)

Cruzar el umbral que separa la vida adolescente del mundo de los adultos comienza quizás, con las primeras decisiones económicas. ¿Cuánto puedo gastar?, ¿mejor gastarlo o ahorrar para otro propósito?, ¿efectivo o tarjeta? . Y, claro, la resolución mayor que tiene que ver con empezar a invertir y evaluar las diferentes formas de hacer crecer el capital disponible por mínimo que sea en el bolsillo de un joven de la generación Z o centennials.

“Algo llamativo de esta generación es su tendencia a ser emprendedores o sus propios jefes: más de la mitad dice que quiere tener su propia compañía y casi dos tercios de la generación Z ya es parte de una”, arranca un informe realizado por la tarjeta Visa sobre cómo es el manejo del dinero en la generación Z. “Esto los hace dueños de su dinero y de la forma en la que pueden invertir”, remarca el informe que se publicó recientemente bajo el título Tendencias del consumidor de la generación Z.

Los resultados de un trabajo de investigación encarado conjuntamente por Junior Achievement y el Centro de Evaluación de Políticas basadas en la Evidencia (CEPE) de la Universidad Di Tella, con el apoyo del BBVA, aportan también datos en esa línea. “Siete de cada de diez estudiantes creen que la asignatura escolar más relevante para su futuro es la educación financiera”.

Las personas de la generación Z nacieron entre mediados de los 90 y la primera década del 2000. En un estadio un poco más temprano, en la adolescencia, la conciencia de ahorro por objetivos también empieza a despuntar. “Según las investigaciones que realizamos en Youniversal en el target, encontramos que los centennials de clase media buscan ahorrar principalmente para tecnología, recitales y moda”, revela Ximena Díaz Alarcón, cofundadora & CEO de Youniversal, una consultora regional especializada en investigación y tendencias. “Un 57% de los varones entre 13 y 19 años ahorra para comprar tecnología y un 75% para moda. Ocio y recitales es más transversal, constituyendo el motivo de ahorro para el 35% de ambos géneros”, detalla la especialista de Youniversal.

En el camino de “hacerse grandes” los adolescentes muestran saber la ruta, aunque -claro- no apartarse lleva un tiempo. Los resultados de la encuesta de Junior Achievement -con jóvenes de entre 14 y 19 años- revelan que “el 78% de los estudiantes dice tener la costumbre de ahorrar; aunque solo el 48% afirma que lo logra mantener y el restante 30% reconoce que lo gasta antes de lo planificado”.

En cuanto a las motivaciones que los impulsan a ahorrar el podio se lo llevan “un objetivo concreto, como realizar un viaje o adquirir cierto bien material para el cual se requiere una suma de dinero relativamente importante. Otra motivación es darse “gustos”, más vinculados a tentaciones y actividades puntuales, como pagar salidas con amistades”, resume la investigación “Los adolescentes y las finanzas”.

Momento de pagar

En cuanto a la forma en que concretan sus compras y pagos, la información también los ubica en un lugar diferente al de generaciones que los anteceden. “Como la generación Z nació en un mundo digital, esperan que las marcas ofrezcan experiencias de pago fluidas en diferentes canales, como el digital y el celular”, subraya Visa . Según el estudio realizado por Lógica Research para la empresa emisora de tarjetas de crédito, “de cada diez personas de la generación Z, seis eligen los dispositivos móviles como el método más popular para hacer compras digitales”.

“Esta generación es reconocida por su confianza en las soluciones digitales”, remarca Arturo Planell, gerente general para Visa Región Andina. “Esto pone en evidencia la necesidad de adaptación y digitalización de todas las industrias. En este panorama es fundamental que grandes, medianos y pequeños empresarios fortalezcan sus alianzas con actores que ofrecen acceso a medios de pago digitales”, explica Planell y agrega que “la adopción de estas soluciones sin duda será un elemento clave para cumplir con las altas expectativas que nos presentan las nuevas generaciones de consumidores”.

Los resultados del trabajo de investigación ponen en blanco sobre negro sus preferencias financieras: 51% usa billeteras digitales, 22% tarjeta de debito, 17% tiene una cuenta bancaria y 10% posee tarjeta de crédito.

Los gastos más frecuentes -según los datos recabados por Youniversal- se pagan cada vez más con billeteras virtuales, alcanzando entre el 69 y el 75%. “Usan tarjetas de crédito extensiones de los padres pero crece la adquisición de tarjeta propia desde los 13 años en el segmento de nivel socioeconómico alto y bancarización temprana”, dice Díaz Alarcón. Agrega que las billeteras y fintechs más elegidas son Mercado Pago, Naranja X, Ualá y Brunbank.

Según Javelin Strategy & Research, “la generación Z adoptó rápidamente las tarjetas de débito y podría pasarse a las tarjetas de crédito más pronto que las generaciones anteriores gracias a la disminución del uso de efectivo. Las plataformas de pago P2P propusieron una alternativa al efectivo, lo que las posicionó como una puerta de entrada de gran influencia para la generación Z”.

¿En qué invierten?

“El 80% de nuestros clientes son inversores que se están iniciando o ahorristas que no tienen experiencia o no quieren ocupar su tiempo en gestionar sus inversiones”, explica Nicolás Galarza, CEO y fundador de la plataforma, que a través de su producto Quiena Automática permite abrir una cuenta de inversión en los Estados Unidos.

“Los instrumentos más utilizados por los sub30 fueron ETF de bajo costo que permiten invertir en un portafolio diversificado”, cuenta Galarza y enumera los preferidos: VTI (acciones de Estados Unidos), XLE (energía -petróleo y gas), GLD (oro físico), SLV (plata física), VIG (acciones que pagan dividendos), IWM (empresas pequeñas con mayor potencial de crecimiento) y VNQ (bienes raíces).

Los jóvenes asumen más riesgo y naturalmente tienen una variable a su favor para poder hacerlo. “La diferencia principal entre los sub30 y los mayores de 40 o 50, está en el tiempo que tiene cada uno para esperar la recuperación en caso de la caída de una inversión.

En el mismo sentido aporta el informe de VISA “la generación Z tiene una gran atracción por las criptomonedas. El reporte revela que, de quienes tienen inversiones, 1 de cada 4 invierte en cripto y 1 de cada 10 en NFT. Incluso, el 59% de los encuestados de la generación cree que podría volverse rico por invertir en cripto”.

Los jóvenes asumen más riesgo y naturalmente tienen una variable a su favor para poder hacerlo. “La diferencia principal entre los Sub 30 y los mayores de 40 o 50, está en el tiempo que tiene cada uno para esperar la recuperación en caso de la caída de una inversión.

“Más allá de que los jóvenes tienen años o décadas para esperar una recuperación, la persona más joven va a estar más propensa a correr más riesgos, simplemente porque tienen menos que perder y tiene más tiempo para recuperar ese capital o para generar más”, expresa Galarza de Quiena.

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