El secreto del perdurable atractivo de Lego
Es un secreto que se oculta a plena vista para cualquiera que alguna vez haya unido ladrillitos de Lego
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En 2008 escribí un artículo acerca de un lugar oculto bajo el viejo hogar de uno de los fundadores de Lego, que ahora es un pequeño museo privado llamado la Casa Lego de Ideas, en la ciudad de Billund, en Dinamarca. Lo llame la “Bóveda Secreta de Lego” porque contenía todos los juegos de Lego jamás hechos. Contenía tesoros asombrosos, pero uno de los juegos -que mi padre nos dio a mí y a mis hermanos para la Navidad de 1979- realmente me llenó los ojos de lágrimas.
Esos viejos juegos de Lego, lo advertí entonces, no eran sólo ladrillos de plástico en una caja sino portales del tiempo a días olvidados. El artículo se volvió viral online y pronto -según la responsable de la Casa Lego de Ideas, Jette Orduna-, canales de tv y diarios de todo el mundo volaron a conocer la “bóveda secreta”. Orduna comentó que todos los periodistas tuvieron la misma reacción. “No importa quiénes son; vienen y al final se emocionan”, contó ella.
Esta demanda sin precedentes de visitar la bóveda y la reacción frente a ella fueron dos de las cosas que hicieron que el ex CEO de Lego y presidente de la fundación Lego, Kyeld Kirk Kristiansen, decidiera que la compañía necesitaba un lugar para que todos fueran y sintieran el poder de la experiencia de Lego de primera mano. Sin embargo, el propietario de la compañía de tercera generación -nieto de Oke Kirk, hijo del fundador Godtfred Kirk- quería crear algo más que un museo nostálgico o una casa de diversiones llena de modelos de Lego. Quería que este lugar fuera “el hogar de los ladrillos”, representando físicamente todo aquello en lo que cree la compañía. Kristiansen piensa que los ladrillos coloridos trascienden su simple naturaleza de juguetes. Y así, la Casa Lego se convirtió en su misión. Se involucró en todos los aspectos de su creación porque cree que es su legado y un testimonio de cómo estos ladrillos son mucho más que simples piezas de plástico. Para él, todo tiene un propósito más elevado y la casa del ladrillo tenía que mostrarlo.
Para Kyeld Kirk Kiristiansen, los ladrillos Lego están íntimamente vinculados a los recuerdos más preciados de cientos de millones de personas en todo el mundo por un motivo, uno que es aún más importante que la felicidad de jugar con un juguete para construir. Este propósito superior nos ayuda a convertirnos en adultos al transformarnos, junto con nuestras mentes, espíritus y nuestra visión del mundo mientras jugamos. Es un secreto que se oculta a plena vista para cualquiera que jamás haya unido ladrillos Lego.
Ese secreto es el aprendizaje a través del juego
La fundación Lego fue creada en 1986. Apunta a crear un futuro en el que aprender a través del juego empodera a los niños para volverse creativos, comprometidos y para ser personas dispuestas a aprender toda la vida. Con su propiedad del 25% del grupo Lego, la fundación Lego ha contribuido a financiar programas que ayudan a que niños de todo el mundo aprendan y desarrollen capacidades holísticas. La organización nació de la teoría y la práctica de aprender a través del juego, un método estudiado científicamente que dice que los seres humanos aprenden más efectivamente, no memorizando, escuchando o viendo a otros hacer cosas, sino jugando.
Según Tina Holm, jefa de investigaciones de la fundación Lego, la organización filantrópica ha trabajado más de cinco años con investigadores académicos de todo el mundo -tales como el laboratorio de medios del MIT en Cambridge, Massachusetts- para codificar esta teoría, trabajo en curso que aún no se ha completado. Este modelo de aprendizaje creativo, al que ellos se refieren como el “viaje”, atraviesa tres fases distintivas: una fase de conexión que hace curiosas a las personas de todas las edades y las motiva; una fase de exploración en la que la gente prueba cosas; y una fase de transformación en la que la gente reflexiona y se comunica.
Kristiansen, que está convencido de que Aprender A Través del Juego es el centro mismo de la experiencia Lego, quería que esta metodología fuera central al hogar del ladrillo y su ética guía. En realidad, la fundación Lego se sumó al proyecto para ayudar al equipo de diseño de Casa Lego a integrar el Aprendizaje a Través del Juego en todo. Y gracias a este enfoque, todo encajó perfectamente, materializando la visión de Kristiansen del Hogar del ladrillo.
Cómo aprenden y crean los humanos
El modelo de Aprendizaje a Través del Juego se basa en cinco capacidades de desarrollo -social, creativa, cognitiva, emocional y física- y el proceso de aprendizaje de tres fases de conexión, exploración y transformación. Las cinco capacidades de desarrollo en realidad sirvieron para organizar el espacio arquitectónico, mientras que el proceso de aprendizaje guió el diseño de todas las experiencias al interior de la Casa Lego y, lo que es más importante, las reglas que gobernaron el trabajo creativo de su equipo de diseño.
Para explicar mejor cómo funcionan las tres fases -conectar, explorar y transformar- quiero volver a la mañana de la Navidad de 1979, cuando mis hermanos y yo recibimos el explorador de la galaxia Lego y otros juegos similares de LegoLand Espacio.
En la fase de conexión instantáneamente quedé atrapado por el modelo representado en la caja. Es lo que el grupo Lego llama el momento de asombro. Mi mente se maravilló con la nave espacial asombrosa, la estación lunar, los pequeños astronautas con sus rostros sonrientes. Luego abrí la caja y vi las cajas redondas transparentes con todos esos ladrillos azules, grises y amarillos, más un gran folleto de instrucciones. De niño, este fue el momento en que entendí que el objetivo de este juego era construir esa escena -fue el “ahora lo entiendo”- y lo que se suponía que debía hacer con él. Es lo que el equipo de la Casa Lego refiere como el momento de comprender mi rol.
La fase de exploración empieza con algo llamado la primera diversión. Esto sucedió cuando abrí el folleto instructivo y comencé a seleccionar y clasificar las piezas que necesitaba reunir para la cabina de la nave, imaginando cómo cada ladrillo contribuiría al juego terminado. Luego de ello, se impuso la fase de inmersión. Quedé tan absorbido por lo que hacía que todo alrededor desapareció. Mi cerebro funcionaba a toda velocidad, interpretando las instrucciones de construcción mientras usaba mis ojos y manos para encontrar piezas específicas, uniéndolas del modo correcto. A medida que completaba segmentos de la nave tuve lo que el equipo de la Casa Lego categorizada como momentos de “¿Ajá!”, en los que me detenía a reconocer los avances que estaba haciendo y advertir como todo comenzaba a cuajar.
Fijar conocimientos en nuestros cerebros
La fase de transformación es lo que nos hace crecer como seres humanos, la parte en la que todo se organiza en nuestra mente como conocimiento y capacidades. En este ejemplo comienza con el momento final, cuando terminé el modelo. Mi cerebro, después de todas esas incorporaciones y producciones, estaba satisfecho. Mientras sostenía el explorador de la galaxia en mis manos, abriendo y cerrando su cabina o su muelle de atraque, haciendo que un pequeño explorador entrara al muelle o colocando un astronauta en el pequeño puesto lunar, mi mente procesaba y reflexionaba sobre todo lo que había hecho. Inevitablemente los desafíos mentales y manuales de la experiencia de construcción se tradujeron en una sensación de pura alegría, que ayudó a integrar el conocimiento adquirido en mi ser. Esto es lo que el método llama la impresión duradera. Finalmente, está compartir: el mero hecho de articular conocimiento aprendido ayuda a clarificarlo para uno mismo. Según Holm, los estudios muestran que compartir con los demás ayuda a “fijar” el conocimiento en nuestros cerebros. Mis hermanos y yo alardeamos de nuestros logros -un explorador de la galaxia terminado- frente a los demás y a mi papá porque eso es lo que hacen los humanos.
Por supuesto que no tenía idea de que eso era lo que estaba sucediendo en mi joven cerebro hasta que llegué a la Casa Lego. Ahora, recordando este y muchos otros episodios, puedo ver cómo la lógica del modelo aprender a través del juego ha gobernado cada aspecto de mi viaje creativo en mi vida joven y adulta. Si usted analiza su propia experiencia jugando con ladrillos Lego o cualquier otra cosa puede ver como este modelo también se aplica a su vida.
Traducción de Gabriel Zadunaisky
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