Siguiendo al dólar, por ahora el oficial, y bien de cerca. Esa es la premisa que los precios de los autos 0KM siguieron en los últimos 12 meses. Esto implicó que los valores de lista mostraran en el último año un alza de casi 70%, según los datos de las concesionarias.
La información se desprende del Índice de Precios del Sector Automotor que publica la Asociación de Concesionarias de Automotores de la República Argentina (Acara), y estimó, más precisamente, a julio pasado, que los precios de los vehículos subieron en un año 69%, la inflación a nivel general aumentó un 42,4% y el tipo de cambio lo hizo un 68%.
Sin embargo, la devaluación del peso en el mercado oficial -actualmente ya en los $78 para la venta, por encima de los $72 de julio pasado- genera presión a las terminales para volver a actualizar sus precios de lista. En los últimos meses, los precios de lista vienen aumentando a un ritmo mínimo de 1% mensual con un pico en febrero de 3,4%, según los datos del Siomma. En junio y julio pasado, las alzas se aceleraron, y fueron de 2% y 2,9%, respectivamente.
En lo que va del año, el Índice de Precios del Sector Automotor suma un incremento de 14,05%, por debajo de la inflación general y también de la devaluación oficial del tipo de cambio. El gran salto de precio se dio luego de la devaluación post PASO. "Hoy no hay margen para subir más", afirmaron en las empresas ante la consulta de este medio por el atraso, pero en el contexto de la fuerte crisis de venta que generó la pandemia del coronavirus.
Los valores que manejan las empresas automotrices responden al tipo de cambio oficial, pese a las trabas que impuso el llamado "supercepo", que según varios economistas privados ya impulsó a muchas empresas a moverse al ritmo del contado con liquidación, lo que arrastró subas en los índices de precios mayoristas de julio (subió más de un punto y medio más que el índice de precios al consumido, lo que se conoce como la inflación en la Argentina).
La posibilidad de muchos argentinos con dólar cash de liquidar esas divisas en el mercado alternativo -a $132, según la cotización de ayer- impulsa algunas ventas de automóviles, hoy baratos en dólares. La tentación de hacer un adelanto en efectivo (usando la brecha) y sumarse luego a un financiamiento en largo plazo y bajas tasas en pesos es una buena opción para acceder a un auto, siempre según perfil y situación del cliente, cuentan en las concesionarias. "Comprar un auto hoy es una muy buena opción con relación a lo que siempre salieron en dólares", afirma a LA NACION, Hernán Dietrich, CEO del Grupo Dietrich.
"La gente debe saber que estamos en las últimas semanas de verdaderas oportunidades para el público", dijo Ricardo Salomé, presidente de Acara. "Una combinación de temas cambiarios, económicos y coyunturales, han hecho que estemos en un momento muy conveniente para tomar la decisión de adquirir un vehículo, eso en parte explica que agosto haya alcanzado el mismo nivel de julio, pese haber tenido un día hábil menos, y que se haya achicado la diferencia interanual, teniendo en cuenta que estamos en una coyuntura de pandemia", afirmó luego de difundir la caída anual de ventas de agosto, que llegó a 31,5%.
En 2013, año récord del sector, la Argentina tenía un cepo similar al actual. Ese año, se patentaron 955.023 vehículos en el país. Más allá de la burbuja, gran parte de esas compras estuvieron orientadas a los autos de lujo (importados), casi 50% más baratos en dólares.
Hoy, el faltante de divisas es más profundo. Por eso, el Ministerio de Desarrollo Productivo se anticipó y cerró un acuerdo con las terminales automotrices locales y Smata para limitar la cantidad de autos importados. Desde hoy a fin de año, se comprarán en el exterior 80.000 autos para llegar a un mercado proyectado de alrededor de 290.000 autos.
La cartera que conduce Matías Kulfas ya anunció que buscará mantener la composición actual de 26% autos nacionales y el resto importados. Si se incrementa la demanda local, en las empresas creen que deberán orientarse a vender autos fabricados acá (que en rigor, tienen alrededor de más de un 50% de su composición basada en insumos extranjeros). Sin embargo, en el Gobierno se comprometieron a evaluar ese flujo de importaciones otra vez en dos meses. En la Argentina, se producen autos sedanes y utilitarios, mientras que Brasil hace los chicos.
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