El Topo: la churrería furor de la costa abrió en Caballito y la gente hizo cola
En medio de la pandemia de Covid-19 abrió la sucursal número 12 de la churrería El Topo en Caballito. A pesar de ser el sexto barrio de la Ciudad con más infectados, los vecinos no tardaron en llenar las veredas de alrededor. Desde 1968, la familia Navarro abrió distintos comercios en la Costa Atlántica, Bahía Blanca y Capital Federal. No sólo es conocida por sus productos, sino porque en su logo tiene la palabra "churros" al revés.
A pesar de la cuarentena y las idas y vueltas para alquilar el lugar, una vez más El Topo inaugura una sucursal. El 5 de octubre abrió las puertas y desde la empresa familiar aseguraron que ya es un éxito en el barrio.
"Este fin de semana largo vendimos alrededor de 200 docenas", dijo Juan Navarro, segunda generación de la compañía familiar creada hace más de 50 años. Su padre, Hugo, y su tío, Cacho, abrieron una churrería en el barrio porteño de Belgrano.
El estar cerca de la Plaza Irlanda y ubicados en "la triple frontera", entre los barrios de Caballito, Flores y General Mitre, los ayuda a tener muchos clientes. Además, afirmó que la mayoría de los vecinos de la zona veranea en la costa y los conoce de toda la vida.
Sapiens! Quiero agradecerles por esta semana increíble. Sabemos que hay cosas que mejorar, sobre todo en tiempos. Teníamos un plan, pero gracias al Barba, se fue todo al demonio. Soy el primero en sufrir cuando las cosas no salen como sabemos hacerlas. Se hace camino al andar. pic.twitter.com/HDJ0fRadQx&— so??n?? El Topo (@churreriaeltopo) October 11, 2020
Asimismo, Navarro comentó como la tercera generación ya está involucrada en el negocio. Tanto su hijo de 14 años como sus sobrinos están trabajando y ayudando los fines de semana en los distintos locales. Todos, desde que son chicos, vivieron el proceso de la cocina y conocen más que nadie este alimento típico de su familia.
Lo que en su momento fue un Fiat 600, vehículo en el que hacían envíos y circulaba por la ciudad con sus números de teléfono, hoy son las redes sociales. Atraen clientes desde la cuenta @churreriaeltopo en Twitter que ya tiene más de 25.000 seguidores. Navarro es quien responde a los mensajes de quienes reclaman derechos de autor por los churros, a usuarios que se quejan de los productos veganos y a comediantes que critican los rellenos de roquefort, uno de los más tradicionales de la compañía.
El verano es la temporada baja de su negocio. Para activarlo abrieron la cuenta en Twitter. Al principio fueron 6000 seguidores, pero con las empresas de delivery y la viralización en redes lograron tener incluso más ventas que en las sucursales de la Costa.
Nuevos sabores, nuevas críticas
"Nosotros seguimos con las tradiciones, pero no escapamos a lo que la gente demanda. Hace 50 años lanzamos los churros con relleno salado, con roquefort, que siguen vigentes en la actualidad, y con el tiempo sumamos rellenos como la Nutella o la crema Oreo", detalla Navarro. De todos modos, nueve de cada 10 unidades que se venden llevan el convencional dulce de leche.
Llegan a todo el público inventando nuevas recetas. Recientemente crearon un producto especial para veganos con relleno de membrillo y anunciaron que habrá otra versión con dulce de almendras. Cómo todo en redes sociales, también tuvieron sus "haters" que los criticaron por "subirse a la ola del veganismo". Su community manager aclaró que el churro es un producto eminentemente vegano, porque solo lleva harina, agua, sal y aceite vegetal.
Krau, todo este tiempo estuviste comiendo masa de churros, los cuales es vegana de por si. Lo único, que le agregaste relleno que no comen los veganos. Que haya una opción relleno para veganos no te modifica la vida. No exageres, te lo pido por Dalma y Gianina. Saludos. https://t.co/q7H4qA2iVq&— so??n?? El Topo (@churreriaeltopo) March 5, 2020
Por parte, tuvieron más polémicas en otras redes y llegaron a la televisión española, desde donde arribó la última batalla twittera. "Eso no es un churro", dijo una usuaria española, y citó una foto de El Topo. Navarro le pidió que esté orgullosa de que los argentinos tomaron un producto y lo aggiornaron. "Vosotros cogieron de nosotros la patata, el maíz, el tabaco, el tomate, el chocolate, el oro, la plata y no nos quejamos tanto", remató.
"Me divierto contestando. Hay que ser rápido porque no hay imágenes", dijo y explicó que esta red genera una "constante dialéctica". "Como empresa no hay que quedarse callado y contestar de buena manera", aseguró.
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