Boom NFT. Qué hay detrás de los activos digitales que mueven millones de dólares
Los criptoactivos son las nuevas estrellas del mercado online
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El 11 de marzo probablemente quedará en la historia del mercado de los activos digitales. La obra The First 5000 Days del artista Mike Winkelmann se vendió a través de la casa de subastas Christie’s en más de US$69 millones. La gran novedad fue que la obra tiene su propiedad basada en NFT, un tipo especial de token que se aloja en la blockchain de la plataforma descentralizada Ethereum y garantiza su propiedad digital de valor único.
Los NFT (tokens no fungibles, por sus siglas en inglés) son un tipo de activos digitales diseñados para ser únicos e irrepetibles al modo que puede ocurrir con una obra de arte, con una estampilla, o con un disco de vinilo. Un archivo digital (imagen, texto, audio) puede ser replicado cientos de miles de veces, pero lo que tiene de distintivo y revolucionario un protocolo de NFT es que permite crear activos digitales únicos y de esa forma, susceptibles de ser coleccionables. “Esto es posible gracias al desarrollo de la tecnología Ethereum, que incorpora información adicional al archivo y deja registrado de forma permanente un sello digital o certificado que indica que ese es el archivo digital original”, apunta Juan José Méndez, Chief Brand Officer de Ripio.
Pocos días atrás, Playboy anunció la asociación con la plataforma NFT Nifty Gateway para ofrecer una gama de coleccionables digitales para los fanáticos en colaboración con los artistas Slimesunday y Blake Kathryn.
“Nuestra entrada en el arte de NFT se basa en la larga historia de Playboy de proporcionar una plataforma para artistas y autoexpresión creativa. Estamos encantados con toda la innovación y el acceso que puede traer blockchain y una gran parte de nuestro trabajo será apoyar a los artistas y coleccionistas”, dijo la compañía en su Twitter.
Justamente uno de los principales beneficios de un objeto coleccionable digital es la posibilidad de almacenar datos históricos de propiedad en blockchain. “Esto permite rastrear fácilmente al creador original, las piezas se autentican sin necesidad de una verificación externa. La propiedad de estos tokens también es inmutable, lo que significa que son los coleccionistas quienes poseen sus NFT”, resume Méndez.
Popularidad en ascenso
Si bien los NFT no son una novedad se fueron volviendo cada vez más populares entre los usuarios de criptomonedas y también entre artistas digitales, gamers, músicos y coleccionistas. Sus dueños pueden ganar dinero con ellos a través de la valorización de las piezas y las posteriores reventas.
Un NFT de una casa digital (The Mars House) se vendió recientemente por más de US$500.000. Es la primera venta de bienes raíces crypto del mundo y su comprador recibió clips en 3D de la casa NFT, que pueden monetizarse por ejemplo en un mundo virtual y usarse como hogar para un avatar. El fundador de Twitter Jack Dorsey, por ejemplo, puso a la venta el primer tuit cuyo comprador pagó 2,3 millones de dólares, una tarjeta coleccionable digital NBA Topshot de LeBron James se vendió por US$100.000. Otros ejemplos incluyen un jugador de la plataforma de terrenos virtuales Decentraland que decidió comprar 64 lotes y combinarlos en una sola propiedad. Otro inversor pagó US$222.000 para comprar un segmento de una pista de carreras digital de Mónaco en el juego F1 Delta Time. El NFT que representa la pieza de la pista digital permite al propietario recibir dividendos del 5% de todas las carreras que tienen lugar en ella, incluidas las tarifas de entrada.
Eso ha llevado a su popularidad a todo lo “coleccionable digital” desde arte hasta tarjetas deportivas y recuerdos musicales, así como videojuegos y eventos virtuales.
“La exclusividad es un pilar. Con NFT, se abre una nueva caja de pandora a un nuevo tipo de storytelling e interacción de las marcas, artistas, autores y creativos y con el consumidor. Tienen que ver con los recuerdos experienciales”, explica Nicolás Cavaliere, director de Innovación de Accenture.
El mítico jugador de fútbol americano Tom Brady está lanzando una empresa de coleccionables digitales llamada “Autograph” que venderá recuerdos criptográficos de íconos deportivos y celebridades. La idea de la plataforma es reunir a los nombres y marcas más emblemáticos del mundo con los mejores artistas digitales para idear, crear y lanzar NFT y experiencias innovadoras para fanáticos.
Marcas como McDonald’s, Louis Vuitton, F1 Racing y Nike están incursionando también en el mercado de NFT, así como también músicos y bandas. “Imaginemos la ultima gira de los Rolling Stones en Argentina. Si cada uno de los que tenía una entrada tiene además un ‘stone coin’ podría tener acceso exclusivo a contenido digital, souvenir o coleccionables digitales de la gira”, explican desde Accenture.
Piezas de arte de marca y coleccionables digitales creados con artistas, vinculados a NFT pueden provocar un compromiso sostenido de la marca para varios propietarios e incluso fomentar la cocreación. “Momentos culturales icónicos podrían ser acuñados y entregados a sus mayores fans para poseer a perpetuidad”, apunta Cavalieri.
Cuando Red Bull y Felix Baumgartner cautivaron a millones de personas con un salto en paracaídas desde el espacio, o cuando Prince realizó el show del entretiempo del Super Bowl de Pepsi, son la clase de momentos clave que esta tecnología podría capitalizar con enorme éxito.
Marcas de lujo
Las marcas de lujo están atentas a la revolución del NFT. Reacias en un principio al mundo digital –su fuerte siempre tuvo que ver con lo experiencial físico- los coletazos de la pandemia las hicieron repensar su relación con el e-commerce y con tecnologías como blockchain. Gucci confirmó recientemente que es “sólo cuestión de tiempo” antes de lanzar un NFT.
De hecho, la industria de la moda aún no se mete de lleno con la tendencia. Futures Intelligence Group –una compañía que asesora a las marcas respecto del uso de nuevas tecnologías- vaticina que por el momento, el uso que pueda hacer esta industria de estos bienes virtuales es acotada, ya que “la moda que se vende a través de NFT es moda como arte, y no necesariamente como una utilidad, que sí llegará con el tiempo”
La venta de vestidos y activos virtuales será una importante fuente de ingresos para las marcas en el futuro, sobre todo a medida que todo lo relacionado a mundos inmersivos gana terreno. El pronóstico es que sobre todo las grandes marcas de moda tienen una enorme oportunidad potencial allí, en el hecho de vestir –por ejemplo- avatares.
Un posible caso de uso podría ser la funcionalidad de una suerte de “armario 3D” que es la propuesta de una Neuno, una plataforma nacida en Sídney. La startup está trabajando actualmente con cinco casas de moda de lujo para lanzar NFT. “Queremos ser el armario 3D universal que se conecte a todo”, declaró su CEO, Natalie Johnson. ¿Que pasaría si alguien comprara el icónico vestido virtual de J Lo Versace en nuestro sitio? ¿Cuánto costaría?”, explicó a Vogue. Definitivamente una experiencia única y memorable.ß
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