Bienestar financiero. Por qué los inversores deben estar más alertas
Por la pandemia, ocho de cada diez argentinos dedicaron más tiempo a organizar sus ahorros y planificar su jubilación
- 5 minutos de lectura'
La sensación de inseguridad y de incertidumbre es uno de los tantos males que sembró la pandemia. Y en el plano económico y financiero de las familias esto se refleja en ciertos hábitos y conductas que no eran moneda corriente pre-Covid y ahora están a menudo sobre la mesa.
De acuerdo a una encuesta que hizo el grupo Schroders a escala global, “un mayor enfoque en el ahorro y el bienestar financiero serán algunos de los legados de la pandemia”. Se trata del “Estudio Global de Inversores” que se realiza anualmente en 32 países, incluida la Argentina. De los resultados locales se desprende que “el 82% de los inversores pasaron más tiempo pensando en su bienestar financiero y en reorganizar sus finanzas personales”, desgrana Pablo Albina, country head de Argentina y agrega que el impacto de estos nuevos hábitos “resulta más evidente en los planes de jubilación de la gente. Ocho de cada diez individuos no jubilados dicen querer ahorrar más para el momento del retiro”.
“El Covid-19 fue un llamado para los inversores a tener una visión más amplia de sus prioridades y a tratar de diversificar y asegurar sus inversiones financieras en áreas como la educación de sus hijos, su retiro, su salud, todas las cosas más preciadas de sus vidas. Hubo un cambio de paradigma profundo a raíz de esta crisis”, analiza Albina
En ese mismo sentido, Santiago Abdala, director de PPI asegura que en su trato cotidiano con los clientes “se nota una mayor propensión a analizar los riesgos que cada inversión conlleva y a buscar más asesoramiento para poder despejar dudas e inquietudes. Para muchos el ahorro fue de vital ayuda ante la caída económica del 2020”, remarca el ejecutivo.
“Los últimos 18 meses nos enseñaron que el futuro sigue siendo difícil de predecir y que un enfoque medido, coherente y paciente de la inversión, centrado en los objetivos a largo plazo y en los resultados probables, es el que probablemente sitúe a los inversores en una mejor posición”, aclara Albina de Schroders .
En el sector seguros individuales también se hizo mucho más evidente el temor a los imponderables que puede depararnos el futuro. “Los seguros de Vida y de Retiro tuvieron un claro aumento del interés de los consumidores a partir de la pandemia. Ante la experiencia concreta de la vulnerabilidad, se comenzó a buscar herramientas de protección y cobertura económica por si el sostén del hogar se viera afectado”, aporta María Inés Guzzi, presidente de Avira, la asociación que nuclea a las aseguradoras de vida y retiro. “Se estima un aumento de 30% de las consultas y un poco menos de las ventas de pólizas concretadas”, define la ejecutiva. “El seguro de vida es un producto que a partir de la primera cuota, en caso de producirse el siniestro (la muerte del titular), paga la totalidad de lo contratado con lo cual es una respuesta económica ante una situación difícil”
Mix de inversión
“La pandemia aumentó nuestra sensación de incertidumbre y puso a prueba nuestra capacidad para procesar el riesgo, haciendo que muchos de nosotros nos sintamos más ansiosos y fuera de control. Estos sentimientos pueden verse en los resultados de nuestra encuesta, en la que los inversores se centran cada vez más en el ahorro, el control de los aportes para la jubilación y la revisión de sus inversiones con mayor frecuencia”, explica en ese sentido Stuart Podmore, especialista en el análisis de la inversión conductual de Schroders .
“En Latinoamérica notamos que aquellas familias que no sufrieron una pérdida de ingresos, pudieron ahorrar más durante la pandemia que en los años anteriores, dado que sus gastos fueron menores. La gente redujo sus gastos en viajes, autos, entretenimiento, y otras categorías no esenciales”, dice Albina y hace zoom sobre las particularidades del mercado local. “En la Argentina vimos además otro fenómeno que también se dio a raíz de la pandemia: al haber control de capitales, mucha gente invirtió sus ahorros en pesos en instrumentos en pesos como fondos comunes de inversiones, que otorgan una alta tasa de interés que compensa la inflación del país”.
Abdala, de PPI, hace hincapié también en la búsqueda de alternativas por parte de los ahorristas y de los inversores. “El 2020 fue el año en que finalmente se concreto la reestructuración de la deuda y el ahorrista tenía la expectativa que una vez cumplido este proceso, los activos argentinos recuperaran terreno, pero esto no fue así. Como consecuencia, hoy muchos clientes se vuelcan a los Cedear que son participaciones en empresas extranjeras”.
“El segundo aspecto remarcable -avanza en su análisis Abdala- es la recuperación de una curva de rendimientos en pesos que ajustan por distintas variables: CER, Dolar Linked y UVA que al tener aún cerradas las puertas al mercado internacional de capitales, se volvieron la principal fuente de financiación del mercado local”.
La búsqueda de rendimientos por encima de la inflación marca también el norte de los inversores locales. Para eso está siendo necesario asumir un mayor nivel de complejidad en las inversiones (no alcanza con el plazo fijo). El estudio de Schroders demuestra en ese sentido que : el 44% de los inversores destinaron más dinero a ahorros en general, 45% invirtieron más en activos de bajo riesgo y 31% en activos de alto riesgo.
Finalmente otro dato que pone blanco sobre negro cuánto más activos están los inversores es que el 64% dijo al ser encuestado que revisa sus inversiones semanalmente. En 2019, ese porcentaje era del 55 por ciento.
Otras noticias de Comunidad de Negocios
Más leídas de Negocios
La batalla de los semiconductores. TSMC camina por la cuerda floja de la geopolítica
Editora ejecutiva del Pulitzer Center. Marina Walker Guevara: “Las audiencias valoran el periodismo de investigación y la vigilancia del poder”
Secretos de productividad. ¿Todos tenemos que ser influencers?
El costo de la duda. Las deepfakes ponen a prueba la confianza del consumidor