Aviones. Los nuevos diseños que usan las aerolíneas para arreglar el incómodo asiento del medio
LA NACIONMark Wilson
"En los viajes aéreos no hay justicia", me dijo alguien de la aviación comercial una vez. Un tercio de los pasajeros en los aviones se clavan con el asiento del medio, apretujados durante horas... y cuesta exactamente lo mismo que el de la ventanilla o el pasillo. Eso es una desgracia.
Pero, ¿qué pasa si podemos hacer más cómodo el asiento del medio? En 2017, escribimos acerca de un asiento llamado S1. Su diseño es singular porque ubica a los pasajeros del asiento del medio ligeramente más atrás de los otros dos en su fila. El mes pasado, el S1 fue aprobado por la FAA para su instalación en aviones. Una aerolínea estadounidense lo estará colocando en cincuenta aviones hasta fines de 2020.
El S1 estuvo en desarrollo por cinco años y el equipo responsable está compuesto por sólo seis personas, incluyendo el personal de ventas y operaciones. Diseñado para vuelos de unas pocas horas, retrasa el asiento del medio y lo hace unas pulgadas más bajo que los de ventanilla y pasillo.
Además el asiento es tres pulgadas más ancho. Esto le permite tener un poco más espacio para brazos, hombros, caderas y codos, sin aumentar el espacio para las piernas o reducir la capacidad del avión (lo que afectaría los márgenes de ganancias de las aerolíneas).
"Hemos descubierto que lo que parece una pequeña modificación en realidad significa un inmensa diferencia. Uno lo descubre al sentarse en el asiento. Nuestra principal herramienta de ventas es enviar una muestra del asiento a las aerolíneas para que puedan sentarse en el", dice el fundador de Molon Labe, Hank Scott.
"He visto esto varias veces. Un ejecutivo de aerolínea ve el asiento, asiente y dice que entiende. Entonces le pedimos que se siente junto a un tipo grandote, como nuestro jefe de ventas, Thomas (2 metros, 125 kilos). A los pocos segundos lo entiende de verdad, deja de pensar como ejecutivo de aerolínea y pasa a modo de pasajero", cuenta.
En cuanto al diseño final del S1, le falta una cosa que nosotros habíamos destacado en nuestros informes. Molon Labe desarrolló una tecnología de "vuelco al costado" que hacía deslizar el asiento del pasillo sobre el asiento del medio al momento del ascenso y descenso de los pasajeros del avión, para permitir que esto se haga con más comodidad y más rápido. Pese a pruebas por accidentes y durabilidad exitosas, la compañía optó por hacer esto opcional en vez de una parte estándar del diseño.
"Decidimos hace dos años concentrarnos en conseguir que el S1 realmente logre volar tal como es… y luego, cuando haya una aerolínea que lo adopte y esté contenta con nuestros asientos y nuestro servicio, ofreceremos asientos con ‘vuelco al costado’", dice Scott. "Es un sector tan adverso al riesgo que tiene más sentido ofrecer un asiento fijo para comenzar."
Junto con el S1, la compañía está trabajando en modelos S2 y S3, hechos para vuelos largos y que podrían lanzarse en los próximos años. El enfoque es tan cómodo como suena. Y aunque no haya justicia en volar de todos modos, al menos clavarse con el asiento del medio puede ser un poco menos desgraciado.
Traducción de Gabriel Zadunaisky
Por Mark Wilson
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