Ajuste. Swarovski despide 800 empleados en el mundo: cómo impacta esto en el sector
La cadena de joyerías de origen austriaco Swarovski busca reducir la plantilla de personal por el efecto de la pandemia de coronavirus. En Wattens, sede principal del grupo, despedirán a 200 empleados mientras que en el resto del mundo tienen planeado hacer un recorte de otras 600 de personas.
No se trata de una crisis dentro de la compañía: la pandemia del coronavirus impactó profundamente en todo el sector a nivel global. Desde la Cámara de Joyería, Relojería y Afines, advirtieron que "indudablemente esa reducción va a impactar en la Argentina", en donde también prevén que, tres de cada seis puestos de trabajo que genera el rubro se pierdan.
En la Argentina, Swarovski está radicado desde fines del siglo pasado. Antes de que se decretara la cuarentena para frenar la expansión del coronavirus, la empresa había tomado la decisión de cerrar tiendas en varios países. "De acuerdo con las directrices de las autoridades locales y de las organizaciones sanitarias, y cerraremos más locales si es necesario, siguiendo los consejos de las autoridades. Este es el caso de nuestras tiendas en Argentina, donde todas están cerradas temporalmente", señalaron.
En todo el mundo, la cadena de joyería y accesorios de lujo emplea a 29.000 trabajadores y en las próximas semanas prescindirá de 800 personas del total de su plantilla. El objetivo es morigerar el impacto económico generado por el aislamiento social y obligatorio de la pandemia, según publicó Tiroler Tageszeitung, un diario austriaco.
Una de las razones de la tomar la decisión, según argumentan, es reiniciar las operaciones en ese y otros países para preservar el negocio que será reforzado en un plan de ahorro masivo que servirá para "una reestructuración" de la compañía. Además tienen pensado fusionar algunos departamentos operativos dentro de la organización que podrían verse replicados también en el ámbito nacional.
Robert Buchbauer, consejero delegado de Swarovski, señaló que entre diciembre y mayo la demanda de Asia y Estados Unidos "cayó significativamente". En tanto, la empresa anticipa un lento retorno de la demanda y una fuerte disminución de las ventas para este año. Hasta antes de la pandemia, la empresa fundada en 1895 por Daniel Swarovski tenía planeado crecer entre un 4% y un 5%. El año pasado, según trascendió, facturó 2700 millones de euros.
Cómo está el sector en el país
Según el presidente de la Cámara de Joyería, Relojería y Afines, Armando Wasser, el sector está en un momento "complicadísimo", en el que el 80% de los locales y casas de joyerías están inoperativas. "Las ventas totales no llegan ni al 20% y los comerciantes son gente que no tiene fondos de reserva", avisó.
Hace unas semanas, cuando el gobierno porteño habilitó los negocios de ropa e indumentaria a reabrir sus puertas con protocolos de sanidad para evitar la propagación del virus, también incluyó a los locales de joyerías barriales a atender al público. No obstante, según dicen del sector, las principales casas de estos artículos que están sobre la calle Libertad, en Capital, no tienen permitido trabajar por encontrarse dentro de una área con riesgo de aglomeraciones.
Entre las joyerías que están habilitadas para operar en los distintos puntos de la Ciudad, no llegan ni al 5% de los negocios. "Hay gente que tampoco abre por el miedo al coronavirus. Las joyerías barriales sí están habilitadas para trabajar, pero son muy pocas las que hay. Lo que se da mayormente es el servicio de reparación de relojes", puntualizó.
Según contó Wasser, a nivel país se están presentando los mismos problemas. Por tanto, la preocupación del sector está latente y temen que el efecto pueda ocasionar una ola de desempleos masivos. "Si los comerciantes no tienen posibilidades de recibir un pago por lo que están haciendo, deciden cerrar y dedicarse a otra cosa. Es probable que la mitad de los empleados queden en la calle cuando todo esto pase. Sin contar los talleres, que van a desaparecer", aseveró.
Para el presidente de la Cámara, "no cabe dudas" de que los despidos de Swarovski también van a perjudicar en la Argentina. "Seguro que van a despedir gente porque nadie está trabajando", señaló.
La mayoría de las joyerías, según advierte el sector, están dentro de galerías y shoppings que, al no tener las persianas abiertas, incluso después de la reapertura, solo están percibiendo ventas online. En ese contexto, muchas se acercan al cierre definitivo de sus puertas.
Desde Swarovski aclararon que antes de surgir la pandemia, ya había una estrategia para fusionar los sectores de marketing y ventas de la empresa, que forma parte de una reestructuración global de la compañía, pero dio la casualidad que ese cambio coincidió con la crisis económica que generó el coronavirus.
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