Nabisco, con la mira puesta en Canale

Por estos días, una de las grandes compañías mundiales del rubro galletitas, el gigante norteamericano Nabisco, está en conversaciones para adquirir la parte argentina de Canale, en manos de Socma Alimentos, del grupo Macri.

"En el mercado de las galletitas hay lugar para tres y no para cuatro", le dijo a La Nacion un consultor de empresas. En ese rubro están Bagley, Nabisco-Terrabusi, Canale y, en menor medida, Arcor.

Si bien Jorge Aguado, vocero de la firma nacional, negó cualquier tratativa, en Nabisco Argentina prefirieron no hacer comentarios al respecto. Sin embargo, distintas fuentes supermercadistas y del sector alimentario, y un informante bancario involucrado en el proceso confirmaron las negociaciones.

El Citibank tiene un mandato para estudiar el mercado local y para la búsqueda de un socio estratégico.

En principio, el interés de Nabisco apunta a la actividad de Canale en la Argentina, y los norteamericanos ya están analizando los números de la compañía de Macri, según puntualizó una fuente bancaria. La firma también habría sido ofrecida a Arcor, pero sin éxito en la gestión.

Las empresas alimentarias no están pasando por un buen momento. La mayoría de ellas arroja resultados negativos o con muy poca ganancia. Canale Argentina no es ajena a esta situación. Su balance de 1998 arrojó una pérdida de $ 14.014.113, con una facturación cercana a los US$ 133 millones en la Argentina. Y en el primer trimestre de este año sus pérdidas fueron de $ 8.794.392.

Resultados

La posibilidad de que Macri analice la salida de Canale está basada en los resultados de la firma, en que se trata de un rubro muy competitivo y, además, en que sus negocios en telecomunicaciones y en el Correo Argentino le están demandando una importante inversión, según le dijo a La Nacion un consultor del grupo Socma.

La crítica situación por la que atraviesa el sector alimentario fue gráficamente definida por un consultor: "El negocio es hoy realmente muy difícil y sólo se ganan centavos. La rentabilidad es baja y ronda entre 2 y 3 por ciento sobre las ventas".

Nabisco llegó al país en abril de 1994, tras adquirir el 70% del paquete accionario de Terrabusi. El 30% restante que cotizaba en Bolsa fue rescatado por el mismo grupo con el propósito de lograr el control absoluto de la firma. En marzo de 1996 adquirió las marcas Mayco y Capri.

Según la consultora Claves, Terrabusi tiene una muy buena imagen de marca con calidad. Se ubica en precios altos en todos los segmentos, salvo en aquellos que desea desarrollar, como los snacks.

Canale, a partir de la entrada de Macri en 1994 -siempre según el informe de Claves-, adoptó una política sumamente activa en comunicaciones, apuntando a la renovación de la marca, que era algo anticuada y desactualizada. Su posición en precios se ubica en el sector medio a alto.

Nabisco alcanzó ventas en 1998 por US$ 8100 millones. El primer trimestre de este año no fue del todo positivo. Su facturación cayó un cinco por ciento, según la empresa por una baja de ventas en Brasil y en Canadá.

Imagen

Terrabusi y Canale coinciden en poseer una importante y fuerte imagen de marca. Su larga trayectoria y tradición en el país las ubican entre las líderes, según se desprende de un trabajo de la consultora Claves. Asimismo, ambas provienen de un origen familiar, con el apellido como marca.

La estrella de Canale es, sin dudas, Cerealitas, que la coloca en el podio del segmento cracker con cereal.

Terrabusi, por su parte, cuenta con marcas inolvidables para la memoria del consumidor: Lincoln, Manon, Melba, Duquesa, Champagne y Express, entre otras.

Además sumó Mayco y las vainillas Capri.

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