Miguel Ángel Pesce, el vicepresidente de cuatro gestiones kirchneristas del Banco Central

Miguel Ángel Pesce es el nombre que desde hace semanas aparece en el horizonte del Banco Central (BCRA), dentro del equipo de economistas que rodeó a Alberto Fernández.

Especializado en temas de política monetaria, este economista de la UBA nacido en Mendoza hace 57 años es posiblemente uno de los argentinos que más conoce sobre el funcionamiento del BCRA. En un organismo habituado a la inestabilidad de sus autoridades –será el 62° titular en apenas 84 años–, Pesce asumió como vicepresidente en septiembre de 2004 y permaneció en el cargo hasta el final de la gestión kirchnerista, en diciembre de 2015.

"Solo me supera Marcos Saúl [exfuncionario de Carlos Menem] como el miembro del directorio que más duró en su cargo", dijo en una reciente entrevista con LA NACION este funcionario que trabajó en la entidad durante las gestiones de Martín Redrado, Mercedes Marcó del Pont, Juan Carlos Fábrega y Alejandro Vanoli. Cercano al radicalismo mendocino, también fue secretario de Hacienda porteño durante la gestión de Aníbal Ibarra y titular de la Sigen, en 2004.

Su opinión sobre la gestión Cambiemos

Su llegada a Reconquista 266 anticipa un posible giro en el rol del organismo. "Macri tuvo una visión naif y estuvo mal asesorado", planteó Pesce sobre la política monetarista implementada durante la gestión de Cambiemos para controlar la suba de precios.

La crítica del futuro funcionario a la gestión macrista del BCRA apunta especialmente al régimen de metas de inflación que, sostiene, falló al descuidar el traslado de la devaluación a los precios o el impacto del ajuste de las tarifas. "Una cosa es que seas independiente y otra es que seas autista. No puede existir descoordinación entre el Banco Central y Hacienda. Esas señales contradictorias le hacen mucho daño a la economía", añadió.

"La inflación es un fenómeno complejo. Hay que sentarse con las empresas formadoras de precios, de servicios públicos, sindicatos y abordar el problema tratando de no afectar la rentabilidad. Si pensás que con la cantidad de dinero y la tasa de interés se soluciona, estás equivocado", sostuvo.

Sus ideas

Pesce propone para la autoridad monetaria un enfoque dual, que responde a la visión plasmada en la última reforma de la Carta Orgánica del organismo, en 2012. Además de mirar la estabilidad financiera y la pelea contra la inflación, apuntará a dar estímulos al crecimiento económico. "Un banco central no se puede permitir procesos recesivos prolongados y niveles de desempleo sostenidos", dijo.

En línea con la concepción kirchnerista de la economía, es de esperar que la gestión de Pesce en el BCRA sea más intervencionista que la de sus antecesores Federico Sturzenegger, Luis Caputo y Guido Sandleris. "Si no metés regulaciones en el mercado financiero tenés problemas. Es necesario para evitar que capitales especulativos de corto plazo desordenen la economía", dijo.

Una baja en las tasas de referencia, proceso que la actual gestión del BCRA puso en marcha tras la campaña electoral, o el estímulo a líneas de crédito subsidiadas aparecen como instrumentos elegidos para esta nueva etapa.

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