“Mi jefe me critica en público”
Hola, Andrea
Hace tres meses despidieron al gerente del área y me pusieron a cargo. Si bien ya van a hacer seis años que trabajo en la compañía, no me siento del todo preparado para manejar a la vez los proyectos y la gente. Me esfuerzo muchísimo y hago lo mejor que puedo, pero no creo que mi jefe se dé cuenta. La semana pasada se enojó conmigo por la manera en que resolví una situación con un cliente. Ayer fue muy duro cuando presenté la propuesta para un nuevo producto. "A este informe le faltan datos duros", me dijo delante de los otros tres gerentes con los que formamos su mesa chica. "No podemos tomar decisiones basadas en las ganas o la intuición. Tenés que seguir investigando". Me hizo sentir muy mal. Todo el fin de semana estuve pensando en eso. Siento que fue injusto, porque era la primera vez y tuve que hacer todo solo. También me da bronca, porque podría haber hablado antes conmigo, en privado, y evitarme el papelón.
A veces me parece que mi jefe piensa que se equivocó al darme el cargo, que cree que me queda demasiado grande. Es un momento de muchos cambios en la empresa y nadie tiene el puesto asegurado. Necesito que mi jefe me valore y reconozca mi trabajo. ¿Qué puedo hacer?
Muchas gracias,
Diego
Hola, Diego
En tu consulta encuentro la ocasión ideal para hablar de la manera en que las personas interpretamos lo que otros nos dicen, para bien o para mal.
Tu relato es muy breve y no me permite saber hasta qué punto se repiten situaciones como las que contás, o con qué frecuencia. Basándome únicamente en lo que describís acá, no parece que tu jefe te esté desvalorizando. Es bastante común que los líderes sean "duros", vayan al grano, critiquen ideas y pidan explicaciones sin abundar en cortesías, sobre todo si se trata de una mesa chica de gerentes, donde todos los presentes son profesionales experimentados convocados a pensar en común. Dado que hace muy poco tiempo que asumiste en tu cargo, quizás todavía no estés acostumbrado a este tipo de debate abierto, donde las críticas no buscan agredir o avergonzar al otro sino asegurar la solidez de las ideas.
Como decís al comienzo de tu consulta, todavía te sentís inseguro en tu nueva posición. La situación de la empresa, con todos los cambios que están pasando, también suma a tu sensación de incertidumbre. En este estado emocional, es posible que estés distorsionando lo que te dice tu jefe. La ansiedad a veces nos hace ver monstruos y fantasmas donde no los hay. Cuando tu jefe te dice que sigas investigando con datos duros, probablemente sólo quiera decir eso, que el equipo necesita datos confiables. Pero lo que vos escuchás es que él cree que el cargo te queda grande, que se arrepiente de haberte nombrado, que no sos lo suficientemente bueno, que vas a ser el próximo al que van a despedir. Quién sabe por qué, si es por algo del presente o si es algo que traés de tu historia, ¡te hiciste una película enorme de todo lo malo que pasa y puede llegar a pasar!
Cada uno escucha como es, con su subjetividad, con sus experiencias pasadas, con sus creencias y sus carencias. "Lo que usted oye de lo que yo digo tiene que ver con usted, y no conmigo", dice el biólogo chileno Humberto Maturana. En lo que dice el otro ponemos nuestras esperanzas y nuestros miedos. Reaccionamos emocionalmente a lo que escuchamos, para bien o para mal. A veces respondemos con emociones que se generaron en el pasado, y que en el presente son exageradas. No sé cuántos años tenés, pero sí que hace seis años que estás en la empresa y que te dieron una gerencia. Es decir, no sos un pasante, un aprendiz, ni un recién llegado al mundo del trabajo. Tenés experiencia. Sin embargo, estás mirando la situación de hoy con ojos del pasado, como si fueras un niño impotente frente a un padre enojado. A partir de esa mirada inmadura, no es raro que te veas a vos mismo con "delay", como si todavía te estuvieras formando, sin poder ver las competencias y el valor que tu jefe sí vio en vos ¡y por eso te puso a cargo del área! ¡Y te incorporó a su mesa de cuatro!
Para reflexionar, manejar las propias emociones, combatir la ansiedad y volver las cosas a su justa proporción, nada mejor que ponerle humor: ¿Qué estás viendo? ¿Qué estás escuchando? ¿Qué película te estás haciendo? ¿Qué palabras disparan la película y alimentan al monstruo de tu película catástrofe? ¿Qué situaciones le hacen crecer los colmillos, los pelos y las garras?
Saludos,Andrea
Consultorio digital Terapia de Negocios
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Andrea Churba, consultora especializada en temas de liderazgo con años de experiencia en el campo laboral, te asesora en tu camino de cambio y desarrollo. Escribile a Terapia de Negocios, su consultorio digital: Lanacion@andreachurba.com.ar