Más “maquinita”: antes de cerrar el semestre, el Banco Central le giró otros $90.000 millones al Tesoro
La asistencia monetaria bajó notablemente respecto de igual lapso año pasado, pero llega cuando no terminó de impactar en la inflación la megaemisión del 2020
- 5 minutos de lectura'
Cuando aún no se han terminado de ver las consecuencias inflacionarias de los más de $2 billones que el Banco Central (BCRA) emitió en el 2020 para asistir financieramente al Tesoro, la entidad que conduce Miguel Pesce concretó el pasado viernes, antes de que finalice el primer semestre, una nueva transferencia al Tesoro Nacional, esta vez por $90.000 millones.
El giro, quinto del año, fue en concepto de remisión de utilidades, aunque se sabe que las ganancias del ente monetario se dan por el impacto que la devaluación del peso tiene en los activos anotados en dólares en su balance, aunque muchos de ellos son bonos emitidos por el Gobierno como los que -en el mejor de los casos- cotizan a entre el 30% y 35% de su paridad en los mercados. Es decir, son ganancias meramente “contables”.
La asistencia fue solicitada por el Gobierno para poder cumplir con el pago de aguinaldos y otros refuerzos a planes asistenciales recientemente concedidos, es decir, a pesar de los ingresos extraordinarios que registra el fisco por el denominado Impuesto a la Riqueza y de los $158.000 millones colocados en “nueva” deuda en el mercado local durante junio, lo que da una idea del desequilibrio que mantienen las cuentas públicas, aunque poco parece importarle a los legisladores nacionales (representantes del pueblo), que, por caso, se auto-aumentaron 40% sus dietas algunas semanas atrás.
Con el envío del cierre de la semana anterior, la asistencia monetaria directa del BCRA escaló hasta los $330.000 millones (0,8% del PBI) en el primer semestre del año. Fueron $190.000 millones en concepto de adelantos transitorios y otros $140.000 millones por las ganancias.
El 25/6 el BCRA giró al Tesoro $90.000 millones en concepto de Transferencia de utilidades.
— Christian Buteler (@cbuteler) June 30, 2021
En el año le giró $190.000 millones por "Adelantos transitorios" y $140.000 millones como "Transferencia de utilidades", todo esto a pesar de un endeudamiento positivo de $356.000 millones pic.twitter.com/nbt6pxDfVl
Si bien es un número 2,63 veces menor a los $1,25 billones transferidos durante la primera mitad de 2020, en el momento de cuarentena más estricta y con programas de asistencia como el IFE y ATP en plena vigencia, cobra relevancia cuando se observa que hasta mayo el déficit primario acumulaba apenas $54.881 millones y el total (o financiero) llegaba a los $306.058 millones.
Si se lo mide en relación al tamaño de la economía (PBI), la merma en la asistencia en mucho mayor (bajó del 4,6 al 0,8%, es decir, se contrajo en 5,75 veces), aunque lo que preocupa es que llega cuando se hace muy evidente que aún sobran pesos en la economía.
Esa es una de las razones, junto a la postergación de aumentos tarifarios con fines meramente electorales, por las que la expectativa inflacionaria para 2022 escaló 3 puntos en los últimos meses, hasta colocarse en el 40% anual, algo que podría evitarse si se anunciara algún plan para retirar de manera consistente los pesos sobrantes, hasta que mejore la demanda de nuestra moneda, por confianza en una reactivación de la actividad (que se volvió a planchar desde hace tres meses, como muestran las estadísticas oficiales).
La nueva asistencia vía emisión monetaria era esperable por el mercado y se considera la antesala de una segunda parte del año en la que, seguramente, será mucho más activa. “El monto remitido se encuentra en línea con el financiamiento neto conseguido por el Tesoro y con nuestras estimaciones de déficit fiscal en junio. En lo que va de 2021, el financiamiento monetario alcanza el 0,8% del PBI y bajó notablemente respecto de 2020. Sin embargo, estimamos que la asistencia al Tesoro se intensificará en el segundo semestre de este año por las mayores necesidades fiscales”, observan los analistas de Delphos Investment.
El economista Juan Ignacio Paolicchi, de la consultora Empiria, coincide, al explicar que el nuevo giro anticipa que el “déficit aumentó en junio dado que las colocaciones de deuda fueron bastante buenas”.
“En la segunda parte del año, el gasto público comenzará a recalentarse en un marco en que los ingresos tributarios irán resignando dinamismo y los vencimientos de deuda pasan a ser más exigentes”, coinciden en describir desde la consultora Equilibra, recientemente creada por los economistas Diego Bossio y Martín Rapetti
El problema es que sería apenas un anticipo de lo que viene, si se tiene en cuenta que en la segunda mitad del año el Tesoro Nacional debe refinanciar vencimientos de deuda que superan $1,8 billones y obtener sobre eso algún ingreso nuevo (deuda), para cumplir las metas de cobertura del déficit fiscal planteadas en el presupuesto, más aún si se busca cumplir con la promesa de invertir el mix planteado en esa ley de 60% emisión y 40% nuevo financiamiento de mercado.
En especial, porque parte de los que vence está en manos de los fondos de inversión Templeton y Pimco, que mantendrían tenencias de bonos en pesos locales equivalentes a unos US$3200 millones, según estimaciones de esa consultora, y en el mercado se cree que pueden verse más tentados a desarmar una parte de esa posición, tras haber postergado el Gobierno posibles acuerdos con el FMI y el Club de París.
“Para lo que resta del año, los vencimientos en pesos en manos de estos dos grandes fondos suman unos US$400 millones, de los cuales US$250 millones vencen entre septiembre y octubre (X13S1 y TO21)”, advierten en un informe.
Otras noticias de Déficit fiscal
Más leídas de Economía
Cronograma. Quiénes cobran prestaciones de la Anses esta semana
Emprendedor. El secreto de un profesional para aumentar la facturación de una empresa de US$1 a 25 millones de dólares
Director. Un hermano del subsecretario de Prensa de Milei quedó a cargo de una oficina del Senasa
Para diciembre. El Gobierno actualizó los valores de la jubilación: de cuánto son el mínimo y el máximo