Más gasto: el Gobierno incorporó 1,3 billones al presupuesto para pagar sueldos y subsidios
Aumentó los créditos de todos los ministerios y aumentó el déficit fiscal
- 3 minutos de lectura'
Nada alcanza para calmar la vorágine de gasto de la Argentina. Pese a la presión impositiva que crece y a los esfuerzos por ofrecer un dólar más alto al campo, que impacta directamente en la recaudación por retenciones, no hay dinero que pueda hacer frente a la semejante cantidad de ceros que se agregan en el casillero del debe.
Mediante un decreto, el Gobierno autorizó un incremento en el cálculo de recursos pero también el de gastos. De esta manera, la norma determinó una desmejora en el resultado financiero de la administración pública nacional de $1,1 billones. Apareció un rojo algo más refulgente en plena gama de celeste y blanco.
La inflación y el aumento nominal de todos los impuestos que se ajustan automáticamente por la suba de precios generales, generó la incorporación de mayor recaudación. Ese importe engrosó la caja en 406.000 millones de pesos. Pero del otro lado de la columna, se anotó una “B”, de billón, adelante. El gasto subió 1,5 billones de pesos. De ahí es que el saldo fue negativo en 1,1 billones.
Cuando la lupa se posa en la llamada finalidad del gasto se deja ver la prioridad del Gobierno y las urgencias. Los gastos corrientes se incrementaron en $1,5 billones mientras que los de capital, en $11.600,3 millones. El primero es para pagar el llamado día a día, desde sueldos hasta subsidios; el otro rubro, por caso, es el que generalmente se destina a inversión o a la compra de bienes. La diferencia entre uno y otro es abismal.
Uno de los ejemplos de esta distribución se aprecia en el Ministerio de Desarrollo Social. “Se aumentan los créditos en $123.777 millones, destinándose $121.081 millones a transferencias al sector privado para los programas Potenciar Trabajo ($75.519,7 millones) y Políticas Alimentarias ($45.561,4 millones). Además, los gastos en personal subieron $2596 millones y los bienes de uso, $100 millones”, dice un informe de la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP).
De la lectura despojada de la norma se podría decir que se reforzó el crédito de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia en $1198 millones. Buena noticia, en principio, encontrar esta decisión del Gobierno en un momento en el que se encuentra un gran porcentaje de los niños y adolescentes pobres. Pero sólo es necesario mirar cómo se distribuirá ese monto: $1.138,0 millones terminarán en el rubro llamado gastos de personal. Dicho de otra manera, burocracia al servicio de la ministro Victoria Tolosa Paz.
Hay unos $15.000 millones para mejorar las cuentas del Gobernador Axel Kicillof, de los cuales unos 7500 son para el Fondo de Fortalecimiento Fiscal de la Provincia de Buenos Aires y un capítulo aparte para el transporte.
La norma establece que se prorroga el Fondo de Compensación al Transporte Público de Pasajeros por Automotor Urbano y Suburbano del Interior del País por $48.000 millones. De hecho, uno de los ejes de la política del nuevo ministro del área, Diego Giuliano, es reforzar los subsidios al interior del país.