Maradona: la historia detrás del vino que se iba a exportar y hoy solo consumen coleccionistas

Hace 17 años Guillermo Arcani y sus dos socios, Fernando Córdoba e Iván Mersich, comenzaron a indagar en el mundo vitivinícola. Lo que no sabían era que iban a conocer y terminar trabajando con Diego Maradona. La idea inicial era elaborar un vino relacionado con el mundo del deporte, pero nunca se imaginaron que iban a lograr un acuerdo con el 10.

"Sabíamos que teníamos que buscar una estrategia distinta a las que existían en el mercado y pensando con qué marca nos podíamos unir. Maradona era sin dudas lo mejor a lo que podíamos apuntar. Era la marca internacional más importante y conocida del mundo", aseguró Guillermo Arcani, expresidente de la bodega Raíces de Agrelo, en diálogo con LA NACION.

Y así fue que los socios fundadores lograron firmar con el futbolista y lanzaron al mercado alrededor de 30.000 botellas de vino de cuatro variedades (Malbec, Cabernet-malbec, Cabernet-malbec-syrah, y Cabernet Sauvignon) en dos líneas: una premium y otra variante más popular. A precios de hoy, cada unidad salía entre $200 y $500.

"Al principio fue muy bien aceptado por el mercado local y lo pudimos comercializar en las grandes cadenas de supermercados. Tuvimos un lanzamiento en Barrio Norte y un tiempo después en Nápoles", explicó. El vino se exportó a México, Panamá y los Estados Unidos, pero fueron ventas limitadas.

De acuerdo con el periodista Oscar Pinco, que participó de la presentación en el museo Sívori en 2003, los socios hablaron entonces de un posible negocio en Japón que tenía una condición: los nipones estaban dispuestos a pagar US$100 la botella, pero si estaba autografiada por el mismísimo Maradona, algo que no se llegó a concretar según Arcani por "temas legales".

Sin embargo, el corcho tenía impreso un autógrafo suyo, además de la foto de Maradona en la etiqueta adornada por un fileteado. "Utilizamos todo de la tradición argentina para representar a Diego", afirmó Arcani.

Todo el negocio duró alrededor de cuatro años, pero llegó a su fin cuando el contrato con Maradona significaba una serie de desembolsos que, según Arcani, en términos de volumen, "no justificaban el esfuerzo". "Fue un período que cumplió su ciclo", dijo. Además, aseguró que la competencia en el sector vitivinícola hizo que fuera aún más difícil seguir produciendo.

A lo largo de ese tiempo, también tuvieron convenios con Boca Juniors, River Plate y la Selección Argentina. Para cada equipo lanzaron un vino en particular, pero no tuvieron el impacto que logró la botella unipersonal del 10.

Por otra parte, pero menos conocido que el vino de Maradona, lanzaron un fernet con cola llamado "El Diego". Este último producto apuntaba a un mercado local y a un sector más popular. "También quisimos hacer un vino con soda, pero a diferencia de la bebida con fernet, no se concretó porque no existía ese hábito en la sociedad", dijo.

Hoy en Mercado Libre se pueden ver botellas del vino que se ofrecen por hasta $5600 la unidad (en los comentarios se aclara que no está en condiciones de ser tomado, sino que solo sería un artículo coleccionable) y un vendedor incluso tiene a la venta la colección de cuatro vinos por $52.000.

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