Las terminales y el Gobierno discuten por las autopartes
Las automotrices dicen que hay un cuello de botella; molesta, Giorgi pidió más partes locales
El marco de espectacular crecimiento que han mostrado las fábricas de autos en lo que va del año -60% más producción, 70% más exportación- no alcanzó para evitar el primer chisporroteo público entre el Gobierno y la industria automotriz. Los fabricantes denunciaron ayer que hay "cuellos de botella" en la cadena de producción por la falta de capacidad del sector autopartista; el Gobierno no ocultó su molestia y les pidió más integración de proveedores locales.
"Los objetivos de mantener la presente tendencia podrían verse comprometidos por cuellos de botella que ya comienzan a registrarse en el sector autopartista local", dijo el presidente de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa), César Luis Ramírez Rojas, en un comunicado que acompañó el informe con los datos de producción de mayo (59.723 vehículos fabricados, un 39,6% más que hace un año).
Argumentó que los proveedores de las terminales están trabajando "cerca del límite de su capacidad instalada" y consideró que son "escasos" los proyectos de inversión y ampliación de las autopartistas, por lo que podrían no satisfacer en el corto plazo las demandas de la industria. Y pidió que "el sector autopartista maneje adecuadamente sus costos" para evitar el riesgo de "perder la competitividad".
Las declaraciones cayeron como un balde de agua fría entre los autopartistas -que no quisieron hacer declaraciones-, pero mucho más en el Gobierno. "Sorprenden las declaraciones del presidente de Adefa, ya que en los últimos 40 días hemos mantenido más de 20 reuniones con los titulares de las terminales automotrices radicadas en el país para evaluar la situación del sector, y nunca en el cúmulo de reuniones de trabajo existió referencia alguna acerca de posibles cuellos de botella", dijo la ministra de Industria, Débora Giorgi. "No existen terminales automotrices fuertes y sustentables sin una industria autopartista nacional desarrollada", añadió, y destacó las herramientas gubernamentales hacia el sector, como la línea de créditos por $ 350 millones con fondos de la Anses.
Giorgi viene manteniendo reuniones con todas las terminales (ayer fue el turno de Mercedes-Benz, Renault y General Motors) con el objetivo de que compren más autopartes locales. El argumento es que con una producción récord (este año podría superar las 700.000 unidades) se está provocando una fuerte suba en el déficit externo en el rubro autopartes, que podría llegar a los US$ 7000 millones a fines de año.
Además de los problemas estructurales, este año se suman las directivas de algunas casas matrices europeas que empujan a sus terminales argentinas a abastecerse de proveedores radicados en el Viejo Continente para compensar las caídas de producción provocadas por la crisis. "Ellos hoy piensan: ¿para que voy a desarrollar un local si hoy afuera consigo más barato que nunca?", explicaron fuentes de Industria.
39,6%
Creció la producción de autos
- En mayo, las terminales argentinas fabricaron 59.723 vehículos. Se exportaron 38.900, un 47,7% más que hace un año.
US$ 7000
Millones
- Es el déficit estimado en autopartes por la suba de las importaciones.
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