Las tecnologías traen algunas ventajas al equipo femenino
La automatización y sus efectos podrían dar un empuje a la participación laboral de ellas
Los efectos de la automatización y la robótica en el empleo son inciertos y a veces hasta temidos por los economistas. Sin embargo, en relación con la cuestión de género, puede que ser que ayuden a transformar la manera en la que se trabaja y ayuden a incluir a las mujeres de manera más equitativa en la fuerza laboral. Por lo pronto, los datos que se desprenden de un estudio de la consultora Accenture son desalentadores: a nivel mundial, por cada 100 gerentes hombres hay 34 mujeres, y según una proyección esa relación podría llegar a ser de 100 a 84 si las empresas crearan un ambiente apropiado para la igualdad de oportunidades.
Antes de mirar el futuro, hay que entender la situación actual. Mercedes D'Alessandro, doctora en Economía y autora de Economía feminista: cómo construir una sociedad igualitaria (sin perder el glamour), habló sobre un presente alarmante, sobre todo para las mujeres jóvenes. "Cuando hablamos de millennials nos imaginamos a una chica con auriculares lindos sentada diseñando en una cafetería de moda", dijo D'Alessandro. Sin embargo, los datos duros de la economía local muestran otra realidad: "El 67% de los mal llamados "ni-ni" son madres adolescentes, mujeres que están cuidando a sus hijos, a sus abuelos o adultos mayores". Una de cada cinco de estas millennials está desocupada. "Está viajando en un colectivo, mientras se le terminan los datos del celular, volviendo de la tercer jornada de su trabajo precario", describió. "¿Cómo enfocamos una solución en un mundo donde dos de cada tres empleados son reemplazables por tecnología?", se cuestionó D'Alessandro.
Más allá de esos problemas actuales, para Sergio Kaufman, presidente de Accenture en la Argentina, el cambio del modelo de trabajo que impulsa la tecnología disrumpe el viejo modelo fordiano. La tecnología habilita un cambio en la manera de trabajar que favorece a las mujeres: el 65% de ellas usa la tecnología para formar parte de reuniones en las que antes no podía estar por no poder asistir en forma presencial.
"La palabra clave es diversidad; cuando antes se estudiaban organizaciones industriales se pensaba en preceptos muy claros respecto de qué tenía que hacer cada uno", dijo el ejecutivo. Y aclaró que ese modelo hoy va hacia el fracaso. "La diversidad es una condición necesaria para una organización exitosa, el colectivo mujeres, que es la mitad del mundo, no es obviable. Hay muchas organizaciones que declaman pero no ejecutan, y van a quedarse atrás", agregó Kaufman.
Ricky Sarkany, CEO de la marca del mismo nombre, mandó una pregunta al panel de manera virtual. "Más del 80% de las decisiones de compra está en manos de mujeres. ¿Por qué no está en manos de ellas el proceso de decidir los artículos, acciones, estrategias de lo que consumirán las mujeres?".
Para Susana Balbo, el riesgo para las empresas de no incluirlas en la toma de decisiones significa ir perdiendo las posibilidades de negocio. "Cuando las empresas se dan cuenta de que con mujeres en el directorio ganan en ventas, en retención de talento, en productos adaptados a las necesidades de la mujer, son mucho más exitosas y aumentan sus revenues. En Estados Unidos el 73% del presupuesto de la casa lo decide la mujer, en Japón el 60% de los autos es elegido por ellas".
Los millennials también mandaron sus inquietudes. Uno de ellos quiso saber: "¿Qué tiene que tener un buen líder?". Para Carola Fratini, la respuesta es "pasión". Según la líder de QBE Seguros, "un buen líder tiene que tener mucha pasión por lo que hace. Hay líderes con distintos métodos, pero con convicción y pasión, no importa si es hombre o mujer, va a llevar adelante el equipo".
La pregunta de otro joven se orientó a su generación: "¿Qué valoran de los millennials y qué no?". "El concepto de millennials lo inventó alguien hábil de marketing", dijo Kaufman, ya que a la generación no le gusta ser encasillada en un estereotipo. "Es un problema de los viejos baby boomers, que quieren ver otras cajitas. Muchos atributos son sumamente valiosos y muchos tienen similitudes con las generaciones anteriores", señaló el directivo de Accenture.
La tercera pregunta millennial se refirió al balance entre la profesión y el espacio humano: "¿Cómo hacen para mantener el equilibrio entre trabajo y vida personal?". La encargada de responder fue la influencer y millennial Belu Lucius. "Casi podría trabajar en un circo, porque hago así con toda mi vida", bromeó Lucius mientras movía las manos como una malabarista. Habló de establecer prioridades y organizarse, entender que las redes sociales no solo son un hobby sino también un trabajo, que requiere sincronizar muchas tareas. "Aunque a veces no se valora, tienen horas de producción encima, y cuando trabajás sola sos tu propia guionista, protagonista y puede ser que te encargues de ser la distribuidora en los distintos canales sociales", concluyó.
Desigualdades que persisten
El lugar de la mujer en el mundo laboral
15
Lejos del ideal Es el número de las empresas que figuran en la lista de Fortune 500 que cuenta con una mujer al mando de las operaciones
20% desempleo
Una de cada 5 millennials está desocupada. Las mujeres tienen un 22% menos de probabilidades de alcanzar el nivel gerencial que los hombres
5 trabajo hogareño
Las mujeres dedican en promedio 5 horas diarias al cuidado de la familia, cocinar, limpiar la casa;un trabajo no remunerado
Diversidad
Es una condición necesaria para una organización exitosa. A veces, por exceso de perfeccionismo, las mismas mujeres no se animan a tener puestos de decisión importantes
De vieja data
Las estructuras socialesy laborales que hay en las empresas hoy fueron diseñadas por varones para varones, porque eran los que estaban presentesal momento de tomar las decisiones, hace 100 años
- 1
- 2
Giorgia Meloni, el Papa Francisco, un gobernador peronista y un “ídolo” libertario: el podio de quienes le hicieron regalos a Javier Milei
- 3
Real hoy: a cuánto cotiza la moneda brasilera oficial y blue este viernes 20 de diciembre
- 4
Opinión. Zonas de exclusión: no es el glifosato sino el asfalto el que mata la vida biológica de los suelos