Las razones por los que empresarios argentinos se van a Uruguay, según Financial Times
Eduardo Bastitta construirá un proyecto inmobiliario para aumentar la población de Colonia del Sacramento y le dará la posibilidad a quienes deseen emigrar de estar cerca de Buenos Aires
- 6 minutos de lectura'
En los últimos años, la cantidad de argentinos que emigraron a Uruguay fue en aumento, tanto por la inestabilidad económica del país como por la incertidumbre política. Así lo mostró el periodista Michael Stott, editor para América Latina del Financial Times, en un artículo publicado en el diario donde analiza una de las tendencias silenciosas que afectan a grandes empresarios en el país. Stott habló con Eduardo Bastitta, quien está construyendo un proyecto inmobiliario al otro lado del Río de la Plata, MásColonia, con el fin de atraer a los argentinos “cansados de los impuestos y la inestabilidad económica”.
El proyecto apunta a duplicar la población de Colonia del Sacramento, en Uruguay, que cuenta con 26.000 habitantes y se encuentra a 40 kilómetros de Buenos Aires. De esta forma, los argentinos que lo deseen podrían establecer residencia fiscal en el país vecino y disfrutar, a la vez, de viajes a Buenos Aires en menos de una hora, plantea su desarrollador.
El artículo destaca que hace tiempo que los más ricos de la Argentina desembarcaron en Uruguay para refugiarse en la estabilidad, la seguridad y las exenciones fiscales que ofrece aquel país. Por ejemplo, el fundador de Mercado Libre, Marcos Galperín, o el petrolero Alejandro Bulgheroni. “Ya existe una colonia establecida de argentinos adinerados en el distrito Carrasco de Montevideo, el campo de Colonia y en el balneario de Punta del Este, a veces apodado el Miami de Uruguay, donde hay una mayor variedad de escuelas”, detalla la nota.
Parte de la atracción que tiene Uruguay para el turista multimillonario son las exenciones fiscales. Se trata de una política impulsada explícitamente por el presidente Luis Lacalle Pou, ampliadas durante sus primeros meses de gobierno. Una de las medidas, por ejemplo, fue recortar la inversión mínima necesaria para clasificar a la residencia fiscal, que pasó a valer US$380.000, a la vez que se redujo la estadía mínima requerida (de 180 días pasó a 60).
Los residentes que clasifican para vivir en Uruguay también están exentos de pagar impuestos a ingresos extranjeros por hasta 11 años, además de que no se aplican impuestos a las ganancias de capital ni riqueza sobre los activos extranjeros.
Pero la nota de Stott también enfatiza en la seguridad y los servicios públicos que ofrece aquel país, además de la estética del lugar: las playas de arena blanca, una “floreciente escena artística y gastronómica”, y un grupo de resorts estilo boho-chic comparable a St. Tropez.
Un proyecto para atraer argentinos
“Hasta ahora, los argentinos que se fueron a vivir a Uruguay eran generalmente los más ricos —contó Bastitta al medio británico—. Pero este proyecto está diseñado para ser muy accesible para que cualquier persona en la región, no solo en la Argentina, venga a vivir aquí”.
El complejo que está construyendo Bastitta contará con 500 departamentos, de los cuales los más pequeños serán de 35 metros cuadrados y se venderán por US$70.000. Quienes deseen comprar una de estas propiedades podrán acceder a una hipoteca a 22 años con tasa fija del 4,5% y un depósito de tan solo US$20.000, “algo impensable en Argentina, donde las tasas de interés son las más altas del mundo con un 133%, y las hipotecas en moneda local son imposibles”, detalla el Financial Times. Por otro lado, las unidades más grandes valdrán entre US$100.000 y US$400.000.
Aunque ya se vendieron más de las tres cuartas partes de las propiedades —y el 60% de los compradores son argentinos—, el proyecto empezará a construirse dentro de poco, y estiman que se termine para 2025. Bastitta comentó: “Se prevé traer otros 30.000 habitantes a Colonia, es decir, duplicar la población de la ciudad y su superficie. Es un proyecto encantador”.
Argentinos en Uruguay
Varios argentinos contaron las razones por las cuales decidieron cambiar su residencia. Facundo Garretón, por ejemplo, es un empresario y exdiputado (PRO argentino, fundador y CEO de Terraflos, y uno de los impulsores del negocio del cannabis en el país. Tras las elecciones de 2019 y el triunfo peronista, tomó la decisión: “Dije: ‘No quiero vivir en un país donde la gente elige gobiernos así’. Estaba pensando que pasaría un desastre como el que vive hoy la Argentina. Ese fue mi motivo principal. Me fui a Uruguay e hice todos los trámites para ser residente”, le contó al Financial Times.
El éxodo argentino aumentó desde que Mauricio Macri dejó el poder y, de hecho, en 2020 se triplicó. En 2021, llegaron a 12.489 y se estima que, durante los cuatro años del gobierno de Alberto Fernández, más de 30.000 argentinos se mudaron a Uruguay.
Gustavo Grobocopatel, uno de los mayores productores agropecuarios del país, también se expresó al respecto y sostuvo que existe una tradición de políticos e intelectuales argentinos que buscan exiliarse en Uruguay que data del siglo XIX. En la nota cuenta: “Elegí Uruguay porque en cierto modo es como la Argentina. El lado cultural, las amistades, las creencias, los valores son muy similares”.
Según las fuentes que pudo contactar Stott, aunque muchos no quieren contar las razones por las cuales se mudaron, en privado comentaron que dos cuestiones de peso fueron “los gobiernos de izquierda y los altos impuestos”.
Mientras que algunos argentinos esperaban la llegada al poder una centroderecha para volver a su país, el triunfo de Javier Milei frustró las esperanzas de más de uno. En la nota, el periodista cuenta: “La convincente victoria de Milei ha llevado a la Argentina hacia aguas inexploradas, con el libertario decidido a embarcarse en un programa de reforma económica radical a pesar de que carece de una mayoría en el Congreso y de que enfrenta una poderosa oposición de los peronistas, que han dominado la política argentina desde que el país regresó a la democracia en 1983″.
De hecho, Garretón sostiene que el problema del éxodo es que ya no se trata solo de ricos o millonarios, sino que el problema está en que hoy se va la gente con el conocimiento para desarrollar negocios innovadores.
Sin embargo, esa tendencia también encuentra resistencia entre los que ya eligieron cruzar el Río de la Plata e instalarse en Uruguay. “Que vengan todos los argentinos que quieran. Pero que no traigan consigo sus hábitos electorales”, dijo a Stott otro líder empresarial.
Otras noticias de Uruguay
Más leídas de Economía
Paso exitoso. Puso a las vacas en galpones y con robots y el cambio fue impactante
Nueva era para el gas. El Gobierno inauguró "la última obra financiada por el Estado”
Minuto a minuto. A cuánto cotizó el dólar este lunes 4 de noviembre
"La mejor inversión es en cultura". Martín Cabrales fue reconocido en la Legislatura porteña